Lo llaman el BioShock soviético y tras jugar 4 horas a Atomic Heart, puedo decir que es eso y mucho más

Lo llaman el BioShock soviético y tras jugar 4 horas a Atomic Heart, puedo decir que es eso y mucho más

30 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
Atomic Heart
alberto-pastor

Alberto Pastor

Jefe de Contenidos

Casi que nací con una NES bajo el brazo y desde entonces, jugar se ha convertido en una pasión que me ha llevado hasta aquí, a 3DJuegos, donde escribo desde hace más de 10 años y ejerzo también de jefe de redacción. Con más de 20 años de experiencia en el periodismo de videojuegos, soy un gran fan de Nintendo desde pequeño, pero tener un PC a finales de los 90 me hizo disfrutar también de las aventuras gráficas como Monkey Island, los juegos de estrategia como Age of Empires o RPG como Baldur's Gate. Aficionado al cine, mega fan de Star Wars y aprendiz de pianista, si me hablas de Grim Fandango y te invito a una cerveza. LinkedIn

Hay historias difíciles de creer y la de Atomic Heart es una de ellas porque cuando lo ves en acción, cuesta creer que un videojuego tan espectacular y ambicioso como este sea en realidad el primer trabajo de un equipo de jóvenes talentos que no parecen tenerle miedo a nada. Cuando se dio a conocer en el ya lejano 2018 con uno de esos tráilers que no se olvidan con facilidad, no pocos lo bautizaron con el nombre de "el Bioshock soviético". Y es verdad que recuerda al genial videojuego de Irrational Games, lo que ya de por sí es todo un halago. Pero es que además, el juego de Mundfish también tiene un gigantesco mundo abierto con mazmorras, puzles y combates multitudinarios. Y es tan grande, y se ve tan bien, que no te lo crees; que es imposible que algo así sea el primer juego de un equipo novato. Y sin embargo, lo es. He jugado cuatro horas a Atomic Heart y estoy realmente ilusionado.

Esta primera toma de contacto con el que sin duda es uno de los videojuegos más esperados de 2023 me ha sorprendido de formas que no esperaba, me ha confirmado otras cosas que ya me ilusionaban desde hace años, y obviamente me ha generado también algunas dudas acerca del éxito o fracaso de ideas como la apuesta por el mundo abierto. Especialmente porque nos lanzaron allí con un montón de armas y poderes especiales sin tener muy claro a dónde ir o qué hacer, por lo que nunca terminé de sentirme cómodo. Y aún así, vi en este gigantesco escenario algunos detalles con los que resulta difícil no emocionarse.

Atomicheart Screenshot 11 Logo

¿Se parece Atomic Heart a Bioshock?

Da igual los años que pasen. Cada vez que recuerdo el descenso a la ciudad submarina de Rapture en el primer BioShock, o la llegada a Columbia de Bioshock Infinite, un escalofrío recorre mi cuerpo. Era algo increíble. Cada paso que dabas resultaba más fascinante que el anterior con todos esos detalles aquí y allá que te hacían desear perderte en sus escenarios. Algo así he sentido nada más adentrarme en el particular mundo de Atomic Heart, en el que la Unión Soviética ganó la guerra gracias a sus increíbles avances tecnológicos encarnados por un sinfín de robots y autómatas que son ya parte de la vida cotidiana de sus habitantes. Y ahí están. Nada más abrir los ojos en esta larga demostración, te encuentras en mitad de una gran fiesta en una ciudad que no deja de maravillar con el colosalismo de sus estatuas, el diseño de sus edificios y el ajetreo que se respira en las calles. Y claro, así, a ver quién se resiste a darse un paseo.

Este es un trayecto bastante lineal -y algo lento- pero ayuda a meterte de lleno en la historia y el mundo de Atomic Heart antes de que todo se vaya al garete. Hay algunos planos que te dejan sin aliento, ideas propias de la ciencia ficción que resultan apasionantes, y un trasfondo argumental realmente profundo que denota el cuidado con el que se ha escrito la historia del juego. Vamos, que no es solo estética. Y queda claro en cuanto empiezas a soltar carcajadas con las divertidísimas conversaciones entre el protagonista, ¡que no para de maldecir!, y el guante que le permite usar poderes especiales. O cuando te cruzas con algunos personajes de los que prefiero no hablar porque el shock inicial es brutal.

