Hay dos máximas que todos los aficionados a la ciencia ficción tienen muy claras: la primera la aprendimos con Alien, El Octavo pasajero, y es que "en el espacio nadie puede oir tus gritos". La segunda nos la enseñó Frank Herbert en su novela Dune, y es que "la especia debe fluir". Entre esas dos máximas se resumen no solo dos piezas icónica este tipo de historias, también una serie de casualidades que nos dejó en la salas de cine una de las películas más brillantes de la ciencia ficción, pero gracias a quedarnos sin ver otra que podría haber sido una de las adaptaciones más singulares de una obra capital del genero.
La suerte estuvo del lado de Ridley Scott cuando la casualidad desempeñó un papel crucial en la puesta en pantalla de Alien. 20th Century Fox y Brandywine Productions optaron por Scott como director en lugar de Dan O'Bannon, un especialista en efectos especiales y la mente detrás de la idea original de la película, que ya había sobresalido en su primer proyecto, el poco conocido clásico de ciencia ficción Dark Star, junto a John Carpenter. A la fascinante conexión cósmica entre Alien y Dark Star se suma a otra casualidad relevante en la ecuación: la primera adaptación cinematográfica de Dune, en cuyo diseño O'Bannon trabajó durante un tiempo.
Esta versión cinematográfica de Dune fue la ambiciosa apuesta personal de Alejandro Jodorowsky, un excéntrico cineasta franco-chileno conocido por sus obras surrealistas y experimentales como La montaña sagrada o El Topo. Aunque su proyecto de Dune nunca recibió suficiente apoyo económico para su rodaje, el trabajo de producción previo resultó esencial en la creación de la icónica criatura xenomorfa de Alien, gracias al trabajo del artista H.R. Giger. Este asombroso vínculo cósmico en el cine de ciencia ficción va más allá de los mecanismos tradicionales de la industria cinematográfica.
Diseño de Giger para Dune
El Fracaso de Dune: Un Proyecto Perdido
En la década de 1970, Alejandro Jodorowsky cautivó al mundo cinematográfico con su audaz visión para la adaptación de la novela de ciencia ficción de Frank Herbert, Dune. Convocando a un equipo de artistas y expertos, Jodorowsky creó una impresionante biblia visual con más de 3.000 dibujos que detallaban meticulosamente su visión de Dune. Sin embargo, a pesar de la dedicación y el talento involucrados, el proyecto se vio afectado por problemas de financiación, lo que llevó a su desmoronamiento y su desafortunada cancelación.
Las ideas de Jodorowsky resultaban irrealizables para la época. Entre los planes audaces y creativos para su versión de Dune, el director quería trasladar a la pantalla secuencias épicas y emocionantes, con un enfoque artístico sin precedentes, que requerían la fabricación de una serie de escenarios de presupuesto millonario. También imaginó a Salvador Dalí como el Emperador Shaddam IV, y planeó incorporar a Mick Jagger en el papel de Feyd-Rautha. Según se ha mencionado en diversas fuentes, Dalí exigió un salario de 100.000 dólares por cada minuto en pantalla. Aunque su papel en la película no era extenso, esta solicitud se consideró exorbitante y fue uno de los factores que contribuyeron a la cancelación del proyecto del Dune dirigido por Alejandro Jodorowsky.
Diseños de Moebius para Dune
A pesar de ello, Jodorowsky había invertido una cantidad considerable de dinero y trabajo en dar forma a su visión de la novela de Frank Herbert con la idea de ayudar a los inversores a visualizar la escala de su visión creativa. Para dar vida a esa visión, Jodorowsky reunió a un equipo de profesionales con un talento deslumbrante. Contó con el artista suizo H.R. Giger, famoso por su estilo oscuro y surrealista, para el diseño de escenarios y criaturas. También colaboró con el ilustrador francés Jean Giraud, conocido como Moebius, para crear los diseños de vestuario y escenarios. Pero no fue suficiente: el proyecto enfrentó graves problemas monetarios. Las empresas productoras se mostraron reticentes a invertir el presupuesto necesario para llevar a cabo la ambiciosa visión de Jodorowsky. A pesar de sus esfuerzos por conseguir el respaldo económico, el proyecto nunca llegó a materializarse.
Diseño de giger para Dune
El legado de visual de Dune a Alien
Aunque el proyecto de Dune se perdió en la oscuridad, su influencia perduraría en el destino de otra película de ciencia ficción: Alien. Aquí empiezan las casualidades gracias a uno de los colaboradores de Jodorowsky en Dune: Dan O'Bannon. En la fase de preproducción de la película, la colaboración entre Dan O'Bannon y H.R. Giger fue un factor crucial para dar vida posteriormente a la inolvidable criatura xenomorfa que se convertiría en el icono del cine de ciencia ficción, así como todos los escenarios relacionados con la nave alienígena estrellada que vemos al principio de la película. Dan O'Bannon, quien tenía la idea original de la película Alien a partir de elementos que ya estaban presentes en Dark Star, quedó impresionado por el trabajo visual de Giger en Dune, y pensó que era la persona perfecta para dar vida a la criatura alienígena que se colaba en la nave espacial Nostromo.
