Esto es lo que sucede cuando una fuerza imparable se encuentra con un objeto inamovible.
Crear un videojuego es un proceso complejo, muy complejo. Esto es algo que no debería ser necesario de mencionar, pero nunca está de más recordarlo a la hora de hablar sobre desarrollo. Y como muestra de ello tenemos a The Elder Scrolls V: Skyrim. Uno de los RPG de mundo abierto más populares de la historia, la aventura de Bethesda también destaca -como muchos de sus juegos- por la cantidad de bugs que contiene. Y una de las escenas más icónicas del juego casi se va al traste por un error tan absurdo, tan inesperado, que en el estudio ni se imaginaban que fuera posible.
Hablamos de esa escena introductoria en un carro que es fuente inagotable de memes en las redes y motivo de pesadillas para Nate Purkeypile, ex de Bethesda. Al parecer, durante el desarrollo de Skyrim se encontraron con un error en esta escena que era completamente inexplicable. En ocasiones, el carro sobre el que viajamos salía disparado de repente hacia el cielo sin motivo alguno, sin que hubiera piedras ni obstáculos en su camino que colisionaran y provocaran un error en las físicas… Bueno, al menos ninguno que ellos pudieran ver.
So, I have a story about the Skyrim Intro and how hard game development is.
— Nate Purkeypile 🤘🏹🔥 (@NPurkeypile) August 17, 2021
That intro is famous now, but back then, it was just that one thing that we had to keep working and working on forever. I lost track of how many times I've seen that cart ride. Easily hundreds. (thread) pic.twitter.com/D0E0oZ5uX8
So it turns out there was another bug where the bee in the game couldn't be picked up. So then some potions couldn't be made. That bug got fixed. Only the type of collision put on the bee didn't just let it get picked up. It also made it collide into things.
— Nate Purkeypile 🤘🏹🔥 (@NPurkeypile) August 17, 2021
Cada vez que arreglas una cosa, podrías estar rompiendo otra
"Algo le decía al carro que se fuera a tomar por c*lo y que saliera de la carretera. La cosa es que esto no ocurría todas las veces. Nadie sabía lo que pasaba al principio", explica Purkeypile. Pues bien, resulta que todo era culpa de una abeja. Al parecer, el equipo había solucionado días antes un bug que no tenía absolutamente nada que ver con esta escena, el cual impedía que el jugador recogiera abejas, lo cual impedía hacer ciertas pociones, y así sucesivamente. Para arreglarlo añadieron un collider a las abejas, pero esto causaba que provocaran colisiones con el resto de elementos físicos, como puede ser un carro.
Y claro, bastaba con que una abeja despistada entrase al camino para que el carro chocase contra ella y saliera disparado. "Así que el desarrollo de videojuegos es muy complejo. Cada vez que arreglas una cosa, podrías estar rompiendo otra", añade el desarrollador. Quien conozca el origen del término bug sabrá lo irónica que es esta historia, pero es una buena demostración de por qué es tan complejo pulir y corregir juegos de mundo abierto sin que se les caigan las costuras. No sabremos si habrá abejas imparables en The Elder Scrolls 6, pero desde luego que sería divertido.