La pésima optimización, las incidencias con AMD, los cuelgues y muchas otras incidencias ponen al juego en el punto de mira.
El lanzamiento de Batman: Arkham Knight no está siendo, ni mucho menos, placentero para Warner Bros. y es que la versión PC está siendo fuente de infinidad de críticas por su pobre acabado final y su pésima optimización.
Los aficionados protestan por un bloqueo de 30 frames por segundo en la versión de compatibles, así como por algunos bloqueos y salidas inoportunas al escritorio. Además la optimización del programa no parece adecuada a los requisitos que solicita y, por si fuera poco, a última hora se han actualizado los requisitos afectando a las tarjetas AMD que están siendo particularmente problemáticas con el rendimiento general del programa.
Lo curioso del caso es que si llevamos a cabo el benchmark propio que incluye el propio videojuego con un equipo de gama alta, los resultados son extraordinarios con una tasa de imágenes por segundo de 60 frames, sin embargo al arrancar el juego éste se bloquea en un máximo de 30. Lo que no sólo hace de la herramienta algo totalmente inútil, sino que además lleva a pensar en que el juego puede dar mucho más de sí y que con un parche se acabará corrigiendo este problema.