Imaginativo como pocos, el cada vez más popular Minecraft continúa atrapando a miles y miles de jugadores de todo el mundo en su cúbico universo en el que todo es posible con un poco de paciencia. ¿El límite? Tu imaginación y las ganas de explorar un peligroso mundo capaz de sorprender constantemente.
Seguramente si al padre de Minecraft, Markus “Notch” Persson, le hubieran comentado a principios de 2009 que esta obra tan personal iba a convertirse en todo un éxito de masas sin ni siquiera haber alcanzado el estatus Gold, es decir, de juego terminado, sin duda habría tachado de locos a más de uno. Pero la verdad es que el tiempo le ha dado la razón, y su arriesgada apuesta de lanzar un juego en estado Alpha con el objetivo de ir moldeándolo en base a las sugerencias y peticiones de los usuarios ha funcionado a las mil maravillas. Más de dos millones de usuarios disfrutan a diario de su retro universo cúbico, pero lo más importante es que con ellos están naciendo un sinfín de modificaciones y aplicaciones que han logrado encumbrarlo al podio de los más grandes entre los usuarios de PC. ¿Pero qué ha hecho que este título sea definido por figuras tan ilustres como Peter Molyneux como una de las más grandes innovaciones de la década?
El límite lo pones tú
Estás sólo, en medio de un vasto mundo sin explorar y repleto de vida salvaje. No tienes armas, ni herramientas, ni alimentos que llevarte a la boca ni… las manos, ellas son tus únicas herramientas; al menos al principio. Pero lo peor es que un simple aviso te pone en tensión. “Al caer la noche, los monstruos aparecerán”. ¿Qué hacer? ¿Cómo escapar de ellos si no tenemos nada con lo que defendernos? Y aquí es cuando empieza a brillar Minecraft. Haz lo que te dé la gana. Crea el mundo que quieras; sobrevive como desees y construye todo aquello que consideres susceptible de ayudarte en esta inmensa aventura de exploración.
Esta obra de Notch no tiene un objetivo claro más allá del de sobrevivir, y tal vez éste sea uno de los aspectos que deban pulirse de cara a la versión final de Minecraft. Sobre todo porque no existen ayudas en pantalla que te indiquen qué debes hacer o por dónde debes empezar para construir un refugio. Al final, será la propia comunidad del juego la que facilita esta labor con vídeos, guías o foros de discusión que no dejan de crecer día a día con nuevas recetas y fórmulas para crear todo lo que os podáis imaginar y mucho más. Y es que a fin de cuentas, de eso se trata.
¿Tenemos que cavar? Pues creemos una pala con un sencillo sistema de crafting y así realicemos esta labor con mayor presteza. ¿Hay que talar árboles? Pues consigamos un hacha. Y lo mismo si queremos picar minerales, atacar enemigos, protegernos de sus ataques, recoger materias primas… el sistema de elaboración de objetos es tan completo y sencillo (consiste en distribuir de forma concreta sobre un tapiz distintos recursos) que llegado el punto, podemos fabricar complejas redes ferroviarias o elaboradas trampas con las que poner fin a la vida de nuestros enemigos y recuperar sus tesoros sin necesidad de ponernos en peligro.
Y lo mismo se puede decir si hablamos de las construcciones que se pueden crear. Y es que como si de un juego de LEGO se tratara –por las formas cúbicas de los bloques que usamos-, en Minecraft podemos crear prácticamente todo lo que se nos ocurra y convertirlo en la mejor de las casas. ¿Nos gustan los castillos? Pues ale, ya podemos empezar a picar piedra para dar forma a nuestro sueño. ¿Tenemos ambiciones más mundanas y actuales? Pues gastemos lo menos posible y amoldémonos a la vida en casas de tres por tres en las profundidades de una cueva (con vistas al mar, eso sí).
El poder del usuario
Hasta este punto hemos hablado de la base de Minecraft, pero son sus jugadores los que, gracias a las herramientas de edición que presenta, están encumbrándolo a lo más alto. Ya sea gracias a la elaboración de infinitas modificaciones que mejoran la apariencia gráfica del título o añaden nuevos estilos visuales, o con la implementación de nuevas rutinas jugables, el potencial de esta obra de Notch no parece tener fin; sobre todo si se disfruta en compañía de otros jugadores de forma amistosa, esto es, creando construcciones en grupo, o disputando emocionantes duelos entre clanes.
Como decimos, hay infinidad de mods que se pueden descargar libremente. Este tipo de modificaciones pueden quedarse en lo meramente estético, añadiendo por ejemplo un estilo visual en alta definición, con una hierba más frondosa o incluso asemejándolo todo al universo Castlevania (con su banda sonora incluida). Pero también hay espacio para otro tipo de mejoras que sí tienen importancia a nivel jugable. Así, por ejemplo, podemos conseguir añadidos interesantes como la posibilidad de encontrar nueva vegetación o árboles que generarán alimentos como naranjas, manzanas, cocos o piñas –si se comen directamente sin cortar nos restarán salud-, o pasar directamente a nuevos tipos de desafíos con actualizaciones que homenajean a títulos como Portal, permitiéndonos realizar el mismo tipo de acciones que el éxito de Valve.
Antes hablábamos de la imaginación como única barrera frente a las posibilidades que brinda Minecraft, y sin duda las creaciones que están publicando los jugadores dan fe de ellos. ¿Dead Island sorprendió a todo el mundo con su impactante tráiler cinemático? Pues ahí tenemos una versión del vídeo estilo Minecraft. ¿Se ponen de moda los juegos sociales? Pues ahí están los mods destinados a añadir opciones como la domesticación de animales o la posibilidad de tener novia, que nos avisará de peligros, curará las heridas, etc.
Minecraft es un universo vivo en constante crecimiento. Las bases jugables están muy presentes y no dejan de expandirse con las sugerencias de los usuarios que ven cómo las actualizaciones oficiales llegan de forma regular; pero las ansias por seguir explorando sus posibilidades y la necesidad de dar rienda suelta a la imaginación, son las que están logrando que este intrigante universo cúbico se haya ganado el corazón de miles y miles de jugadores. Y todo esto pese a contar con un apartado gráfico que de primeras echaría para atrás a más de uno. Pero qué narices, al final se le coge cariño a este universo cúbico y pixelado en el que todo tiene una estética tan retro que los más veteranos sentirán auténtica nostalgia.
Además, como decíamos anteriormente, siempre tenemos la posibilidad de mejorar la apariencia con alguno de los muchos mods que se han creado y que ofrecen una variedad de opciones realmente encomiable. Eso sí, aunque hay muchos usuarios que sienten que el apartado audiovisual está bien tal y como se encuentra actualmente, también son muchos los que reclaman ya una actualización gráfica y un mayor nivel de atención por la banda sonora y efectos de sonido, que son sin duda la peor parte del universo Minecraft.
¿Qué depara el futuro?
El próximo 11 de noviembre, si todo sale según los planes del equipo de Notch, Minecraft se lanzará en el mercado abandonado la ya dilatada fase beta en la que se ha visto inmerso durante este tiempo. Y aunque las mejoras no han dejado de llegar al juego, es inevitable preguntarse ¿qué nos depara el futuro de Minecraft? ¿Qué debemos esperar de su versión final? Está claro que sus creadores seguirán aportando más y más novedades como la reciente llegada de los mapas para explorar el universo al juego, o los efectos climatológicos pero… ¿hay espacio para las sorpresas? Nosotros creemos que sí, y a la vista está a tenor de los resultados obtenidos por los aficionados con las herramientas de edición.