La invasión alienígena regresa a Wii... y con grandes promesas. Mejoras en IA, un apartado artístico renovado, más enemigos, armas inéditas, una historia emocionante, el mejor multijugador y una campaña duradera. Muchas de estas promesas se han cumplido. Otras no. Descúbrelo con nosotros en Conduit 2, la última esperanza "shooter" en lo que le queda de vida a Wii.
Metroid Prime 3, Red Steel 2, Goldeneye 007 y hasta una versión específica del arrollador Call of Duty: Black Ops. Desde que Wii se dio a conocer, no han sido pocas las desarrolladoras interesadas en la idea de sujetar un mando para apuntar y disparar hacia la pantalla. Una de ellas fue también High Voltage Software, que hace apenas dos años lo intentó con The Conduit, un decidido pero poco experimentado FPS que desde esta misma publicación definimos como un primer paso en la carrera de los desarrolladores de Illinois (EEUU).
Y, efectivamente, así lo fue. El anuncio de una secuela no tardaría en llegar, y prometía justo aquello que no había tenido su predecesor: un apartado artístico más trabajado, un mejor diseño de niveles, una más elaborada inteligencia artificial y el añorado soporte para el Wii Motion Plus. Unas promesas que el equipo estadounidense ha pretendido cumplir, no en todos los casos con gran acierto, pero sí lo suficiente como para hacer de Conduit 2 un correcto "shooter" en la máquina de Nintendo.
Regresa la invasión
Así pues, nos encontramos ante un videojuego cuyo mayor reclamo es una campaña individual que, en efecto, ahora dura más. En concreto, aproximadamente 6-8 horas donde recuperamos las hazañas del agente Michael Ford, justo donde las dejamos en The Conduit. Y eso sólo quiere decir una cosa: continuar la búsqueda del malvado John Adams para acabar con su misteriosa organización a la vez que combatimos contra los "aliens" que invaden el planeta.
Una tarea estimulante para cualquier usuario, aunque no podemos negar que la trama presenta síntomas de agotamiento y de falta de originalidad gracias a personajes poco memorables. A este respecto, el guión sigue siendo el propio de una película de ciencia ficción de serie B, pero que en esta ocasión innova introduciendo cierto sentido del humor, a veces insípido y en ocasiones brillante, gracias sobre todo a la intervención del actor Jon St. John (más conocido por dar voz al gran Duke Nukem).
Sea como fuere, no es un factor determinante para llevar al lastre a Conduit 2, más si goza de un sistema de apuntado impecable, como es el caso. Básicamente, nos encontramos ante la misma precisión de control que en el primer juego, con cuantiosas opciones que nos permiten personalizar la acción de cada botón, ajustar la sensibilidad de giro, la respuesta del nunchuk y hasta determinar el ángulo muerto.
Hasta aquí nada nuevo, salvo que ahora se soporta el uso del periférico WiiMotion Plus, que hace más sensible a la retícula de disparo, aunque hemos de decir que sin modificaciones serias en la experiencia de juego. Por tanto, los usuarios que no posean el dispositivo no sufrirán una gran pérdida... y es una pena, ya que el caso de Conduit 2 es otra prueba que se une a los ya numerosos casos en que el famoso artilugio no logra aportar nada a la jugabilidad.
Acompañando al control basado en el binomio wiimote-nunchuk (también se puede utilizar el controlador clásico), nos encontramos con una interfaz de juego renovada, marcada por un aire futurista que recuerda al plasmado en Metroid Prime 3: Corruption. Pero esto no es lo mejor, sino que podemos personalizarla a nuestro antojo, colocando los indicadores de vida, munición o el listado de objetivos en el lugar que nos plazca. Un detalle igualmente novedoso, aunque mucho menos importante que los añadidos introducidos en la campaña.
Seguimos gozando de cinco niveles de dificultad, con la posibilidad de modificarla sobre la marcha por si se nos atraganta una determinada porción del juego. Pero lo más relevante es que tenemos casi el doble de misiones que en el primer Conduit y una variedad de escenarios más acusada: pasando desde el entorno urbano de Washingon hasta los parajes típicos de China, los paisajes nevados de Siberia o las selvas tropicales de Centroamérica. Todo con jefes finales de descomunal tamaño al acabar cada fase, e incluso alguna que otra sección donde nos colocaremos detrás de una ametralladora montada sobre un avión en pleno vuelo.
El diseño de niveles ha mejorado al ser menos pasillero, pero también más confuso. Y he aquí uno de los factores que restan disfrute al producto, ya que no serán pocas las situaciones en que nos quedemos atascados sin remedio. La desorientación es tan grave en ciertos momentos de Conduit 2, que ni siquiera el indicador visual de objetivo (que nos muestra los metros para llegar hasta él) nos puede ayudar. Como resultado, llegará la tan temida frustración, que se acrecienta conforme se comprueba que tampoco gozamos de una mejor IA ni de un acabado brillante desde el punto de vista de la programación.
Es cierto que se pueden apreciar determinadas conductas en los rivales que nos llevan a pensar que algo se ha mejorado con respecto al predecesor. Ahora los rivales tiran mesas, se esconden tras ellas y disparan a ciegas con la voluntad de acertarnos... pero al final tan sólo resulta una pequeña ilusión en medio de lo sumamente genérico que es el juego dentro del género "shooter".
Incluso se puede llegar a la decepción cuando se aprecian la cantidad de "bugs" que contiene, los cuales son fruto o bien de un lanzamiento apresurado o de falta de interés en las filas de High Voltage Software. En cualquier caso, esto aporta una sensación de cierta dejadez que no deseamos a ningún juego. Y no queremos decir que Conduit 2 sea una obra inacabada, pero no le ha faltado mucho.
