Terminó trabajando para la compañía de la que fue fan durante años, cumpliendo su sueño como desarrollador de videojuegos. Emil Pagliarulo lleva casi dos décadas en Bethesda y, como tantos otros veteranos de la compañía, en los últimos meses atravesó uno de los momentos más especiales de toda su vida laboral con el lanzamiento de Starfield. Un nuevo videojuego que casi ve como el final de un camino tras haber trabajado en todos los proyectos de la empresa desde The Elder Scrolls IV (2006). Sin embargo y aunque también habló del RPG espacial, sobre todo quiso explicar por qué se había convertido en fan de la desarrolladora y qué hacía tan especial a los juegos de la compañía.
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Tras explicar que se enganchó a los juegos de la compañía jugando a The Elder Scrolls: Arena (1994) durante su época universitaria, ha querido profundizar en los motivos por los que Bethesda es especial. "¿Que tenían los juegos de Bethesda para llamarme tanto la atención? ¿Qué es lo que sigue fascinando a los fans literalmente décadas después? Tengo una teoría en particular. Desde que tengo uso de razón, los juegos de Bethesda han sido, como poco, diferentes. No son títulos que pasarse y ya está: son mundos en los que vivir. Grandes, ambiciosos, creativos y que ofrecían algo de lo que nunca me cansaba: la vista en primera persona", comenzaba explicando.
La vista en primera persona era atípica en los juegos de rol de la época y aún ahora no es la más utilizada. "Para mi, la primera persona significaba que yo estaba en el juego, siendo parte del mundo. Incluso hoy en día, prefiero la primera persona sobre la tercera en la mayoría de los juegos. Mirar, la premisa de la realidad virtual siempre ha sido más que un simple casco. Es la idea de que podemos entrar directamente a un mundo artificial completo. Eso era lo que daban los juegos de Bethesda y lo que yo quiero darle a nuestros fans. En muchos sentidos, Starfield me empujó al límite. Estoy seguro de que cualquier otro desarrollador del equipo te diría lo mismo", concluía hablando sobre Bethesda.
Los juegos de rol en primera persona no eran ni mucho menos habituales.
Igualmente interesante que su reflexión sobre los juegos de la compañía y los orígenes de la filosofía de diseño de The Elder Scrolls, Fallout o Starfield es la reflexión que hace sobre el RPG espacial. "Ahora que he tenido tiempo para reflexionar sobre Starfield, vaya si estoy orgulloso de lo que conseguimos. Un nuevo mundo en el que vivir. Una IP completamente nueva. El comienzo de un nuevo sueño. Lo logramos. Para ser honesto, todavía me parece surrealista. Dios, estuve estresado durante dos años seguidos", decía en sus redes sociales.
Sin esconderse, Pagliarulo también habló de las críticas que ha recibido el juego. Aunque positivas en su mayoría, algunos fans no quedaron del todo satisfechos con las misiones secundarias o la exploración. "Os digo una cosa sobre Starfield: la recepción del juego ha revitalizado mi amor por la creación de mundos y el desarrollo de juegos. Me siento muy honrado de crear juegos para el mismo estudio que me mostró, hace tanto tiempo, lo que realmente es entrar en otro mundo", concluía su hilo de Twitter.
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