El 23 de marzo hicieron ocho años desde el estreno de Batman vs. Superman: El amanecer de la justicia. Aclamada por unos y denostada por otros, el trabajo de Zack Snyder terminó por dar forma a un deseo que había estado gestándose en Warner Bros. desde casi dos décadas atrás y que contó, en una primera incursión, con nada menos que el director de La historia interminable y el guionista de Seven como principales responsables. ¿Cómo habría sido esta película?
Para conocer esta historia hay que remontarse bastante tiempo atrás, antes incluso de que Christoper Nolan pusiera una pica en Flandes y recuperara para la gran pantalla a Bruce Wayne en su trilogía de El caballero oscuro. Entre finales del siglo XX y comienzos del XXI, Warner Bros. y Cannon Films habían demostrado respectivamente su incuestionable capacidad para arruinar las franquicias de Batman y Superman respectivamente, pero eso no iba a impedir a los primeros tratar de reflotar ambas marcas con nuevas incursiones cinematográficas.
Teníamos así a Darren Aronofsky con Batman: Year One, y teníamos así a J.J. Abrams escribiendo el guion de Superman Flyby. Sobra decir que ninguno de estos proyectos, como esta misma Batman vs. Superman, verían la luz del día.
Objetivo: presentar una batalla de titanes
El proyecto de Batman vs. Superman, después de alguna otra intentona más mantenida en silencio por parte del estudio, se oficializó a mediados de 2002 con Wolfgang Petersen detrás de cámaras y Andrew Kevin Walker como guionista. La idea inicial era presentar una historia donde los héroes deben unirse para luchar contra una amenaza... solo para terminar chocando en cómo actuar. "Superman representa lo que es poderoso, claro, brillante, noble y justo; Batman es oscuro, obsesivo y vengativo. Como son tan diferentes, inevitablemente terminarán chocando. Será una batalla de titanes", vendía su director a cargo.
Superman se divorcia y a Batman le asesinan a su mujer en este proyecto fallido de BvS de 2002
Todo parecía ir bien con este proyecto de inicio, tanto que con un borrador ya preparado se confirmó a Colin Farrell como Batman (acabaría siendo El pingüino 20 años después en The Batman con serie en solitario en marcha) y Jude Law como Superman (le vimos de villano de Brie Larson en Capitana Marvel). También se anuncio que un viejo conocido de Batman, Akiva Goldsman, revisaría su libreto y esto fue todo, Warner Bros. volvió a cambiar de parecer decidió apostar por dos proyectos en solitario, Batman Begins y Superman Returns de Bryan Singer.
La película empezaba con el funeral de Alfred
Que el proyecto no llegara a rodarse no significa que no sepamos nada de cómo hubiera sido. A la gente del cine le gustan mucho largar de sus proyectos fallidos y en este caso, Akiva Goldsman quiso hablar sobre la no-película hace cuatro años en una charla y hay algo que tengo claro, si Batman vs. Superman de Zack Snyder te pareció excesivamente oscura, es que no conoces esta versión.
"Estábamos en preproducción y era la cosa más oscura que habríais visto. Empezaba con el funeral de Alfred y Bruce se había enamorado y renunciado a ser Batman. Era ahí cuando llegaba el Joker y mataba a su mujer. Después de eso descubrías que todo había sido una mentira., que todo había sido un elaborado plan del Joker para derribar a Batman". — Declaraciones a Collider
No quiso ahondar más en detalles, incluyendo el papel que jugaba Superman en esta historia, pero esta premisa narrativa sí coincide con otro guion que ha estado rulando desde entonces y en el cuál, sin entrar en profundidad, se deja claro que Bruce Wayne tenía que soportar alguna que otra perdida más, mientras su "amigo" de Metrópolis se enfrentaba a un divorcio con Lois Lane, empezaba una relación con Lana Lang y trataba de evitar que Batman cayera en una espiral de violencia y venganza de la que no pudiera recuperarse. Era una historia con mucho dolor y muerte concebida poco después de los atentados del 11-S.
Si todo hubiese ido según lo previsto la película habría llegado a cines a mediados de 2004 y no se hubiera quedado como parte de un futuro alternativa vislumbrado en un huevo de pascua de Soy Leyenda, también escrita por Akiva Goldsman. Pero no fue así, no se llegó a un entendimiento y tampoco los fans parecían muy entusiasmados con el proyecto (aunque curiosamente 10 años después, cuando se anuncio BvS, perdieron la cabeza por ver la película).
Wolfgang Petersen, por cierto, acabó dirigiendo una de las mayores decepciones de Brad Pitt, Troya. Lo hizo para Warner Bros. y en la fecha donde debió llegar esta Batman vs. Superman que, como ya sabemos, Zack Snyder terminó por desarrollar bajo el empuje y deseo del estudio de cine más de una década después. Tanto Troya como esta BvS pueden verse en HBO Max y Prime Video; eso sí, ambas en sus montajes teatrales y no sus respectivos Director's Cuts.
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