En el análisis de Super Mario 3D World + Bowser's Fury para Nintendo Switch os cuento cómo se puede hacer una buena reedición con dos ingredientes: mejoras en los contenidos preexistentes y una nueva aventura en mundo abierto. La consola híbrida de Nintendo recibe un título trabajado, con gran calidad y una rejugabilidad tremenda.
La llegada de Super Mario 3D World a Nintendo Switch era algo que sabíamos que iba a ocurrir tarde o temprano (de hecho, ya os lo dijimos). La compañía nipona está aprovechando para recuperar clásicos de Wii U. Aunque no creo que haya tenido el mismo acierto en todos los casos, debo reconocer que este no ha sido el caso. SM3DW llega con importantes añadidos, y lo que es mejor: Bowser's Fury, una nueva aventura que plantea cosas realmente interesantes.
Es cierto. Super Mario 3D World + Bowser's Fury no deja de ser una reedición. No obstante, hace lo necesario para satisfacer no solamente a los nuevos usuarios, sino a aquellos que ya lo probaron en su día. Para empezar, es un fantástico plataformas 3D al que se infravaloró en su anuncio (¿lo recordáis?). Se pensaba que Nintendo repetiría, sin más, la fórmula de Super Mario 3D Land, pero este juego apostaba por el multijugador cooperativo de forma decidida. Y tenía un arma secreta: ¡los gatos! No es broma, porque daba lugar a una forma única de recorrer los escenarios. Todo esto acompañado, por supuesto, de un diseño de juego espectacular, muy rejugable, que contó con la destreza de grandes como Yoshiaki Koizumi.
Todo eso está de vuelta, ahora con una mayor velocidad de desplazamiento de los personajes, fases de Captain Toad en cooperativo y también la posibilidad de jugar online (la cual curiosamente descartó Nintendo en el lanzamiento original). Se agradece el esfuerzo de proponer mejoras y plantear novedades, pero yo que exprimí Super Mario 3D World, lo que de verdad admiro es el nuevo contenido Bowser's Fury. Añade unas cuantas horas de juego, su libertad de juego es grande y además es divertidísimo. Os lo cuento todo en este análisis.
Un gran plataformas 3D… ¡con gatos!
Si hay algo que de verdad me guste de Super Mario 3D World es su cooperativo. Jugarlo solo está bien, pero jugarlo en compañía proporciona la mejor experiencia. Hasta cuatro participantes pueden colaborar (o competir) en Nintendo Switch, con una alta variedad de situaciones. Los niveles son más bien cortos, no más de cinco minutos, pero proporcionan diversión inmediata, muy medida, con ese ajuste jugable tan propio de Nintendo: excelente control, desafíos de dificultad creciente y cantidad de sorpresas.
He llegado a leer y escuchar que es un juego fácil. Puede que superarlo no lleve muchos quebraderos de cabeza. Además, sus jefes son anecdóticos y sufren algo de repetición en sus planteamientos (nada nuevo en la saga Super Mario). Sin embargo, probad a exprimirlo al 100% como hice yo y puede que vuestra perspectiva cambie. Conseguir todas las estrellas y sellos coleccionables puede hacerte sudar la gota gorda. Aparte, hay algún que otro mundo extra que no está hecho para personas poco pacientes.
Ahí está la magia de los juegos de Super Mario, y este título lo representa a la perfección: se trata de videojuegos con varias capas. En la más exterior está enfocado a todos los públicos, pero en la más interior quiere llegar a los usuarios más exigentes. Así no se deja fuera a nadie. Es tal el interés por evitar la frustración de los jugadores menos experimentados, que se les da la hoja de invencibilidad cuando pierden la vida en repetidas ocasiones. Dado que es un juego tan apoyado en el multijugador, el enfoque no podría ser más acertado: invita a quien quieras, que podrá jugar contigo incluso aunque tenga un nivel muy inferior al tuyo.
