Análisis de Record of Lodoss War. Un metroidvania con encanto basado en este conocido mundo de fantasía

Análisis de Record of Lodoss War. Un metroidvania con encanto basado en este conocido mundo de fantasía
Facebook Twitter Flipboard E-mail

¿Un metroidvania en el mundo de Record of Lodoss War? Parece cosa de magia, pero así es Deedlit in Wonder Labyrinth. No te dejes engañar por su estilo clásico, el juego guarda muchas sorpresas y bondades que desgranamos en este análisis.

Desde que supe de Record of Lodoss War me interesé muchísimo por la serie. Quizá porque no hay tantos anime de corte fantástico-medieval como pudiera parecer. Y, aunque usando todos los clichés que pudieras esperar, lo recuerdo con mucho cariño tanto por la construcción de su mundo como por su hermoso dibujo. No ha habido muchos juegos basados en la guerra de Lodoss, sin embargo, que hayan llegado aquí, ya que el boom de la serie se produjo allá por finales de los 80 y principios de los 90. Lo que nos lleva a Deedlit in Wonder Labyrinth. ¿Un metroidvania basado en la saga? Sí, es tan extraño como parece.

No diré que su historia me ha decepcionado, porque pocos metroidvania logran brillar en este aspecto y ya por los tráileres podía ver que no iba a ser el fuerte del juego. Apenas hay argumento aquí. Deedlit queda atrapada en una especie de laberinto onírico, donde solo su resolución y su fuerza de voluntad lograrán sacarla de allí. Pese a que el juego de Team Ladybug esté supervisado por el propio Ryo Muzuno y conecte con la novela Diadem of the Covenant, recorriendo este laberinto tendremos más la sensación de estar ante un desfile de personajes de la saga que hacen aquí su aparición forzada por ser recordados por los aficionados.

Lo bueno es que, quitando esta pequeña y esperada decepción narrativa, Deedlit in Wonder Labyrinth es uno de los metroidvanias clásicos que más he disfrutado de los últimos años. Primero, porque posee un pixel art de esos que enamora en una captura y embelesa aún más en movimiento. Y sí, hay aquí un poco demasiado de Symphony of the Night, porque todas esas animaciones de la capa de Alucard se replican, estelas vampíricas (aquí élficas) que dejamos a nuestro paso incluidas. No importa en absoluto cuando tenemos un juego tan concentrado. Esa es la palabra.

La corredora del laberinto

No considero a Deedlit in Wonder Labyrinth un juego corto, sino compacto. Después de obras indie correctas y notorias como Chasm, Timespinner, Sundered y demás títulos que llenan nuestro apetito, la obra de Ladybug comprime las idas y venidas del género en un desfile de niveles rápidos que no te hacen perder el tiempo. Tienes tus caminos secundarios que te llevan a descubrir nuevas armas o habilidades, pero todo sucede a un mayor ritmo que, en ocasiones, se agradece.

Un metroidvania con encanto basado en este conocido mundo de fantasía


Los jefes finales son los mejores momentos del juego, con patrones desafiantes y divertidos.
Los jefes finales son los mejores momentos del juego, con patrones desafiantes y divertidos.

También se agradecen enemigos que no están ahí para dejarse matar, sino que tienen patrones bien entretejidos y que buscan juntarse en una sala con otro enemigo que contrarreste sus debilidades. Puede que sí, Deedlit in Wonder Labyrinth dure en torno a las 6 horas, pero es posible que haya muerto tanto como en otros metroidvania que duplican o triplican esa cantidad. Principalmente, gracias a los jefes finales. Si el juego es bonito, los jefes son una auténtica belleza, sobre todo los que ocupan buena parte de la pantalla. Animaciones brutales y ataques dignos de un bullet hell. Pero, sobre todo, es que cada uno de ellos requiere su correcto aprendizaje y pocas veces te valdrá la estrategia vaga de golpear y curarte, a ver qué pasa. Algunos, incluso, es posible que puedan con tus nervios. Esa es gracias al sistema de curación, una de las mejores ideas del juego, que se entronca con los dos espíritus familiares que nos acompañan. El de aire, Sylph, el de fuego, Salamander. Combinarlos bien es un arte, porque cada uno nos permite absorber ataques enemigos del mismo elemento creando una dinámica que recuerda inevitablemente a la del genial Ikaruga y que le siente formidable al título (aunque no es la primera vez que la vemos, ya que ese Outland de Ubisoft ya había experimentado con ello).

