El rol y la fantasía épica están de moda. Para muestra un botón con juegos como Baldur’s Gate 3 que ha relanzado el género o la saga Diablo, que sigue incluyendo contenido y haciéndose hueco con paso firme. Estos lanzamientos han abierto un nuevo filón para los aficionados, sobre todo aquellos que disfrutan de sus aventuras en PC.
Cierto es que son muchos los videojuegos que vemos año tras año con una temática similar a la que encontramos en Dragonheir: Silent Gods. Fantasía épica, combates por turnos y un argumento que nos llevará a recorrer un mundo lleno de monstruos y criaturas fantásticas. En este caso, podemos afirmar que lo nuevo de SGRA Studio y Nuverse ofrece sobre el papel prácticamente lo mismo, pero de una forma diferente, sorprendente y que mantiene pegado a los PC y móviles durante muchas horas. Es un título que se encuentra en formato free to play y disponible en su página web oficial, así como en plataformas digitales de iOS y Android. Se espera que debute el próximo 31 de octubre en Steam.
Arkendia, territorio por explorar
La historia del juego nos lleva al territorio de Arkendia, un universo dividido en múltiples regiones en las que habitan gran diversidad de razas y esconden multitud de secretos. El papel de nuestro protagonista, que crearemos previamente a través de un completo editor, es el del elegido por los dioses para embarcarse en una gran aventura dentro un planeta que se encuentra al borde de la destrucción tras una violenta batalla entre dioses que adoptan la forma de dragones. Tras la aparición del personaje que hemos creado y una breve descripción de la historia se dará paso a lo que verdaderamente importa: descubrir sus misiones principales y secundarias, las mecánicas con dados a lo Dungeons & Dragons y combates estratégicos.
El juego se encuentra dividido en dos secciones muy bien diferenciadas. La primera de ellas es la exploración de un mundo abierto que abarca más de una decena de regiones y en las cuales se ocultan todo tipo de misiones, personajes y objetos. La exploración se realiza de forma muy intuitiva ya que contamos con una cámara en vista cenital que proporciona una gran libertad de movimiento y con la que ver cada palmo del escenario. Esto me ha recordado mucho a lo visto en títulos como Baldur’s Gate o Diablo, incorporando los elementos suficientes para que los escenarios no se encuentren vacíos y la exploración sea lo suficientemente entretenida.
Estas regiones se encuentran plagadas de personajes NPC que propondrán misiones y otorgarán objetos. Desde el inicio se encuentran objetivos que podrían ser definidos más como recados que misiones al uso. Es por ello que durante las primeras horas de juego nos encontraremos yendo de un punto a otro para reunir objetos, materiales o combatir con un enemigo en concreto. Resulta aburrido, pero es algo necesario para habituarse a sus complejas y profundas mecánicas.
Multitud de campeones por descubrir
Dentro de este universo contamos con hasta 200 personajes diferentes entre los que reclutar y utilizar a nuestro favor. Si por algo destacan es por la variedad y versatilidad de éstos, ofreciendo perfiles orientados a ser tanques dentro del campo de batalla, atacar al rival o incluso utilizar hechizos de envenenamiento o estados temporales. Estos son reclutados de forma aleatoria a través de un sistema gacha con el que a cambio de un buen puñado de la moneda del juego se desbloquearán. Como es algo habitual en títulos de este estilo, existen personajes que tienen una probabilidad menor de aparecer e incluso que son parte de una temporada o actualización. Es por ello muy recomendable realizar las tiradas de las que se disponga lo antes posible para poder obtenerlos.
Entre los 200 campeones encontramos sus principales diferencias dentro de sus atributos, siendo más propensos a tener un rol defensivo o de ataque. Este punto debe ser tenido en cuenta a la hora de unirlo a los cinco huecos que tenemos disponibles en el campo de batalla para tener un equipo lo más equilibrado posible.
Los combates son otro de los puntos interesantes de Dragonheir: Silent Gods dado que se desarrollan en una superficie cuadriculada y dividida en dos, un sector para el jugador y otro para los enemigos. Cada personaje que sea invocado ocupará un número concreto en nuestra zona al igual que tendrá un rango de ataque en la del contrincante. Es muy recomendable conocer las habilidades y movimientos de aquellos de los que dispongamos ya que si son puestos al azar no desarrollarán correctamente sus habilidades.
Tira los dados y a jugar
Una vez hayan sido ubicados estos comenzarán a atacar de forma automática con aquellas habilidades que dispongan. Estas varían desde ataques mágicos a distancia como movimientos cuerpo a cuerpo o simplemente labores defensivas. Sí que encontramos este aspecto un poco más limitado y del que se esperaba que se tuviera un mayor control a la hora de elegirlas. Además, es muy importante que cada uno de los personajes cuente con una serie de elementos defensivos y de ataques convenientemente seleccionados, por lo que es importante realizar misiones y explorar el mundo de Arkendia para obtener los mejores equipamientos defensivos posibles.
Dragonheir: Silent Gods se ha permitido las suficientes licencias para ofrecer una experiencia de combate continuista a lo visto, pero introduciendo características de los pesos pesados del género. Una de ellas es la posibilidad de automatizar los combates para que los personajes realicen sus movimientos. Esto es útil pero también deja entrever las pocas posibilidades que tiene en cuanto a opciones, limitado únicamente a un movimiento. Una vez finalizado un combate, dependiendo del tipo de enemigo o jefe, se obtendrán una serie de gemas que aplicar a cada héroe y hacerlo subir de nivel.
