Parecemos un disco rayado cuando decimos que estamos entrando en una de las mejores épocas para los fans de los juegos de pelea, pero eso no hace que deje de ser verdad. Con grandes juegazos llegando en el horizonte, hoy toca hablar de uno que viene a demostrar lo que vale con un ambicioso reboot. Hemos podido probar Mortal Kombat 1 de manera intensiva tanto jugando a su beta multijugador, como directamente desde la Gamescom 2023, experimentando también las novedades de su modos Historia y el novedoso Invasiones durante cerca de una hora de sesión. Las sensaciones en general han sido inmejorables y nos dejan claro que NetherRealm Studios tiene entre manos uno de esos videojuegos que están llamados a hacer historia.
Si hablamos de la beta cerrada de Mortal Kombat 1, los ingredientes eran los siguientes: 6 personajes, 4 Kameos y 2 escenarios para disfrutar de su acción ensangrentada en combates online y offline. Puede no parecer mucho pero sirve para hacernos ver que más que un simple reinicio, hablamos de una evolución. Estas son sus claves.
Cómo evolucionar Mortal Kombat
Aunque a nivel de historia el título busque ir por nuevos derroteros, la fórmula de siempre no ha cambiado. ¿Y por qué lo haría? No hay necesidad de reinventar la rueda mientras que esta sirva. Las peleas de Mortal Kombat se mantienen como siempre: un 1 v 1 en escenarios 2D con montones de técnicas, combos y, obviamente, Fatalities. Aun así, el juego consigue traer novedades sobre la mesa, y, aunque no sean absolutamente rompedoras, tiene un objetivo claro: hacer la jugabilidad más compleja.
Por un lado, están los ya famosos Kameos, personajes que vienen a ayudarte cuando lo necesites con tan solo usar un botón. Si bien es verdad que en la beta tuvimos solo cuatro, todos demostraron tener su propia personalidad y uso. Su rol táctico está claro: puedes usarlos para encontrar huecos en la defensa de tus enemigos y así empezar tu propio combo, o para extender el que ya has iniciado. Mención especial aquí a Sonia Blade, que viene de perlas con los combos aéreos.
Espera, ¿cómo que combos aéreos? Si bien es verdad que Mortal Kombat: Armageddon y Shaolin Monks ya hacían uso de algunos combos en el aire, este plano de pelea siempre ha estado un poco alejado de las ambiciones de la saga. Ahora hace aparición de nuevo, y es una de las mejores cosas que podrían haberle pasado a la franquicia. Puede parecer que no, pero darle una dimensión más a la tensión y a la técnica de los jugadores es la oportunidad perfecta para elevar el nombre de Mortal Kombat y hacer de este un título no solo más vertiginoso, sino también más técnico. Eso sí, lejos de sobrecomplicar las cosas, diría que esta capa añadida de complejidad está aplicada en su medida más justa.
Combates viscerales y explosivos
En general, esa mesura es algo que caracteriza a lo que pude probar del título. Lejos de tener combos atómicos que no te dejan tocar el suelo y acaban con el 75% de tu barra de vida, aquí el segundo-a-segundo de la partida es una cosa puramente explosiva: un solo ataque puede crear una situación de oportunidad suculenta, pero eso no significa que sea todo lo que necesites para ganar. Tan rápido como empezó el combo, se acaba, y eso le da un ritmo muchísimo menos unilateral al combate.
En cuanto a la variedad de personajes, la chicha del juego, todavía es demasiado pronto para juzgar. Mis dos favoritos han sido, sin lugar a dudas, Liu-Kang —que viene más potente que nunca— y Sub-Zero, pero todos brillan con luz propia gracias a su caracterización y carisma. NetherRealm Studios ha dicho que quiere darle más peso a estas figuras en el juego, sobre todo a través de hacer su historia más narrativa, pero parece que no es solo el modo campaña donde quieren dotarlos de personalidad y carácter, un gran acierto que sigue la tendencia generalizada del género desde hace unos años: se acabó crear personajes para que solo sean un moveset glorificado y poco más.