Atomicheart Screenshot 06 Logo

Pero ojo porque a pesar de las bromas Atomic Heart es un juego despiadado como pocos. La demo estaba configurada en fácil, yo puse el modo Normal, y creo que morí tres o cuatro veces contra el primer enemigo que te sale al paso en las oscuras instalaciones científicas en las que quedas atrapado. De entrada solo vas equipado con un hacha, que además es bastante lenta, en contraposición a unos enemigos que corren como locos y usan fintas para engañarte con una serie de animaciones que me han encantado. Para protegerte cuentas con un movimiento de esquiva esencial para evadir los ataques fuertes que pueden dejarte aturdido en el suelo. Y más adelante, claro, también tienes poderes especiales con los que puedes congelar a los robots, lanzarlos por los aires, paralizarlos con descargas eléctricas, etc.

Cuando adquieres todas esas mejoras la experiencia se vuelve más amigable, pero esos compases iniciales son una pesadilla que disfruté una barbaridad. Imaginaos. Rodeados de enemigos en un lugar que aún no entiendes con un hacha en las manos y solo tres cartuchos en la escopeta. Es un infierno.

Atomicheart Screenshot 07 Logo

Atomic Heart es difícil, tiene sigilo y hasta puzles

Si ardes en deseos de jugar a Atomic Heart esperando encontrar un "Bioshock soviético" con una ambientación escandalosamente buena te diré que, visto el primer nivel, la descripción le viene como anillo al dedo. Por su puesta en escena me ha recordado al memorable System Shock 2 del propio Ken Levine, con un aura propia de los juegos de terror que consigue que te muevas por el escenario casi con miedo a lo que pueda pasar. Cada combate, incluso ya avanzado el juego, se presenta como un duelo a muerte en el que no puedes dejar de moverte y esquivar mientras golpeas porque si lo haces… estás acabado. De ahí que el sigilo sea importante, hasta el punto de evitar cámaras de vigilancia para no alertar a los autómatas que custodian el nivel.

Con un diseño lineal pero abierto a la exploración, Atomic Heart incluye también puzles

Con un diseño lineal pero abierto a la exploración para encontrar recursos e información sobre lo que está ocurriendo en el lugar, Atomic Heart incluye también puzles que a priori parecen muy simples, pero poco a poco van ganando peso hasta ser una pieza más de la acción del juego. Pasas de toquetear botones a mover literalmente bloques completos del mapa, o jugar con la gravedad, para alcanzar zonas de otro modo inaccesibles. Y todos estos rompecabezas se sienten bien integrados en el diseño de los escenarios. Pero aquí la reina es la acción y por lo visto, no defrauda. Hay cerca de una veintena de armas que puedes personalizar con libertad al estilo de los RPG, añadiendo nuevos tipos de munición, o potenciando ciertos atributos con elementos estéticos que acaban dando forma a herramientas de combate de lo más vistosas. Entre ellas un puñado de armas cuerpo a cuerpo que tienen aquí todo el sentido del mundo, en tanto la munición parece ser un bien de lo más escaso. De ahí que sea tan importante explorar a fondo cada escenario.

Toda esa chatarra se reinvierte en mejoras de equipo repartidas en varios árboles de habilidad muy en la línea, una vez más, de los juegos de rol. Y aquí se incluyen los poderes especiales del protagonista, que serían el equivalente a los plásmidos de Bioshock, que puedes combinar con las propias armas de fuego para crear efectos destructivos como llamaradas, tras cubrir a los enemigos de un líquido inflamable. Pude trastear con varios de estos poderes pero necesito ver más para comprobar hasta qué punto el juego te permite ser creativo -y canalla- exterminando robots.

Atomicheart Screenshot 12 Logo

El mundo abierto en Atomic Heart

Lo que menos esperaba encontrar en Atomic Heart es un gigantesco mundo abierto que explorar libremente, y reconozco que cuando nos avisaron de ello empecé a temblar de miedo. ¿Por qué un mundo abierto en un juego como este? ¿Realmente es necesario? Aún tengo dudas al respecto pero también estoy como loco por perderme en él porque había montones de zonas marcadas en el mapa que podrían considerarse como mazmorras secundarias, en las que básicamente obtienes nuevos planos y objetos especiales para fabricar mejores armas. La gracia está no solo en pegar tiros como un loco sino en descubrir de qué modo accedes a esas zonas especiales. Por ejemplo, la del primer jefazo de Atomic Heart.

