Si creías que nada podía sorprenderte prepárate para embarcarte en esta prometedora aventura protagonizada por una matrioska, la clásica muñeca rusa que podrá introducirse en el interior de otras muñecas para tomar sus habilidades y así poder rescatar a su familia.
El segundo de los “pequeños” proyectos en los que se han embarcado los creadores de Brütal Legend, Double Fine, no podía ser más interesante. Y es que si con Costume Quest dejaron claro que incluso con poco presupuesto son capaces de seguir brillando como estudio puntero, esta afirmación se consolida al echar un primer vistazo a Stacking. ¿Por qué? Básicamente, porque resulta difícil imaginar un videojuego basado en las clásicas muñecas rusas o matrioska, que son esas muñecas que en su interior ocultan más figuras de menor tamaño. Pero sorprende aún más que esta idea pueda convertirse en una de las aventuras más destacables del recién estrenado año.
El tamaño no importa
La historia de Stacking nos lleva al humilde hogar de una de estas figuras llamado Charlie, que verá como un malvado Barón se lleva a su familia de casa para realizar trabajos forzosos. Pero él, al ser demasiado pequeño, queda abandonado en su hogar urdiendo el plan perfecto para rescatar a su familia. Y así es como da inicio esta aventura en la que tendremos que resolver un sinfín de rompecabezas, apoderándonos de las distintas muñecas que pueblan este clásico mundo victoriano. De este modo, y teniendo en cuenta siempre que en este caso, el pez chico se come al grande, habrá que adaptarse constantemente a los desafíos aprovechándonos de las habilidades de cualquier figura mayor que nosotros.
¿Queremos abrir una puerta cerrada con llave? Bien, habrá que buscar al guardia que la custodie y “tomar prestado” su cuerpo durante un rato. ¿Necesitamos llegar hasta un muñeco oculto en una sala a la que no tenemos acceso? Vale. Convirtámonos en una muñeca sexy, atraigamos la atención del guardia y, una vez esté distraído, saltemos por detrás de él para atraparlo y entonces accedamos a las zonas restringidas a los civiles. O, ¿por qué no buscar un técnico de mantenimiento que nos permita acceder a través de los túneles de ventilación u otros accesos alternativas? Las soluciones, como prometen desde Double Fine, serán de lo más variadas y siempre tendremos varias opciones a la hora de completar un objetivo.
Para potenciar todavía más este aspecto, una vez superado un desafío se nos presentará un mensaje en el que se indicará el número de opciones restantes, lo que lógicamente va a aumentar la re-jugabilidad de un título que ya de por sí promete mantenernos un buen puñado de horas delante de la consola.
Como en una película
Stacking se centra en las citadas muñecas matrioska, lo que ya supone un aspecto visual y jugable altamente atractivo. Pero no podemos olvidarnos tampoco del mundo por el que nos vamos a mover, que sin duda nos va a recordar a las películas de cine mudo de antaño en las que se mostraban entornos victorianos con gran encanto. En este sentido, la variedad de localizaciones promete ser muy alta, con una gran estación de trenes como mundo central que nos dará acceso al resto de entornos que irán desde un crucero hasta un safari, pasando por zonas industriales o grandes y suntuosos salones.
Las figuritas con las que nos encontraremos también prometen ser muy variadas, lo que supone que las opciones a la hora de resolver los acertijos serán también muy amplias. Y es que habrá hasta figuras que tendrán de función primaria las flatulencias, lo que deja claro también que el sentido del humor seguirá estando muy presente en esta obra. Además, nos encanta el hecho de poder apropiarnos de varias muñecas a la vez para resolver situaciones en cadena; aunque más importante si cabe es el hecho de que dependiendo del orden en el que las atrapemos, los resultados que obtendremos variarán.
Por otro lado, los filtros de imagen empleados en el juego evocarán una vez más al cine mudo de época, a lo que debemos sumar un acompañamiento musical de lujo ya que se emplearán temas de grandes compositores clásicos como Chopin, Tchaikovsky o Mendelssohn; más los temas propios del compositor Peter McConnell. Hay que resaltar en este punto que como ya ocurrió en Costume Quest, los diálogos no estarán doblados, aunque en este caso permitirá potenciar todavía más ese aspecto de peli de cine mudo que hemos comentado anteriormente.
Y son todos estos elementos los que hacen que Stacking sea uno de los juegos más interesantes y prometedores de 2011. Como decíamos, sin contar con un presupuesto abultado, esta nueva obra de Double Fine tiene todas las papeletas para convertirse en una grandísima aventura que nos hará estrujarnos los sesos para superar los rompecabezas, mientras nos deleita con un apartado audiovisual tan único y genuino que nos tiene maravillados.