La Cuarta Cruzada es un evento que no se ha explotado casi nunca en los videojuegos, y The Cursed Crusade recoge todo el brutal combate de aquella época. Hack and Slash de la antigua escuela para destruir a nuestros enemigos en un atípico contexto medieval y con un siempre interesante modo cooperativo.
Los chicos de Kylotonn están desarrollando The Cursed Crusade para Atlus, un videojuego que probablemente no destrozará los tops de ventas pero que parece que sí podría hacerse con un hueco en el no demasiado atestado mercado de Hack and Slash por el que los aficionados a este virulento género suspiran.
Ambientado en la época de la Cuarta Cruzada del siglo XII, el título que nos ocupa apuesta por la violencia elevada a la enésima potencia y por unos combates crudos y crueles de los que obtendremos sus máximos réditos en el juego cooperativo. La historia deja paso a la acción más descarnada en un título a tener en cuenta.
Cruzadas Malditas
Lo que en estos momentos principalmente tiene The Cursed Crusade es un potencial muy interesante para convertirse en un notable exponente del género Hack and Slash. En las presentaciones a la prensa se está mostrando el videojuego corriendo en PC, y comenzando a presentar un buen aspecto teniendo en cuenta el primitivo estado de desarrollo en el que se encuentra el programa.
En el título encarnaremos a dos personajes, Denz y Esteban, dos caracteres a los encarnaremos en el cooperativo en su misión de buscar al padre del primero. ¿El motivo? De momento no hay muchos datos al respecto, pero todo parece indicar que su rol será clave para hacer desaparecer la maldición que da nombre al videojuego, y que asola al pueblo al que pertenecen los dos héroes. Esta premisa nos llevará a través de 30 niveles ciertamente lineales, pero con abundantes rincones que explorar para descubrir los extras del título y las mejoras del personaje.
El título trata de huir del siempre despectivo apelativo de machacabotones, y lo consigue con un planteamiento algo más estratégico de lo que este tipo de videojuegos acostumbra a ofrecer. Se acabó el llevar a cabo combos simples y automáticos para abatir a nuestros oponentes, cada uno de ellos requerirá de unas mecánicas diferentes para ser derribados y nuestro deber será descubrirlas, memorizarlas y ejecutarlas.
Habrá que estar atentos, no obstante, también al estado de las armas; y es que si no las cuidamos debidamente y no nos ocupamos de su mantenimiento éstas acabarán fallándonos en el momento menos indicado. Además habrá que estar atentos a los puntos débiles de las de nuestros enemigos, y es que podremos utilizar nuestra fuerza para quebrar, por ejemplo, un escudo y dejarlos indefensos. Así pues la elección de un arma apropiada para el combate puede ser tan fundamental como la propia habilidad manejándola: Podremos equipar a nuestro personaje con un buen abanico de alternativas en este sentido, con espadas, mazas, escudos y ballestas entre otros muchos elementos.
La violencia que estas armas producirán sobre los cuerpos de nuestros enemigos será totalmente desaforada, en el que es sin duda uno de los puntos fuertes del videojuego. La interacción con el escenario en este sentido será máxima, pero no tanto en el sentido de unos entornos destructibles como en el de permitirnos emplear algunos de sus elementos para acabar con nuestros enemigos. ¿Ejemplos? Antorchas que podremos utilizar para prender en llamas los rostros de nuestros enemigos, fosos a los que arrojarlos o incluso barriles que estrellar en sus testas. Una violencia que así descrita puede sonar a mil veces vista, pero que representada en movimiento resulta de lo más feroz.
The Cursed Crusade se pondrá a la venta presumiblemente en un momento por determinar del segundo semestre de este año. Veremos si con él tenemos una oferta de calidad para el algo escaso género Hack and Slash a lo largo de 2011.