Pese a la sencillez de la mayoría de misiones secundarias de Zelda: Tears of the Kingdom, tienen múltiples soluciones y se pueden enfocar de maneras distintas. Es donde reside buena parte del encanto de las actividades extra del juego, aunque pueden llegar a ser abrumadoras o pesadas por su cantidad, pero la que os explico aquí, Golpe de Efecto, tiene esa particularidad de ser flexible y, como muchas otras en el juego, demostrarnos que un mismo problema se puede resolver de varias formas.
Misión secundaria: Golpe de Efecto
Estando por la zona Akkala sur, si pasamos cerca de su posta, es muy probable que veamos a una hyliana que está tratando de romper una veta de mineral valioso en frente de la posta, en la ladera del paso. Es Parcy, y resulta que se ha encaprichado con las gemas que contiene la veta que está tratando de romper. Sin embargo, nos propone que si conseguimos romper la veta de un solo golpe podemos quedarnos con su contenido.
Evidentemente no nos va a bastar con tener un palo con un pedrusco, sino que vamos a tener que realizar alguna fusión más potente con un arma de tipo contundente, como un gran búmeran o un mandoble. Si disponemos de cuernos de Gólems Sargento o de rango superior podríamos conseguirlo pero en las cercanias hay un Petrarock fortificado cuyo núcleo sería una excelente parte a fusionar para romper la veta.
Parte de la gracia de esta misión está también entonces a forzarnos a pelear con este nuevo tipo de enemigo. Inicialmente lo mejor es acabar con los bokoblins que lleva en su estructura a base de flechazos. Cuando sólo quede el petrarock, puede parecer que por los andamios de madera que los esbirros de Ganon le han puesto no es posible subirse trepando cuando intenta recuperar su brazos tras lanzarnoslos. Pero resulta que podemos usar la habilidad de Infiltración para subirnos sobre él y golpear su núcelo.
Hay que ser rápidos, ya que las sacudidas que hace para quitarnos de encima hacen daño; sabréis cuando bajaros cuando se ponga a temblar. Repitiendo este proceso acabamos con él, y podemos disponer de su núcleo para fusionarlo con alguna de nuestras armas. Como decíamos antes, lo mejor es alguna contundente.
Ahora sólo resta volver donde Parcy, y para asegurarnos de que nuestro golpe de efecto es eficiente, lo mejor es sacar esa arma contundente acoplada con algún elemento que le de bastante poder (como el núcleo del petrarock u otras armas extraidas de otras misiones) y mantener pulsado el boton de ataque.
Hacedlo algo lejos, ya que no basta con los balanceos de un arma tipo mandoble, sino que tenemos que asestar el golpe final en la veta para asegurarnos de que se fractura y podemos recoger su contenido, que son una serie de minerales valiosos: un rubí y un par de zafiros en este caso particular. Pese a su frustración, Parcy reconocerá que nos hemos ganado el derecho a disponer de los tesoros que había en la veta y que en adelante procurará acoplar a sus herramientas materiales que le permitan obtener los minerales que hay en ellas de un sólo golpe.
Otras formas de extraer los minerales
Esta forma sería la que el juego quiere que empleemos, pero no tenéis porque limitaros a ella. Recordad que los poderes de los sabios pueden también utilizarse para esto, como el de Yunobo, o que las flechas con plantas bombas acopladas también son muy útiles para este propósito. Si queréis saber más sobre las fusiones, tenemos una guía para explicaros cuáles son las mejores y como se pueden aprovechar.
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