Activision lo está poniendo todo de su parte para tratar de darle la vuelta a la situación de Call of Duty: Black Ops 7, pero no parece que sus esfuerzos estén sirviendo para nada. La compañía ha llevado a cabo movimientos tan agresivos como la introducción de la actualización más grande de la historia de la saga o una promoción que permite disfrutar de todo el contenido del multijugador y los zombies de forma gratuita. Eran ideas que debían aumentar sustancialmente el número de usuarios, pero que han terminado demostrando que este año el público no está en absoluto interesado en la saga. Lejos de ser un golpe en la mesa, ahora la duda es si la entrega del año que viene podrá acabar con la fatiga.
Black Ops 7 parece insalvable
De acuerdo con los datos recopilados a través de SteamDB, la prueba gratuita de Call of Duty: Black Ops 7 que comenzó el pasado 16 de diciembre no ha aumentado el número de jugadores de forma considerable. Si utilizamos como referencia el miércoles de la semana pasada y el de la actual, antes y después de la promoción, vemos que la versión 'free to play' solo ha tenido 800 usuarios simultáneos más (51.365 vs 52.144). Este ejercicio se puede repetir también el resto de días que el título ha estado disponible gratis. En lugar de aumentar el número de jugadores, Activision solo ha logrado frenar el descenso de usuarios.
Aunque las cifras de usuarios de Steam no son representativas del número total de jugadores ya que el juego está disponible en muchas plataformas más, son fantásticas a la hora de detectar tendencias. Nos permitieron darnos cuenta de que el juego no había funcionado en su estreno, de que la primera temporada no había tenido el efecto deseado por Activision y ahora nos chivan que el título no está generando el interés suficiente ni siquiera con una prueba gratuita. Tampoco las rebajas del juego, que ya ha podido conseguirse a mitad de precio en Estados Unidos gracias a algunas 'ofertas flash', parecen estar haciendo que las ventas alcancen el estándar marcado por otros juegos de la saga.
La situación de Call of Duty: Black Ops 7 es extremadamente delicada. El ciclo de vida del videojuego acaba de comenzar y, pese a ello, las cifras de usuarios simultáneos son extremadamente bajas. En este sentido, el año se le puede hacer muy largo a una Activision que verá reducido tanto su ingreso por venta directas como por microtransacciones. Un revés que llega justo en un momento en el que Microsoft, su empresa matriz, está siendo más exigente que nunca en cuanto a rentabilidad. Así pues, la gran pregunta es si el cambio radical prometido para 2026 servirá para darle la vuelta a la situación de la saga.
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