A pesar de la accesibilidad que menciono, eso no quiere decir que Super Mario 3D World no esté elaborado en lo jugable. Cada nivel sabe diferenciarse muy bien de los demás: es muy variado. Tienes la típica pradera donde son importantes los saltos, acabar con los enemigos y pasar a través de tuberías, pero también fases más verticales e incluso alguna en que se te apremia a darte prisa con el clásico scroll continuo de pantalla. Hay una pantalla en que guías el movimiento de Mario a través de su sombra, recorridos acuáticos con el dinosaurio Plessie y hasta un nivel homenaje a Mario Kart, que hace uso de sus melodías.
Por supuesto, no falta la nieve, secciones sobre las nubes, el castillo de Boo, las fases magmáticas de Bowser y todo lo que ha hecho tan carismático al universo Super Mario. Pero por supuesto, la clave identitaria de este juego son los gatos. Gracias al nuevo poder incluido en esta entrega, puedes atacar a los enemigos, subirte a árboles… ¡y escalar! Esa es la clave jugable que lo cambia todo. El salto habitual de la franquicia se acompaña de una jugabilidad más vertical en que puedes trepar cualquier pared y alcanzar puntos de otra forma imposibles. Sin duda, es algo que va más allá de lo meramente estético.
Así cambia el online a Super Mario 3D World
Super Mario 3D World genera un caos divertidísimo en su cooperativo para 4 jugadores
El cooperativo supone la piedra angular de Super Mario 3D World. Jugarlo solo está bien, pero cuando más se disfruta es cuando te acompañan hasta un máximo de cuatro jugadores. Es entonces cuando la locura se adueña de la experiencia de juego. Por poner un ejemplo, hay varias partes del juego en que puedes recoger duplicerezas que multiplican el número de personajes en pantalla. Es un caos divertidísimo. Lo mismo ocurre con otras partes del juego. Está diseñado para que lo disfrutes en compañía, tanto si escoges jugar de forma colaborativa como de forma competitiva… y aquí quería yo llegar. SM3DW tiene mucho de cooperación, pero también de competición. Hay partes que no te queda otra que unir esfuerzos, pero luego hay otras en que impera eso de "tonto el último". Cada jugador gana puntos por obtener monedas, estrellas, poderes… Hasta el banderín final está puesto ahí para que te adelantes a tus compañeros/adversarios y vayas como un poseso a encumbrarlo. Si no me creéis, si no consideráis que este juego puede ser altamente competitivo, aquí la prueba definitiva: puedes levantar al resto de jugadores, lanzarlos y sacarlos del escenario. Obviamente, también puedes usar esto para colaborar, pero bueno… ¡ya sabemos lo que pasa con estas cosas!
Bueno, ¿pero qué tiene que ver esto con el online? Veréis, soy alguien muy habituado a jugar en coop local, y ahí suelo ser bastante cooperador. No voy a hacer jugarretas a nadie (habitualmente). Pero el juego tiene ahora coop online, y cuando lo probé cambió mi perspectiva. En el momento en que vi que otros jugadores tiraban hacia adelante sin esperar o te quitaban un poder ante tus narices, entendí que o cambiaba el chip o perdería continuamente las partidas. Así que la estrategia que te obligan a tomar es la de fuego contra fuego. O vences, o eres vencido. La tabla de puntuación de final de nivel anima mucho a ello, por supuesto. ¡Y también la corona que te colocan para indicar que eres el mejor!
Un aspecto que debéis saber es que el anfitrión de la partida es el único que puede escoger nivel y mantener los progresos realizados en la aventura. El juego incluye un sistema de matchmaking bastante simple, que veremos qué tal funciona a medio plazo, pero en mis pruebas no experimenté mayores problemas. Esa es la mayor duda que tengo ahora mismo. Sería bueno que Nintendo emparejara a jugadores en función de su destreza o estilo de juego (más colaborativo o competitivo), pero no parece que vaya a ser así. En cualquier caso, mis pruebas arrojaron resultados de satisfacción elevados, porque además no sufrí casi nada de lag.