Pero si por una peculiaridad destaca el título es por el uso de dados de veinte caras dignos de los mejores tableros de rol. En muchos momentos se estará atado a este icosaedro para decidir el camino que tomaremos en la aventura. Por ejemplo, tendremos situaciones en las que un NPC no dejará pasar sin luchar a no ser que saquemos un número superior al de su dado. Aquí es donde entra la aleatoriedad y en este caso, dependiendo del grado de dificultad de la misión, será más o menos sencillo. Este último punto es algo que se indica en el diálogo del personaje, advirtiendo de si la tirada del dado es o no asequible.
Un aspecto que debemos criticar es el de los objetivos de las misiones. Creemos que no son lo suficientemente variadas a pesar de tener buenas ideas. Muchas de ellas se limitan a la obtención de recursos, vencer a un determinado grupo de enemigos o simplemente encontrar algo. Existen otras en las que hay que utilizar objetos sobre personajes o animales, así como búsquedas por determinadas zonas que podrían haber sido más explotadas y con mayores posibilidades. Esto, al ser Dragonheir: Silent Gods un videojuego en constante actualización, es un punto que deberían mejorar mediante la adición de nuevos contenidos.
Mazmorras con suculentos premios
Pero si un punto sobresale por el resto de todos es el de las mazmorras. Éstas no solo tienen unos objetivos mucho más exigentes y divertidos, sino que da la posibilidad de obtener personajes de una mayor rareza para que se unan a nuestro equipo. Cada una se divide por una serie de plantas y estancias en las que esperan todo tipo de enemigos antes de llegar al jefe. También existen otras que esconden en su última sala un sinfín de gemas o equipamientos raros que harán las delicias de los más completistas.
Otra de las zonas que alargan aún más la vida de Dragonheir: Silent Gods es el PvP donde podrás utilizar a tu personaje en arenas de batalla contra otros jugadores y poner a prueba tus habilidades. Como es habitual, esta zona desafía a aquellos que tienen niveles muy superiores a la media, han invertido más horas en el juego o gastado dinero en los mejores equipamientos. Sea como fuere, esta es una opción que existe en el título y puede ser muy interesante para aquellos que valoren la vertiente competitiva.
Para terminar, otro punto interesante lo encontramos en el campamento. Podemos acceder a esta en cualquier momento y es el punto donde nuestros personajes descansan y podrán realizar muchas acciones de crafting. Gracias al campamento se permite introducir mejoras para las armaduras utilizando la herrería o cocinar platos en el fuego para recuperar la vitalidad de los personajes. Todo esto siempre y cuando se hayan recopilado los elementos que sean necesarios para llevarlos a cabo.
Entrando de lleno en sus aspectos técnicos hemos de decir que es un juego claramente concebido para dispositivos móviles y que ha sido adaptado a los PC. Es un punto que podemos ver claramente en la disposición de sus menús e interfaz. Son muy fáciles de utilizar y sencillo acostumbrarse a pesar de lo caótico que parecen en un primer vistazo.
Variados diseños de personajes
Los diseños de los personajes son llamativos y muy variados, aunque se encuentran encerrados en el mismo patrón de otros juegos free to play como RAID: Shadow Legends entre otros. Las animaciones son correctas, así como sus efectos visuales, por lo que equipos o móviles con pocos recursos podrán mover el título sin mayor problema. Los diseños de los escenarios beben prácticamente de lo mismo que mencionamos en los personajes, pecando de ser excesivamente genéricos y llevando las mismas localizaciones de siempre como entornos nevados, desérticos o frondosos.
En cuanto al sonido, volvemos a repetir el término genérico con una banda sonora que, si bien acompaña de forma eficiente en los momentos de combate o exploración, no pasará a la historia por ser una de las más recordadas. Notas que cargan los combates de epicidad con instrumentaciones orquestadas y otras que envuelven con calma las zonas de exploración. Cuenta además con un buen reparto de voces en inglés sumado a actuaciones para nada desdeñables. El juego llega con textos de pantalla en castellano y lo hace con errores gramaticales de forma puntual y de grafismo con caracteres incorrectos.
Esto es todo lo que nos ofrece Dragonheir: Silent Gods, un juego free to play que está dando sus primeros pasos en PC y que a pesar de tener unas buenas bases creemos que todavía le falta recorrido y mejoras a través de actualizaciones. Nos ha sorprendido mucho su mecánica a lo Dungeons & Dragons con dados y aleatoriedad, al igual que la gran cantidad de personajes que utilizar en combate. Su sistema gacha es algo que le resta interés ya que dependeremos de misiones diarias o invertir dinero para conseguir a los mejores campeones.
Si eres un fanático de las aventuras de fantasía, partidas de rol y apasionado de los sistemas gacha. Este es tu juego.
Creemos que Dragonheir: Silent Gods es café para los más cafeteros. Su propuesta es clara, sentar unas bases con muchos personajes seleccionables, misiones y contenidos. A pesar de abarcar mucho en términos jugables es necesario corregir o incluso cambiar algunos elementos para hacerlo más accesible o variado en futuras actualizaciones. Si la fantasía y el rol te apasionan, no te decepcionará.
Comprar Dragonheir: Silent Gods- En su desarrollo colabora Nuverse, quienes estuvieron implicados en juegos como Marvel Snap
- Incorpora más de 200 campeones que desbloquear.
- Muchos objetivos se resuelven tirando tu dado al más puro estilo partida de rol.
- Incorpora una modalidad PvP en la que medirte contra otros jugadores.
- Cuenta con un sistema gacha para desbloquear nuevos héroes.
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