Podría parecer que la virtud de Wolfenstein 2: The New Colossus está en que no arriesga, pero sería una conclusión superficial para un juego que ha decidido tomar todo lo que hizo bien en la primera entrega y potenciarlo con nuevas mecánicas marca de la casa. Puede que no exista una empresa más tradicional en el género del FPS que Machine Games, y su falta de complejos sobre la actualidad de la acción se demuestra en cada minuto a los mandos de su nuevo videojuego. Te lo contamos en nuestras impresiones jugables.
Podríamos pensar que la principal batalla de Wolfenstein 2: The New Colossus la libra William J. Blazkowicz en la utopía creada por Machine Games en el año 1962 contra la supremacía nazi, pero creo que nos equivocaríamos; la batalla la libra Bethesda en otoño de 2017 en las tiendas con dos compañeros inusuales de estantería el 27 de octubre, Assassin's Creed Origins por un lado y Super Mario Odyssey por el otro. ¿Es arriesgado lanzarse a los comercios en las presentes fechas? Sin duda, pero parece que a la editora americana le preocupa poco o nada, así que solo nos queda confiar en las virtudes de la secuela de The New Order, que las tiene.
¿Hay motivos para creer en ellas? Claro. Ya os lo contaron Alberto Pastor y Alejandro Pascual en el pasado E3 2017 y un servidor hace algo más de un mes: el equipo de Machine Games ha apostado por más y mejor para crear la esperadísima secuela de su grotesco futuro nazi, tomando todo lo bueno que hizo en la primera parte y elevándola a un nuevo nivel técnico y jugable. Además, la carga narrativa, ya importante en el anterior episodio, toma un nuevo protagonismo aquí con tres horas de vídeo para profundizar en su particular trama.
Con lo mostrado y jugado en el avance disfrutado en las oficinas de Bethesda, el contacto con la resistencia de Horton, ya hemos completado todas las secciones que se vieron en el extraño primer tráiler del juego en el pasado junio: el despertar de William J. Blazkowicz, la visita a Roswell y el enfrentamiento contra las hordas nazi en Nueva Orleans. Lo bueno, a poco más de un mes del estreno, es que es muy probable que no hayamos visto ni la cáscara de Wolfenstein 2 aún, lo que a día de hoy, en un momento en el que acabamos sabiendo mucho más de lo que nos gustaría de nuestros videojuegos favoritos, sin duda, es una grata noticia.
Blazko VS. The World
Una nueva misión nos lleva a Nueva Orleans para contactar con el jefe de su resistencia. Tras pasar el gigantesco muro perpetrado por los nazis que rodea la ciudad, deberemos acabar con las defensas enemigas para reunirnos con el padre Horton, que nos presentará a los miembros de su equipo y nos lanzará a una nueva misión: tomar un Panzerhund armado con lanzallamas y perforar las líneas enemigas con violencia y fuego. Nos llevó algo más de 40 minutos entre cinemáticas y pruebas el acabar la demostración, jugada en ordenador y presentando un gran acabado.
Lo primero que os puedo garantizar es que Wolfenstein II, con todo lo que conlleva la presente afirmación, es una secuela a la altura de lo esperado. Si nos quedamos con lo que se ve a simple vista, The New Colossus te permite retomar la historia de The New Order con mecánicas similares, pero con un buen puñado de elementos que te permite ser mucho más versátil en la acción y las mecánicas jugables, adaptándose a los deseos del jugador según sus preferencias en el campo de batalla. ¿Infiltración? Puedes hacerlo. ¿Repartir pólvora como un loco? También, y no te cortes: hay balas e ira para todos.
Para ello tenemos, de nuevo, un sistema de progresión que ayudará a mejorar las habilidades de combate de Blazkowicz según cumplamos ciertos objetivos. Se han separado en tres campos las mejoras a las que aspira el jugador: infiltración, violencia y conocimiento táctico. Según el tipo de juego que practiquemos, más mejorará Terror Billy durante el transcurso de la partida. Son seis habilidades distintas por cada uno de los campos, por lo que las posibilidades de mejorar y crear tu propio protagonista son muy libres y te permitirá, de hecho, rejugar el videojuego para probar todas las opciones.
La variedad de amenazas y enemigos es enorme
Las armas también pueden ser mejoradas gracias a puntos de mejora que iremos encontrando a lo largo de la campaña. Como podrás imaginar, las diferencias entre una convencional y una totalmente mejorada son enormes. La posibilidad de combinar, de nuevo, armas en combate es una delicia para el transcurso violento de Wolfenstein 2: todo en la obra está construido para que seas un auténtico animal, acabando con los distintos enemigos de las formas más crudas, otorgándote una creatividad inimaginable en el pasado capítulo. Si de algo nos ha servido probar de nuevo Wolfenstein 2 es para confirmar que la variedad de amenazas y enemigos es enorme. No descartéis que haya más en la recámara.
Apostando por la old school
Algo que me gustó mucho de Wolfenstein: The New Order fue su falta de escrúpulos a la hora de seguir las tendencias típicas del género. No es algo nuevo en el equipo: Machine Games está compuesto, en su mayoría por algunos de los más talentosos creadores de Starbreeze, creadores de producciones como Las Crónicas de Riddick en Xbox o The Darkness en la pasada generación. Jens Mathies, director creativo de Wolfenstein 2: The New Colossus, de hecho, fue el guionista tras las citadas obras, y su mano se nota en muchos puntos de la narración.
Más allá de las cinemáticas y la narración tradicional, bebe de los grandes del género al contar una historia con sus escenarios y capturando la esencia de personajes delirantes como Paris Jack, The Professor o Sigrun Engel, hija de pérfida Frau Engel. Puede que Nueva Orleans no se prestase tanto a la exploración y las sorpresas como lo hacía Roswell, pero la realidad es que la magnitud del muro, la destrucción de la propia urbe y el escenario en el que nos espera Horton junto a sus revolucionarios, tiene más clase y carisma que muchos programas lanzados al mercado en la actualidad. Todo el conjunto desprende carisma.
No os puedo contar mucho sin destriparos, pero será interesante ver cómo los nazis utilizan toda la maquinaria propagandística para acabar con la resistencia y elevar los valores arios en el territorio dominado. Figuras de acción en las que Blazkowicz es el villano, las piezas de publicidad que están haciendo viral en los últimos meses o una película que narra las desventuras de The New Order desde el punto de vista nazi son algunos de los instrumentos que podremos ver en The New Colossus. Bien utilizados, son elementos que pueden otorgar una nueva dimensión y profundidad a la historia del título. En manos de Machine Games, puede ser la bomba.
Ya explicaba el propio Mathies en una entrevista en el pasado E3 que Wolfenstein 2: The New Colossus "es lo mejor que hemos podido hacer a la hora de mezclar jugabilidad y narración en un videojuego". Si es cierto, y viendo el talento que hay en la firma sueca, podemos estar uno de los grandes de 2017.