¿Más cosas? Pues una muy importante: tanto la aventura en solitario como en cooperativo dota de mayor velocidad de movimiento a los protagonistas con respecto a la versión de Wii U. He leído a usuarios quejarse por esta implementación. Tiene la sensación de que hace el juego más fácil. ¡Para nada! Más velocidad implica mayor esfuerzo por mantener el control de tu personaje, y la verdad es que se nota bastante el cambio. Esto viene especialmente bien para el formato online, por el caos que se puede desatar en las partidas. Bien jugado por parte de Nintendo.
Otra novedad interesante es que los niveles de Captain Toad, esa especie de puzles tridimensionales que dieron lugar a un juego propio, se pueden jugar ahora en cooperativo. Sí, por fin. Varios usuarios pueden colaborar para recolectar estrellas en escenarios muy estudiados en que se hace necesario rotar la cámara. Cada jugador puede ir por libre, pero es muy importante que no todos roten la cámara al mismo tiempo, porque puede ser una auténtica locura. Pero bueno, ahí está también la magia del asunto. Podéis colaborar o haceros la vida imposible unos a otros. Estas fases también están disponibles en online, así que ya sabéis lo que tenéis que hacer: colaborar o sufrir.
Bowser's Fury, el mundo abierto que no te esperabas
Es la gran novedad de Super Mario 3D World, y le dediqué un artículo entero en las recientes impresiones jugables. Antes de entrar de lleno en contar lo que ofrece, tengo algo que alabar: se puede jugar desde el mismo momento en que ejecutas el juego. No hay necesidad de completar la campaña principal, ni desbloquear nada. Está ahí desde el primer minuto, algo que agradecerán los jugadores que tuvieron SM3DW en Wii U. Porque sí, otra de las cosas que tengo que decir es que merece la pena adquirir esta reedición si ya habías jugado previamente. Bowser's Fury es un contenido que bien podría ser vendido como DLC, pero considero que tiene lo suficiente como para mantenerte a los mandos.
¿Durante cuánto tiempo? Depende de lo rápido que vayáis, pero diría que está en torno a 3-4 horas. Un par de horas para superarlo, y otro par de horas para conseguir al 100% todo lo que contiene. No puedo desgranarlo todo en detalle, pero considerad este contenido como si fuese el momento en que el universo de Super Mario 3D World se encuentra con las bases plataformeras de Super Mario Odyssey. Como tal, nuestro objetivo consiste en encontrar todas los soles felinos dispersos por el mundo abierto (que no son pocos). Los hay más sencillos, más elaborados y por supuesto más complicados. Se disfruta mucho del planteamiento.
La estructura de juego es básicamente la de que puedes moverte con libertad por el escenario, plagado de islas con distintos retos. Una isla podría ser un nivel en sí mismo, y en otras situaciones te tocaría encontrar una llave, devolver unos gatitos a su madre o derrotar a un jefe final. Hay secciones más plataformeras y más de acción. El equilibrio es muy bueno, con la oportunidad de ponerte a lomos del dinosaurio Plessie para ir de un lado para otro. Dicho de otra manera, muchas cosas que viste en Super Mario 3D World están aquí plasmadas, pero desde el enfoque de los Mario clásicos en tres dimensiones.
Por supuesto, también hay novedades, y una de las más importantes es la presencia de Bowsy como personaje de apoyo. Si eres un jugador solitario, puedes dejar que la CPU lo maneje, e incluso determinar en qué grado te ayudará (o desactivarla directamente). También puedes optar por pasar un mando a un segundo jugador y que controle a Bowsy para ayudarte a acabar con los enemigos o alcanzar puntos elevados del escenario (¡ya que puede volar!). No me ha resultado lo más importante dentro del esquema jugable, pero es una opción interesante. Dada la naturaleza "single-player" de Bowser's Fury, no está mal haber incluido esta opción: se agradece.
