"Era demasiado". Un importante personaje de Crónicas Vampíricas fue rechazado por su propio actor, pero no tenía razón

Crónicas Vampíricas parece estar experimentando una segunda vida desde que llegara a las plataformas de streaming. Durante la década de 2010, se convirtió en uno de los furores principales entre los adolescentes de la época, que vivían por aquel entonces un auge del "dark fantasy". Mientras Crepúsculo vendía millones de copias y se hacía con la gran pantalla, la serie protagonizada por Nina Dobrev, Paul Weasly y Ian Somerhalder conquistaba la televisión durante casi diez años. Terminó en 2017 entre muchas idas y venidas de sus actores, pero dando el relevo a The Originals, un spin-off centrado en los vampiros originales. Ahora, en pleno 2025, el actor que da vida a Damon ha reflexionado sobre el furor de su personaje y ha dejado unas declaraciones muy llamativas sobre el destino de este. 

A Ian Somerhalder no le gustaba Damon

Ian Somerhalder saltó a la fama tras aparecer en Perdidos, pero lo que realmente lo convirtió en uno de los actores del momento fue su papel de Damon en Crónicas Vampíricas. Este encarnaba a uno de los hermanos Salvatore, un vampiro despiadado sin ningún límite moral. Mientras que Paul Weasly hacía el papel de chico bueno, Damon se hacía con la audiencia por aportar chispa a la trama. 

Sin embargo, para los que ya vieron la serie, su personaje comenzaba a cambiar a partir de la segunda temporada. Si bien esta transición fue gratamente recibida por el público, que veía como el romance entre Dobrev y él llegaba también a la ficción, no fue tan bien aceptado por el propio actor. 

Ha sido durante una entrevista con Digital Spy donde el actor ha revelado que incluso llegó a llamar a los guionistas casi llorando y preguntando "¿por qué le hacéis esto al personaje?". Según recogen los compañeros de Espinof, el actor se divertía en un rol malvado y cruel y no quería cambiar. Sin embargo, los encargados de la serie le comunicaron que el personaje no podía quedarse plano. 

Kevin Williamson, guionista, alegó que en un arco de 200 episodios, "no puede ser que un personaje tenga el mismo truco siempre". A Somerhalder no le quedó más remedio que aceptar. "De repente lo ves clavándole una estaca en el corazón mientras le crea visiones en su mente. Era demasiado", alegaba el actor con respecto al capítulo 12 de la segunda temporada.  

Unas declaraciones que sin duda sorprenderán a más de un aficionado a la serie. Por fortuna, el personaje siguió siendo uno de los más interesantes y consiguió terminar su participación de una forma que convenció a los fans. 

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