Aunque el plato fuerte fue el estreno de Mortal Kombat 1, los fans del videojuego de Warner Bros. tienen una nueva cita desde con la franquicia de lucha. Ya mismo, se estrena un nuevo título de la saga con un enfoque diferente. Siguiendo los pasos de Street Fighter, desde la compañía han anunciado la llegada inminente de un RPG basado en personajes coleccionables que está disponible en las tiendas de aplicaciones de iOS y Android para su descarga gratuita. Es obvio que se trata de un proyecto atípico con el que podrían no contentar a los fans más veteranos de la saga. Sin embargo, puede ser interesante para toda la comunidad ya que profundizará en la evolución de los personajes y tendrá una historia original protagonizada por un Shinnok que gana cada vez más poder.
Mortal Kombat: Onslaught tiene muy buenas ideas, pero aún hay que ver cómo las aplica
Mortal Kombat: Onslaught llega con una propuesta clara. Los desarrolladores quieren llevarse la saga a dispositivos móviles para ampliar público partiendo de una premisa que funciona y resultará familiar a los usuarios más acostumbrados a navegar las tiendas de aplicaciones de Google o Apple. El título es, sobre todo, un juego de combates en el que formamos un equipo de cuatro luchadores y que nos propone más estrategia que acción. Aunque las peleas se desarrollan en tiempo real, nuestros personajes atacarán de forma automática, siendo nuestro papel como jugadores ejecutar las habilidades especiales de la forma más eficiente posible una vez están cargadas. En este sentido, no debemos esperar una experiencia exigente en términos mecánicos ni una jugabilidad al estilo tradicional de los 'fighting games'.
El desafío estará en formar un buen equipo y gestionar el combate. Hay personajes capaces de curar a los aliados, especialistas en defensa o con ataques que infligen mucho daño. En este sentido, seremos nosotros los que debamos resolver este puzle de la forma en la que más nos guste jugar. Se promete profundidad en este aspecto, ya que cada personaje tendrá sus propias habilidades pasivas o afinidades, lo que permitirá ciertas combinaciones que ofrecen un resultado muy satisfactorio a la hora de pelear. Además, el lanzamiento de habilidades juega un papel importante ya que estas pueden ser muy variadas: sirven para defender, curar, apoyar a otro personaje o aniquilar enemigos.
El acercamiento de Mortal Kombat: Onslaught es similar al de otros títulos de lucha para móviles.
Hay elementos que le resultarán familiares a cualquiera que haya estado mínimamente cerca de la saga Mortal Kombat, como los Fatalities. Sin embargo, el bucle de la experiencia jugable no estará solo en avanzar en la historia a través de pantallas en las que vamos eliminando enemigos controlados por la IA. La idea, para lo bueno y para lo malo, es hacer de este un juego como servicio. En este sentido, cuenta con un sistema de progresión tremendamente profundo que permite mejorar tanto a los luchadores como su equipamiento o habilidades. Para esto tendremos todo un surtido de modos de juegos y eventos temporales que nos ayudarán a progresar manteniendo la experiencia fresca y divertida.
Este objetivo de crear un sistema de progresión que mantenga a los jugadores vinculados al título a largo plazo es también el posible gran problema de Mortal Kombat: Onslaught. Lo cierto es que lo que hemos podido ver del título tiene muy buena pinta. Sin embargo, no deja de ser un un título que dependerá de forma superlativa de sus microtransacciones, con las que todavía no hemos podido interactuar. Será el acierto que haya tenido Warner Bros. en lo referido a monetización lo que determine el destino del videojuego. Es por eso que no queremos profundizar demasiado en este apartado: no será hasta que lo probemos por nosotros mismos durante unas cuantas horas que podremos sacar conclusiones al respecto.
El bucle jugable se basa en la mejora constante de personajes.
La experiencia de Mortal Kombat: Onslaught la completa un modo PvP que nos permitirá enfrentarnos a otros jugadores. Este elemento nos devuelve a la dependencia de las microtransacciones. Sobre el papel es una gran idea poder poner a prueba nuestros equipos frente a personas reales. Sin embargo, todo depende de qué tan bien equilibrado esté el sistema de combate cuando son dos usuarios los que se enfrentan entre sí. En cualquier caso, hay que destacar que se trata de una modalidad complementaria: el contenido 'singleplayer' debería ser suficiente para que solo tengamos que interactuar con esta arena de combate si realmente estamos interesados en ella.
Cabe destacar que el título ha pasado por un largo periodo de pruebas. Si bien al comienzo recibió críticas bastante duras por su jugabilidad excesivamente lenta, ha ido mejorando desde entonces. De hecho, no ha sido hasta un año después de llevar a cabo los primeros testeos que finalmente ha tenido lugar el estreno en todo el mundo. De momento, ya han conseguido un millón de usuarios a través del sistema de preinscripción, lo que nos permitirá conseguir ciertas recompensas al comenzar a jugar –incluso si no nos hemos registrado previamente– para progresar un podenco más rápido durante los primeros días.
Las sensaciones son buenas, Mortal Kombat: Onslaught es un juego que tiene claros sus sistemas y que trata de apelar a los jugadores a través de la historia de la franquicia. No solo hablamos de los más de 30 años de trayectoria que se celebran aquí con la aparición de personajes como Cyrax o Smoke, también de la propia narrativa. Aunque los 'fighting games' no necesariamente han de brillar por su guion, lo cierto es que la franquicia ha hecho un gran trabajo en los últimos tiempos. La continuidad de historias en este nuevo título puede ser más que suficiente para que usuarios que jamás se habían planteado darle una oportunidad a los juegos de móviles decidan hacerlo esta vez.
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