No es un simple port, Nintendo se ha preocupado por aportar las suficientes novedades
Otro elemento de interés recae sobre los enfrentamientos con Bowser. El punto de partida de esta pequeña aventura es que el villano de Mario ha experimentado un extraño cambio. Está más enfurecido de lo habitual, y la forma de expresarlo es incordiándonos en diversos momentos de la partida. Imaginaros algo así como Mr. X en Resident Evil 2, ese personaje que no deja de molestarte mientras juegas. Bowser aparece de vez en cuando en modo gigante para lanzarte meteoritos abrasivos y potentes rayos de fuego. Puedes utilizarlos en tu favor, haciendo que rompa bloques especiales que descubren algunos premios, pero en la mayor parte de ocasiones todo consiste en evitarlo.
En otras palabras, el papel de Bowser en este contenido es fastidiarte. Eso, y protagonizar algunos enfrentamientos, los cuales ocurren cuando activamos las gigacampanas (hay que activar varias para avanzar en la aventura). Ya lo habréis visto. Se trata de combates épicos entre Bowser Furioso y Giga Mario Felino, una lucha titánica que, sin embargo, no resulta demasiado brillante. Es curioso el experimento, eso sí, pero no va más allá y no debería entenderse como uno de los elementos más importantes de la experiencia. O al menos yo no lo considero así después de haber superado la aventura.
¿Deberías jugarlo si ya lo probaste en Wii U?
Es la pregunta del millón. Aunque creo que ya os he dado la respuesta, recalco que Super Mario 3D World + Bowser's Fury no es un simple port. Es una buena reedición, en que Nintendo se preocupa por aportar las suficientes novedades (no como en otros casos). El juego además funciona de forma espléndida tanto en modo dock como en modo portátil. Tal vez he notado algún salto de frames en Bowser's Fury, pero nada fuera de lo normal. Eso sí, esta última aventura posee algunos defectos gráficos que notaréis más en el televisor, al estilo de suavizado de bordes y falta de detalle en la distancia.
No es casualidad que Bowser's Fury esté basado en islas, adoptando una solución similar a la que hizo Zelda: Wind Waker en su día. Es inteligente, porque así se puede crear un mundo abierto medianamente detallado dentro de las especificaciones técnicas de Nintendo Switch. Pero lo dicho, se echa de en falta más detalle, porque por lo puramente artístico el juego lo cierto es que resulta precioso. El nuevo mundo que se introduce está cargado de simbología gatuna y un apartado sonoro muy agradable. Las melodías cambian por zonas de forma dinámica, dando la variedad musical que necesita la aventura.
El modo foto introducido te permite comprobar lo bonito que es el juego. Al igual que ocurría en Super Mario Odyssey, puedes fotografiar cualquier parte de Bowser's Fury y aplicar distintos filtros (además de los sellos que obtienes en la aventura principal de Super Mario 3D World). En definitiva, hay muchas razones para volver. Aparte de este nuevo periplo, se añade online a la experiencia multijugador al tiempo que se reforman ciertos aspectos (como la velocidad de los personajes o el cooperativo en los niveles del Capitán Toad). Así que la decisión es tuya, pero como videojuego es bastante completo y altamente satisfactorio.
Super Mario 3D World + Bowser's Fury es un buen trabajo de reedición con respecto al clásico videojuego para Wii U. Incorpora importantes mejoras, como la mayor velocidad de los personajes, además del online multijugador. Es un plataformas cooperativo muy variado, rejugable y de calidad que ahora además añade una nueva aventura. Bowser's Fury es un mundo abierto que expande la diversión con una propuesta muy distinta, disfrutable y que no es tan corto como se podría esperar. Buen trabajo por parte de Nintendo, que nos proporciona una reedición brillante, apta sobre todo para nuevos jugadores, pero que también disfrutarán los que ya lo jugaron en su día gracias a las novedades incluidas.
Comprar Super Mario 3D World + Bowser's Fury- Es una reedición trabajada con mejoras jugables y de contenido
- Encantador, variado y muy rejugable: un plataformas sobresaliente
- Se puede jugar en cooperativo local y ahora también online… ¡divertidísimo!
- La nueva aventura, Bowser's Fury, supone un acierto mayúsculo
- La temática gatuna encaja con la jugabilidad y la dota de una personalidad única
