Desarrolladores de todo el mundo se han reunido esta semana en la Game Developers Conference 2024 para arrojar luz sobre ciertos detalles de la industria del videojuego con un enfoque profesional y de estudio. Aunque se han producido algunos anuncios como la IA de Ubisoft para crear NPC o el nuevo tráiler de Chrono Odyssey, el evento estadounidense se centra en el aspecto más técnico y profesional de nuestro medio. Una celebración que, además, nos ha dejado una de las listas de premios a lo mejor del año más importante con Tears of the Kingdom como ganador de Mejor Tecnología, y Baldur's Gate 3 como Mejor Juego del Año.
Como no podía ser de otra manera, el estudio belga Larian Studios ha vuelto a dejar su huella en la industria, dominando la ceremonia anual de los Game Developers Choice Awards con Baldur's Gate 3. La noche fue un festín de éxitos para el estudio, con el RPG europeo llevándose a casa cuatro premios, incluido el codiciado título de Juego del Año o el de Mejor Narrativa.
Aparte de este, otro de los premios más deseados es el de Mejor Tecnología. Con esa visión que aportan las decenas de desarrolladores, ingenieros y demás profesionales acreditados, la GDC se ha consagrado como una de las referentes en términos de galardones, y este premio ha ido a parar a The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom.
Aunque la más reciente obra magna de Nintendo fue criticada por su rendimiento irregular, con caídas en la tasa de imágenes de 30 a 20 FPS en según qué zonas; así como un uso de los recursos desigual con el uso de la Ultramano o en la Aldea Kakariko, el mundo abierto de los nipones ha sobresalido sobre la competencia porque aún con sus problemas de lanzamiento, el juego supone un portento técnico.
Nintendo explica las dificultades a las que se enfrentó el desarrollo del juego
En la misma GDC, como parte de la participación de Nintendo en las charlas oficiales del evento, el equipo japonés ha relatado los malabares técnicos que tuvieron que realizar para sacar adelante Tears of the Kingdom. La idea de "dejar al jugador hacer lo que quiera con el mundo de juego y sus objetos" se topó de frente con lo estático que era Breath of the Wild en comparación a lo que conseguirían.
"Cuando vi el prototipo por primera vez, me entusiasmó pensar que iba a ser un gran juego, pero iba a ser muy, muy difícil", mencionó Takahiro Takayama, programador de físicas del juego. Las físicas, en este caso, se convirtieron en uno de los pilares jugables y de creación del juego. Según recoge IGN de la participación de Takayama, "la libertad que ofrecía la Ultramano causó caos en Hyrule durante el desarrollo". Al parecer, después de incluirla y realizar las pruebas pertinentes, se escuchaba constantemente "¡Se rompió! ¡Salió volando!" dentro del equipo de desarrollo.
El director del juego, Takuhiro Dohta, enfatizó la importancia de crear un sistema de físicas que hiciera que sucedieran cosas divertidas en lugar de simplemente diseñar algo divertido. Según citó, al final esto queda reflejado en varios aspectos del juego, incluidos los vehículos personalizables, donde los jugadores pudimos crear nuestros propios vehículos usando nuestra más simple y compleja imaginación.
Incluso las físicas fueron capitales para el diseño de sonido de Tears of the Kingdom. Junya Osada, programador de audio de Nintendo, relata cómo se usó un sistema que utiliza información de vóxeles para crear un terreno 3D y determinar cómo interactúan los sonidos en el mundo del juego. Un enfoque claramente innovador, pero arriesgado, que ha llevado al mundo abierto a alzarse con el premio a Mejor Tecnología.
En 3DJuegos | Con Baldur's Gate 3, Zelda: Tears of the Kingdom y Starfield, hay un claro ganador en este 2023. El jugador creativo
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