Diseño de giger para Alien
Giger aportó su inigualable talento para plasmar lo grotesco y lo sublime, creando una criatura que era a la vez hermosa y aterradora, sexual e industrial. Su trabajo destaca en los detalles biomecánicos y en la estética general del alien, que se convirtió en un símbolo de la película. El diseño de Giger para el xenomorfo fue esencial para establecer la atmósfera claustrofóbica y opresiva de Alien. Su estilo único y su enfoque artístico se integraron perfectamente en la visión de O'Bannon para la película, lo que permitió que la criatura se convirtiera en una fuerza aterradora e inquietante que aterrorizó a los espectadores y que marcaba la porta a seguir por el resto del diseño de producción.
Alien
Conscientes de que el proyecto de Alien comenzaba a abandonar el terreno de la "Serie B" cinematográfica, y que su presupuesto se disparaba en consecuencia, la productora de la película quiso aprovechar el potencial de la preproducción apostando por Alien como uno de sus estrenos más importantes para aquel año. De ahí que comenzaran a desconfiar de la capacidad de O'Bannon para gestionar el presupuesto y lograr un éxito de taquilla que justificara la inversión. 20th Century Fox y Brandywine Productions tomaron la decisión de apostar por Ridley Scott en su lugar. Scott ya había demostrado su habilidad como director en proyectos previos y tenía una visión única para la película de ciencia ficción. Su enfoque artístico y creativo, combinado con su capacidad para crear atmósferas intensas y visuales impactantes, convencieron a los productores de que sería la elección adecuada para dar vida a la historia.
Aunque la experiencia previa de Dan O'Bannon en Dark Star fue el germen del proyecto, no gozaba de la misma experiencia y visión de Ridley Scot. La elección de Scott demostró ser acertada, ya que su dirección magistral llevó a Alien a convertirse en un clásico del género y una película icónica en la cultura cinematográfica. La estética visual y la atmósfera tensa creada por Ridley Scott han dejado un legado duradero (y rentable) en la ciencia ficción, lo que justifica la decisión de reemplazar a O'Bannon como director y enaltece la influencia de Scott en la trascendencia de Alien.
La trascendencia de lo perdido
Aunque Dune de Jodorowsky nunca llegó a la gran pantalla, su legado ha perdurado en la memoria colectiva de los fans del cine de ciencia ficción. A través de entrevistas y documentales, la historia detrás del proyecto perdido ha sido rescatada y celebrada como una de las grandes epopeyas cinematográficas nunca realizadas. La pasión y la visión artística de Jodorowsky, junto con el talento de su equipo, han elevado la leyenda de Dune a un estatus mítico dentro de la industria, demostrando que incluso las películas que nunca fueron rodadas pueden tener un impacto profundo y duradero en la cultura popular.
El Incal
La conexión creada durante la preproducción de Dune entre Alejandro Jodorowsky y el artista Moebius, Jean Giraud, trascendió más allá de este proyecto. Juntos, llevaron a cabo una colaboración épica en la creación de una serie de cómics conocida como El Incal. Esta serie, publicada en la década de 1980, se convirtió en una obra maestra de la ciencia ficción y la fantasía, consolidando el legado de Jodorowsky y Moebius en el mundo de la narrativa visual. El Incal abarcó temas filosóficos profundos y exploró universos complejos, muchos de ellos presentes en la versión de Jodorowsky para Dune, convirtiéndose en una fuente de inspiración para futuras generaciones de artistas y escritores.
El Incal (Integral) (Reservoir Gráfica)
El fracaso de Dune y el surgimiento de Alien y El Incal son ejemplos fascinantes de cómo un proyecto perdido puede tener un impacto duradero en la industria cinematográfica. La pasión y la creatividad de Alejandro Jodorowsky y su equipo, junto con la visión artística de Dan O'Bannon, dejaron una huella imborrable en la cultura popular y la estética del cine de ciencia ficción de la mano de Ridley Scott y Alien. Aunque ni la película Dune de Jodorowsky ni el Alien de O'Bannon llegaron a ver la luz, su legado continúa inspirando a cineastas y aficionados a lo largo de las décadas, y su importancia en la historia del cine es hoy innegable.
En 3Djuegos | ¿Por qué se canceló la película más oscura, adulta y pesimista de Star Wars?
En 3Djuegos | Una actualización del Universo Star Wars hace que uno de los agujeros de guión del Episodio 9 sea todavía peor
En 3Djuegos | Tarantino tiene razón: George Lucas utilizó este clásico desconocido de la ciencia-ficción para crear Star Wars