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Los nuevos modos de juego de Mortal Kombat 1
En cuanto al contenido más orientado al single player, lo que hemos visto en Colonia con respecto a la historia nos ha parecido simple y llanamente ideal. Con un aire más cinemático y una orientación triple A, las historias de origen de estos personajes tienen sabor y carisma gracias a su caracterización. Tiene momentos de tensión, sí, pero también lugar para algunas risas, como cuando Kung Lao tira su sombrero de paja esperando hacer daño y… bueno, pues no hace nada, ¿no? ¡Es de paja!
MORTAL KOMBAT 1 Standard Edition
Porque Mortal Kombat 1 aprovecha el reboot de la saga al máximo en el modo historia. Las interacciones entre los personajes están plagadas de chascarrillos, restándole tensión a las sangrientas peleas, y tornándose en un gran ejemplo de humor negro en la industria del videojuego. Además también hay un modo arcade, llamado Invasiones, inspirado por los juegos de mesa, similar al modo aventura de Super Smash Bros. en Switch. Ahí, moviéndote por el tablero, vas a encontrarte con peleas que tendrán distintos modificadores para hacerlas más amenas. Desde contrincantes con escudos hasta stage hazards, vas a tener muchos retos que superar.
Si a esto le sumas que recogerás objetos -tanto clave para progresar como beneficiosos para ti- la verdad es que es bastante divertido y puede darte unas cuantas horas de distracción si no quieres estar solo centrado en sus combates más serios. Por no hablar de sus componentes RPG, que nos permiten personalizar a nuestro personaje y tener sensación de progresión durante la aventura.
Un apartado gráfico de absoluto infarto
No sé cómo será a nivel técnico esta nueva historia que apunta a ser la más ambiciosa de la franquicia, pero lo que sí que sé es que el uso de Unreal Engine 4 para este título es simple y llanamente espectacular. Lejos de adoptar la nueva versión del popular motor como hizo Tekken, Mortal Kombat 1 utiliza su cuarta iteración —muy seguramente la razón por la que el juego llegará a Nintendo Switch— con absoluta maestría. Los personajes están llenos de detalle y personalidad, los escenarios son posiblemente algunos de los más detallados y bonitos que he visto desde el paso del 2D al 3D dentro del género —aunque siempre echaré de menos el pixel art de SNK—, y los efectos dentro de las peleas dejan claro que este es un título de nueva generación.
Como era de esperar, esto también afecta a los aspectos más gore y cinemáticos del juego: los Fatal Blows y las ya legendarias Fatalities. Los primeros mantienen la estética que los caracteriza: con sus rayos X y su brutalidad, son pequeños bocaditos de cinematografía dentro de los encuentros que pueden darle la vuelta a un round perdido. Por otra parte, las fatalities son más realistas que nunca, pero también más viscerales. Con una potencia nunca antes vista, llega un momento en el que se vuelven hasta terroríficamente reales. Aun así, están hechas con la saña y exageración digna de la saga, y son una absoluta delicia de ver en movimiento.
Un pequeño "pero", aunque con matices
En cuanto a la experiencia online, que para muchos es lo más importante de un título del género, he de decir que tengo algunas preocupaciones, aunque mi intuición me dice que no sea pesimista aún. Si bien es verdad que por norma general los combates online fueron bien, sí que noté tirones tanto por Wi-Fi como por cable usando una conexión de 600 MB de bajada y 100 de subida. Con la inclusión de rollback netcode en el juego, esperaba un rendimiento mejor hasta que caí en por qué podría haberse dado este caso: los filtros por ping, calidad de conexión y regiones, o más bien la falta de ellos.
Es enteramente posible que eso sea solo un síntoma de haber probado una beta tan pequeña como esta, y que la versión final del juego sí que deje personalizar más con quién te enfrentas, aplicando una serie de filtros a las batallas en línea. Aun así, siendo un componente tan central del juego y de la totalidad de su género, sí que creo que es importante comentarlo. De momento, eso sí, tenlo en cuenta pero no lo taches de tu lista por ello, el 14 de septiembre sabremos más.
En general, Mortal Kombat 1 me sorprendió gratamente en todos los aspectos. Es un juego ágil y brutal a partes iguales con muchísima personalidad detrás. Como dije, esto ya no es solo un reboot o una secuela, es una evolución, y llega justo en el mejor momento posible: uno de potencia dentro de los fighting games, tanto a nivel de títulos como a nivel de comunidad. No me cabe la menor duda de que va a encontrar fans con facilidad y que pronto veremos los torneos más salvajes de todos los tiempos.
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