Tus armas contra los "aliens"
Los diseñadores pueden esgrimir en su favor que la campaña posee un número incrementado de armas con respecto a The Conduit, con exponentes tan destacados como un lanzacohetes, el cañón alienígena Hive (altamente destructivo a media distancia), torretas desplegables o rifles de asalto con mirilla telescópica. Inclusive nos hemos sorprendido con la aparición de un arma capaz de atravesar muros con sus disparos, aparte de que existe un rifle que, con su función secundaria, nos hace invisibles durante unos instantes.
Conduit 2 goza asimismo de ataques cuerpo a cuerpo para cuando estemos acorralados (eso sí, fatalmente implementados) y además nos propone una mayor variedad de enemigos, que ahora tienen hasta armaduras que romper. No obstante, el diseño artístico -como en la anterior entrega- sigue resultando poco inspirado (algunos parecen sacados de cierto juego de la competencia), con "aliens" que por supuesto no dan miedo, pero tampoco nada de repulsión. Y ese es uno de los grandes fallos de diseño que puede presentar cualquier videojuego: el no motivar al usuario para acabar con sus enemigos.
Tampoco es un error excesivamente grave, más considerando que Conduit 2, a pesar de presentar un esquema de juego donde lo más importante es avanzar y disparar, también dedica algo de tiempo a la exploración. En efecto, ahora, al ser los mapas más abiertos, podremos perdernos con más facilidad para hallar nuevas rutas que nos lleven al mismo destino.
Incluso puede que dediquemos más tiempo al uso del EVA (All-Seeing-Eye), un escáner que calca mucho de lo visto en la serie Metroid Prime y que nos sirve para abrir puertas, "hackear" terminales o encontrar desbloqueables que fomenten -aunque sea sólo un poco- la rejugabilidad del título.
Sin embargo, si lo que queremos es disfrutar de Conduit 2 más allá de la campaña, entonces os viene bien conocer que posee un interesante modo de juego a pantalla dividida para un máximo de cuatro usuarios simultáneos. Una bienvenida opción ideal para que cuatro amigos se reúnan frente al mismo televisor a fin de dirimir sus diferencias, aunque también apropiada para disfrutar de una de las mejores novedades de esta entrega: el modo invasión, que nos propone cooperar para superar oleadas alienígenas al más puro estilo Gears of War 2.
En segundo término, probablemente el apartado que más se salva del videojuego sea su vertiente multijugador online, en la que también destacó hace dos años. Se mantienen, por supuesto, todos los avances logrados entonces, entre ellos el aprovechamiento del Wii Speak para conversar con amigos mientras jugamos. Pero hay mucho más, como por ejemplo más mapas (en total son 12) y modos de juego que hacen de las batallas "a muerte" y por objetivos a sus grandes baluartes, ahora también con 8-12 jugadores simultáneos, dependiendo de si jugamos por equipos o todos contra todos.
Interesante es añadir que tenemos un sistema de progresión, de manera que podemos obtener puntos de experiencia para subir de rango, pero también créditos, muy útiles para adquirir armas, armamento y nuevas habilidades (correr durante más tiempo, recarga más rápida, disparos más poderosos, etc.). En definitiva, todo lo necesario para que volvamos una y otra vez a unas arenas online muy gratificantes.
Adicionalmente, con el fin de incrementar la seguridad (The Conduit recibió un ataque "hacker"), la compañía ha decidido integrar una función de actualización automática. De hecho, ya se puede descargar el primer parche, que esperemos en el futuro también pueda solventar algunos problemas de "lag" que hemos encontrado durante algunas de nuestras partidas.
Resulta digno de elogio que el apartado gráfico apenas se resienta cuando jugamos online, gracias al motor Quantum3, uno de los pocos motores que se han diseñado específicamente pensando en Wii. Y lo cierto es que, si hablamos de la campaña, los resultados son plenamente satisfactorios, con un "frame rate" estable que apenas se desmorona cuando aparecen varios cuerpos hostiles en pantalla.
La fluidez visual, en este sentido, es sobresaliente, así como efectos de explosiones y reacciones físicas de enemigos que -aunque a veces exagerados- logran aportar cierta sensación de realismo. El efecto de profundidad de campo que vemos al recargar el arma y otros detalles gráficos, como la lluvia del primer nivel, multiplican nuestra sensación de hallarnos ante un título que sabe exprimir la máquina de Nintendo, aunque no todo lo que esperábamos...
Con dos años de margen, creemos que High Voltage Software debería haber sido más ambiciosa, y no darnos un apartado gráfico que, aunque acertado, sólo logra mejorar sensiblemente lo visto en The Conduit. Esto, añadido a que el compositor tampoco ha brillado (con melodías pobres, vacías y carentes de personalidad) y a que los efectos sonoros también son -a veces- defectuosos, nos hace pensar que al estudio estadounidense se les han echado los meses encima con un "shooter" que, eso sí, aparece en tierra de nadie para ser adquirido por todos aquellos que, teniendo en cuenta que no es un FPS especialmente memorable, quieran aún darle una oportunidad.
A pesar de todo el esfuerzo dedicado por los desarrolladores estadounidenses, Conduit 2 no supera a su precedesor. Con dos años de margen, se esperaban sustanciales mejoras de IA, una campaña más satisfactoria y un mejor apartado artístico. No obstante, esta secuela sólo conserva los excelentes atributos del anterior juego: gran control con wiimote, buenos gráficos y un excelente multijugador. El tiempo no perdona. En estos últimos compases de Wii, se esperaba mucho más de un "shooter" (sobre todo después de ver lo que han hecho otros FPS), pero aún así puede ser una buena adquisición para los amantes del género y aquellos que disfrutaron con la invasión de The Conduit.
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