No es que sean retos muy rebuscados pero aportan cierta variedad a la acción. El problema es que nunca es fácil enseñar un mundo abierto como este. Quieres ir a todas partes pero no en todas ellas se han activado los desafíos correspondientes, generando la sensación de que este es un mapa muy espectacular pero falto de contenidos. Básicamente, en la demo, la acción se limitaba a explorar el mapa, disfrutar de las vistas y pegar tiros. En este punto imagino que más de uno estará haciéndose la misma pregunta que me hice yo: "¿qué pasa con las misiones tan espectaculares que hemos visto en los tráilers?".

Atomicheart Screenshot 10

Hay que entender este gigantesco mundo abierto como la puerta de entrada a las misiones de historia que se ocultan tras algunos puzles más elaborados, o incluso tras combates contra enemigos temibles. Y esto es algo que a mi por lo menos me tranquiliza. Cuando pregunté si Atomic Heart iba a ser más mundo abierto que misiones al estilo BioShock, su director lo negó rotundamente, asegurando que se ha buscado un equilibrio entre ambos escenarios. Y si bien es verdad habría preferido menos mundo abierto y más misiones lineales, no puedo negar que disfruté bastante de algunas batallas multitudinarias o puzles más rebuscados en este mundo abierto. Sin olvidar al primer jefazo del juego, que es una locura. Un campo de batalla inmenso para hacer frente a un robot tan increíblemente rápido que te pone el corazón a mil por horas. Es puro frenetismo.

Tiene patrones de ataque muy divertidos que te obligan a correr, saltar y esquivar constantemente; aguardando el momento oportuno para disparar en sus puntos débiles. Tan bien me lo pasé que me enfrenté a él un par de veces más. Así que si el resto de enemigos finales tienen este nivel, aquí hay otra razón más para esperar a Atomic Heart con ganas.

Atomicheart Screenshot 14

Uno de los juegos más espectaculares de 2023

Hasta ahora no he mencionado el apartado técnico de Atomic Heart pero es simplemente espectacular. Ya no es solo el nivel de detalle de escenarios y enemigos, o las animaciones de los robots, el tamaño de los mapas o hasta los efectos de iluminación. Todo en este juego está al servicio de una ambientación que atrapa desde el primer instante, maravillándote con algunas vistas y escenarios que dejan sin aliento. El juego es también bastante imaginativo en el diseño de algunos de sus escenarios de combate, creando situaciones de juego tremendamente divertidas. Y sí, seguro que andas pensando "esto no lo mueve ni un PC de la NASA", pero Mundfish insistió mucho en el trabajo de optimización, hasta el punto de que el juego es perfectamente jugable en Steam Deck. Y en consolas, ya conocemos algunos datos técnicos de Atomic Heart prometedores.

Tampoco quiero olvidarme del apartado sonoro porque esta demo, ¡ya tenía voces en español!

Tampoco quiero olvidarme del apartado sonoro porque esta demo, ¡ya tenía voces en español!, con un trabajo de doblaje de altísimo nivel. Y qué decir de la banda sonora. Desde el primer tráiler Atomic Heart ha demostrado tener una enorme personalidad con su selección musical, con temazos que son la antítesis de lo que esperarías escuchar en mitad de un apocalipsis robótico, pero que crean un efecto arrollador durante los tiroteos. Pero a esta música pop / folklórica debemos sumar también el trabajo del compositor de DOOM, que mantiene la línea cañera vista en el genial juego de Id Software.

No voy a negar que estoy ilusionado con este nuevo juego. Le tengo ganas desde hace ya varios años y poder sentarme al fin a jugar durante unas horas me ha hecho respirar aliviado. Su ambientación es increíble; la acción es fiel heredera del trabajo de Irrational Games sin perder por ello la oportunidad de crear su propio camino, y aunque el mundo abierto aún me suena raro en un juego de estas características, creo que tiene potencial para conquistarnos a todos. Ya confirmado que Atomic Heart prescinde del multijugador, solo queda esperar unos meses para disfrutar de este esperadísimo videojuego. Queda poco, pero será difícil aguantar las ganas de explorar su particular mundo de pesadilla.

Comentarios cerrados
VÍDEO ESPECIAL

4.461 visualizaciones

20 MEJORES PELICULAS VIDEOJUEGOS

El cine y los videojuegos, los videojuegos y el cine: qué relación tan estrecha. Existen muchos, muchíiiisimos videojuegos basados en películas, pero también pasa al contrario. Vemos varios ejemplos.