Basim ya ha recogido suficientes pistas y tiene lo necesario para poner fin a la vida del sieguiente miembro de la Orden que opera en Bagdad en Assassin's Creed Mirage: Al-Pirika, la tesorera y aficionada a los objetos exóticos que opera en el barrio de Karj. El plan es acercarnos a ella haciéndonos con un objeto que se subastará en el Darai' Al-Mat (la gran subasta) y del que nuestro objetivo se ha encaprichado. En esta guía os explico cómo llegar hasta ella y eliminarla.
Cómo encontrar a Ning, alias Al-Pirika, en la Gran Subasta
Después de completar tanto la investigación para ayudar a Kong para que nos proporcione una invitación a la Gran Subasta, como esclarecer quién está detrás de la extorsión a los mercaderes en el Gran Bazar, Basim retorna a la Guarida de los Ocultos en Karj para informar tanto a Rebekah como a Rosham.
Con todos los elementos en posición para empezar el asesinato de la tesorera de la Orden (a quien parecen apuntar todas las evidencias) es hora de poner el plan en marcha. Consiste en asistir a la Gran Subasta y determinar con precisión quién es realmente el tesorero al que hacen referencia las pesquisas, y poder acercarnos a donde está para eliminarlo. Esta primera parte del plan consiste en hablar con Roshan cerca del Gran Bazar tras el informe en la guarida de los ocultos y hablar con ella para comenzar la operación.
Mariposas Doradas
Antes que nada, advertiros que si no habéis sido muy dados a practicar el robo a largo del juego, empecéis a hacerlo ahora y en gran cantidad. La razón de hacerlo es que, si queremos obtener el objeto que nuestro objetivo ansia para poder acercarnos a ella vamos a tener que pujar por él. Necesitaréis un mínimo de 650 dhírams.
Al estar en el Gran Bazar, es muy sencillo encontrar víctimas que lleven tesoros de gran valor, y además tenemos un buen número de comerciantes en la zona que estarán más que encantados de llenar nuestros bolsillos con dinero por estas bagatelas. Tampoco es necesario que los acumuléis ahora pero bolsa dorada que veáis con la vista del águila, bolsa que deberíais sisar. Entre tanto, si empezamos los preparativos para nuestro asesinato, en una de las calles interiores del Bazar distinguiremos a Kong.
Quiere que obtengamos un plato de Luca, su competidor, para poder hacerse con una buena suma de dinero a cambio de cierta información sobre nuestro objetivo. El plato que nos interesa está en el almacén del susodicho Luca, que está en los tenderetes exteriores del gran Bazar al Suroeste (cuando estemos cerca oiremos a Luca hablar con una colega comerciante)
Activando la vista de águila vemos que el plato está en un piso superior al que no podemos acceder por métodos convencionales. Sin embargo, a la estancia a la que sí podemos entrar hay un estante móvil que podría servirnos para llegar al piso de arriba si lo movemos. El problema es que hay una barricada que nos impide mover el estante a donde queremos.
Lo que hay que hacer es mover el estante hacia las paredes que separan la mercancía dela estancia, pues en la estructura superior hay unas tinajas inflamables que podrían servirnos para reventar la tapia del muro y pasar el estante móvil por el.
Una vez hayamos pasado el estante, hay que colocarlo en la parte izquierda de la salida que da al noreste según atravesamos el acceso que hemos abierto con la tinaja inflamable. De ese modo podemos encaramarnos al estante y agarrar el saliente del piso en le que se encuentra el plato que quiere Kong. Cuando lo tengamos, sólo hemos de devolvérselo.
El siguiente paso es seguir recabando información de nuestro objetivo. Si vamos hacia el sur desde el puesto de Kong con la vista de Águila activada, notaremos que se resalta una figura femenina. Llegando hasta donde está, vemos que se activa la opción de espiar lo que ella y su ayudante están discutiendo.
Hay un banco cerca que podemos usar para escuchar lo que dicen. No obstante prefieren seguir la conversación en un lugar más privado. En este punto tenemos que seguirlas hasta que llegan a un área de descanso del Bazar. Sentándonos en el banco que hay justo afuera de donde están las dos mujeres podremos terminar de escuchar lo que dicen
Resulta que la tesorera, nuestro objetivo, es aficionada a usar perfumes, y las dos mujeres son las creadoras de la Qina, el que la tesorera usa. Emplean sangre para la fragancia, de ahí los olores que Basim ha ido percibiendo en todas las notas que la tesorera dirigía a Al-Kullulu y Al-Anqa. Cuando la ayudante se marche, podemos hablar con la creadora de los perfumes para recabar más información.
Todavía nos falta algo clave, y es saber con exactitud el objeto por el que debemos pujar para tener acceso a la Tesorera. En dirección norte, desde el lugar en el que hemos conversado con la creadora de perfumes, hay un comerciante extranjero que nos ofrece subir al piso en el que tiene sus mejores existencias y de las que espera sacar un buen pellizco por ellas en la gran subasta.