Un metroidvania con encanto basado en este conocido mundo de fantasía

No se queda aquí este sistema, sin embargo: aunque también tenemos pociones, la forma más habitual de curarnos es llevar uno de estos espíritus al nivel 3 y utilizar la forma para ir subiendo nuestra vida. Un golpe y bajaremos un nivel, por lo que será importante crear una buena estrategia de conservar un elemento potenciado para tener curación pasiva en todo momento. Cuanto más avancemos por el laberinto, más exigente será el sistema, que se combina además con un puñado de ataques mágicos, no todos ellos muy útiles, y un arco que puede serlo un poco más, pero que a veces queda algo relegado a la resolución de puzles. Son pocos, pero bastante curiosos, que nos instan a encontrar el punto de rebote exacto de la flecha para activar ciertos mecanismos.

Deedlit in Wonder Labyrinth comprime las idas y venidas del género en un desfile de niveles rápidos que no te hacen perder el tiempo


No hay tantas armas ni habilidades como en otros metroidvania. Es una propuesta mucho más directa.
No hay tantas armas ni habilidades como en otros metroidvania. Es una propuesta mucho más directa.

Por todo ello, aunque la principal crítica de Deedlit in Wonder Labyrinth pudiera ser para muchos que es un juego corto en comparación a las clásicas 15-20 horas de un metroidvania, veo en él una buena decisión de diseño: comprimir la experiencia; evitar la repetición y más paseos de los innecesarios; ganando en el proceso un ritmo que pocos metroidvania logran. Lo hace, claro está, a costa de ese elemento de exploración, de ese grindeo que algunos jugadores disfrutan y de no tener tantos power-ups y secretos como sabe destilar el género.

Pero también lo hace, creo, único en su especie. En este 2021 donde el debate sobre si los juegos son demasiado largos sigue apareciendo en las portadas de las revistas, me gusta que todavía haya algunos estudios que se atrevan a destilar al máximo sus juegos: quedarse con lo bueno y rechazar lo reiterativo. Gracias a ello, he disfrutado cada minuto, cada nuevo enemigo y nueva fase. Como la propia Deedlit, este juego es rápido, más complejo de lo que parece a simple vista y lleno de encanto.

Rápido y muy intenso

Recomendado
Un metroidvania con encanto basado en este conocido mundo de fantasía

Record of Lodoss War: Deedlit in Wonder Labyrinth

Por: El equipo de 3DJuegos
Recomendado

Puede que Deedlit in Wonder Labyrinth sea un metroidvania corto y menos centrado en la exploración. Pero lo sustituye con un estilo vertiginoso, un diseño visual pixel art hermosísimo y más de una idea ingeniosa; además de contar con algunos de los mejores jefes finales que hemos visto en el género. En lo narrativo, no hace honor a la serie en la que se basa, más de conformar un desfiles de caras conocidas. Y aun así, lo hemos disfrutado de principio a fin.

5 cosas que debes saber:
  • Un estilo visual pixel art precioso, con muy buenas animaciones.
  • El sistema de elementos aire/fuego es muy original.
  • Combates contra jefes finales espectaculares y desafiantes.
  • Algo parco en exploración y power-ups, no tan ingeniosos.
  • La historia es anecdótica y no está a la altura de la serie en la que se basa.
Jugadores: 1
Idioma: Textos en inglés
Duración: 6 horas
Ver requisitos del sistema
Comentarios cerrados
VÍDEO ESPECIAL

12.876 visualizaciones

100 DETALLES OCULTOS de RED DEAD REDEMPTION 2

¿Qué detalles ocultos guarda Red Dead Redemption 2? En el video de hoy os presentamos más de 100 curiosidades distintas acerca de la aventura de Arthur Morgan y de John Marston que nos presentó Rockstar Games en 2018.