Pocos apartados deportivos han crecido tanto en los últimos años como los esports. Aunque experiencias como League of Legends, Valorant o CS:GO son las más populares al reunir a millones de personas frente al monitor, lo cierto es que también existen otras propuestas que congregan a un número importante de usuarios. Por ello, las organizaciones ofrecen premios cada vez mayores, una situación que llevó a un jugador profesional de Rocket League a idear una curiosa práctica para no perder su oportunidad de ganar un torneo.
Al residir en Sudáfrica, Olympic tiene que enfrentarse a ocasionales apagones de luz. En esencia, el país africano opta por esta medida para ahorrar electricidad, razón por la que los vecinos están acostumbrados a que esta situación se dé con asiduidad. Sin embargo, al producirse en medio de una competición de Rocket League, Olympic tuvo que ingeniárselas para no perder la oportunidad de ganar 20.000 dólares. Y, por ello, condujo su coche hasta la entrada de su casa para utilizarlo como generador de electricidad.
Una solución práctica para poder participar en el torneo
Como él mismo relató en su cuenta personal de Twitter, esta es la forma en la que tuvo que disputar el torneo de Rocket League. Así, gracias a la batería de su coche, Olympic pudo alimentar tanto a su ordenador como a su router para poder conectarse a través de internet y, en resumidas cuentas, formar parte de la competición. Aunque es una solución algo alocada, es curioso ver cómo el jugador profesional fue capaz de idear esta maniobra con la intención de no perder su oportunidad. No obstante, a la larga lo más rentable es que opte por un generador de emergencia para no agotar la capacidad de la batería de su coche.
Una vez más, la escena de los esports nos vuelve a dejar una historia de lo más curiosa. Hace escasos días, también os contamos la historia de un equipo de esports que, después de salir a bolsa, se encuentra en crisis y Kick parece una de las pocas soluciones viables; a su vez, también dimos valor al triunfo más improbable de la historia de Pokémon, la victoria de un jugador que tardó casi una década en volver a lo más alto y consiguió un hito sin precedentes al lograrlo.