Se dice que mientras tengas un motivo de peso, puedes llevar a juicio a quien sea. Sin embargo, el hecho de enfrentar a grandes corporaciones a acciones legales por un particular es, quizá, de lo más curioso que hay. En este caso, Héctor "H3CZ" Rodríguez, el cerebro detrás de OpTic Gaming, y Seth "Scump" Abner han decidido plantar cara a Activision Blizzard con una demanda de proporciones épicas mientras la acusan de prácticas monopólicas en relación a la Call of Duty League.
La situación es, cuanto menos, curiosa. Para los que estáis algo alejados del mundo competitivo de Call of Duty, Héctor Rodríguez lleva desde 2007 en los deportes electrónicos y ahora, a sus 44 años, es presidente de OpTic Texas. Por su parte, Seth Abner, conocido como "Scump" o el "Rey de Call of Duty", ha pasado media vida en las competiciones internacionales, desde los 15 años cuando compitió junto al equipo Quantic LeveraGe.
Una demanda millonaria alegando daños y perjuicios
Ambos, con una trayectoria impecable en los esports, buscan una compesación de nada menos que 680 millones de dólares en concepto de daños y perjuicios por parte de Activision Blizzard. La demanda, presentada el jueves pasado, revela detalles cuestionables sobre el control abusivo que el binomio empresarial ejerce sobre la liga.
"OPTIC H3CZ", Héctor Rodríguez
Antes de la creación de la Call of Duty League, los torneos eran organizados por terceros y tenían una estructura más abierta, pero todo cambió con la llegada de la Call of Duty League en 2019. Activision Blizzard limitó la liga a 12 equipos, exigió tarifas de franquicia millonarias y estableció condiciones financieras elevadas para los participantes.
Una demanda que expone cómo las organizaciones de deportes electrónicos se vieron obligadas a aceptar términos restrictivos, desde el pago de 27,5 millones de dólares por una franquicia hasta ceder el 50% de los ingresos por ventas y entradas a Activision Blizzard. Además, Rodríguez y Abner esgrimen que la empresa prohibió a los equipos y jugadores profesionales participar en otros torneos y limitó su capacidad para obtener patrocinios independientes.
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The Verge ha contactado con la compañía estadounidense para solicitar información al respecto. Delaney Simmons, portavoz de Activision Blizzard, menciona que la gigante Norteamericana está decepcionada ante la demanda interpuesta por estos miembros de la comunidad de CoD en un litigio que "es perjudicial para los propietarios de equipos, jugadores, fanáticos y socios que han invertido tanto tiempo y energía en el éxito de la Call of Duty League".
Esto no es nuevo para Activision Blizzard, que ya ha enfrentado acusaciones anteriores de comportamiento anticompetitivo. En 2023, resolvieron una demanda con el Departamento de Justicia de EE.UU. por el Impuesto sobre el equilibrio competitivo. La empresa argumenta que estas afirmaciones carecen de base y que defenderán su posición firmemente. Sin embargo, la batalla legal de Rodríguez y Abner apenas está comenzando y en las próximas semanas quizá tengamos información nueva.
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