Revisando el género, Basim se percatará de la presencia de unas exquisitas horquillas, entre las cuales está la que los esbirros de Al-Kullulu buscaban con tanto ahínco en el puerto cuando fuimos a acabar con él. Con esta información en nuestro poder y tras haber completado las otras tareas previas que hemos ido repasando, ya podemos acudir al patio central del Bazar y sentarnos en un banco a Esperar a que dé comienzo la subasta. Pero antes de hacer eso, os recuerdo que necesitamos dinero, así que antes de sentaros, buscad a un comerciante y vendedle todas las baratijas que hayáis acumulado en vuestros hurtos; recordad, necesitamos un mínimo de 650 dhírams.
Tras sentarnos en el banco indicado, no pasa mucho hasta que el subastador presente la horquilla que nos interesa. La tesorera Ning también ha acudido a la subasta, y tanto ella como otro asistente están interesados por el adorno. Inicialmente pujaremos una cantidad de 150 dírhams, pero ante la insistencia del otro pujante debemos aumentar la oferta a 500. En principio, no deberían presentarse más pujas, con lo que la baratija es nuestra y una vez concluida la subasta la tendremos en nuestro inventario.
Ahora que tenemos algo que le interesa a la tesorera, deberíamos pedir una audiencia con ella con el pretexto de llegar a un acuerdo para vendérsela. Si nos dirigimos a las oficinas de la tesorería en el bazar (siguiendo el indicador de la brújula), veremos que un guardia no deja pasar a nadie que no lleve un broche de la moneda de marfil.
Obviamente, no podemos entrar sin él, así que deberíamos buscar uno o saber si alguien del bazar conoce de su existencia para utilizarlo a modo de credencial para pedir una audiencia.
Cómo conseguir el broche de la moneda de marfil
No sabíamos nada de este tipo de autorización, y por ahorraros un poco de tiempo registrando el Bazar, sabed que hay una comerciante que tiene conocimiento de esos medallones. Podéis encontrarla en la posición que os indico en la imagen que sigue a este párrafo.
Tras hablar con la comerciante, aprendemos que puede que haya alguno de esos medallones en las oficinas de la shurta en el Gran Bazar. Obviamente, es una zona restringida, pero por suerte la seguridad no es muy estricta. Se puede acceder al pequeño patio interior trepando por cualquiera de las paredes laterales.
Después, con sigilo, todo es ascender por los andamios, estantes y cornisas hasta alcanzar el balcón que indica la entrada a las oficinas para poder rastrearlas en busca del mencionado medallón que nos dará acceso a una audiencia con la tesorera.
En el interior de las oficinas, si activamos la vista del Águila leemos más documentos que nos dan información sobre Al- Pirika, pero lo que debemos hacer es ascender por los andamios y cajas de mercancías que hay en el entorno para colarnos por el techo hasta la estancia en la que está la oficina principal.
El oficial al cargo está reprendiendo a un subordinado, y si hay un medallón cerca, o bien está en su poder o bien en la mesa que ocupa. Debemos esperar a que el subordinado se aleje para caer sobre él para realizar un asesinato sigiloso; en la mesa está el medallón que buscamos y todo lo que hay que hacer es tomarlo. Luego podemos disponer también del subordinado y salir de la zona.
Con el medallón en nuestro poder, si volvemos a donde estaba el guardia de la oficina de la tesorería, ya no tendremos problemas para entrar. Tenemos que seguirlo hasta la sala de audiencias de la tesorera, pero ni se os ocurra entrar a ella antes de que seáis llamados o todos los guardias que hay ahí reunidos se abalanzarán sobre vosotros.
Ahora, ya sólo falta esperar una oportunidad para acabar con la tesorera, y se presenta sola. Comenzamos a hablar con ella acerca de varios temas que sabemos que le interesan (perfumes, adornos...) y eventualmente nos dará la espalda, momento que debemos aprovechar para pulsar RB/R1 y poner fin a su existencia, aunque dicho sea en su favor, Al-Pirika trató de defenderse y no mostro miedo como los anteriores.
Con el objetivo eliminado, sería el momento de marcharse, el problema es que los guardias acudirán a ver qué ha ocurrido. Podemos intentar luchar o huir, pero por facilitarnos ambas opciones, lo mejor es emplear una bomba de humo cuando varios guardias nos rodeen y usar el asesinato sigiloso en el humo para acabar con la mayoría o dejar sólo a uno o dos con los que lidiar.
Con los guardia eliminados y antes de que lleguen refuerzos, debemos ser raudos y escapar de la zona para volver a la guarida de los Ocultos del barrio de Karj e informar a Roshan y Rebekah del éxito de nuestra operación.
Si queréis saber cómo superar otras misiones de la trama de Assassin's Creed Mirage, os recordamos que tenemos una guía completa del juego en la que tratamos o iremos tratando a medida que progresemos por el juego, el resto de misiones y actividades secundarías del juego de Ubisoft.
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