Posée a tus enemigos y controla sus movimientos. Un prometedor videojuego de acción en tercera persona con corazón multijugador y cuerpo etéreo.
Cuando te dan la oportunidad de abandonar tu cuerpo para introducirte en el de otras personas o incluso objetos, te vienen a la mente un montón de pensamientos impuros. El estudio FeelPlus y Square Enix se han quedado con la parte guerrera de esta opción. Y es que siguiendo la estela de juegos como Messiah o Geist, en MindJack vamos a encontrarnos ante un juego de acción en tercera persona en el que más que pegar tiros a diestro y siniestro, que también, vamos a disfrutar de la opción de convertirnos en un espíritu o ente incorpóreo con el que podremos poseer a prácticamente todas las personas y seres mecánicos que nos encontraremos por el camino. ¿El resultado? Un sinfín de posibilidades de juego que se verán potenciadas por la vertiente multijugador del título.
Donde pones el ojo…
Como decimos, MindJack es un título de acción en tercera persona convencional en lo que se refiere a la parte de acción, y novedoso en lo restante. No en vano, y aunque es cierto que ha habido varios juegos que han seguido esta línea de posesiones indiscriminadas, esta obra de FeelPlus promete apostar muy fuerte por el juego en línea, tanto en su vertiente cooperativa como competitiva. Así que dejad volar vuestra imaginación y pensad por un momento todo lo que esto implica.
Si jugamos en solitario, durante la partida encarnaremos al agente especial Jim Corbin, al que acompañarán otros soldados controlados por la inteligencia artificial del juego o, como os podéis imaginar, por otros usuarios –hasta cinco pueden jugar en un mismo equipo-. Independientemente del número de usuarios en liza, durante las partidas tendremos que ir avanzando por una sucesión de niveles plagados de enemigos y peligros en forma de sistemas defensivos a los que podremos derrotar, por supuesto, con un importante arsenal de armas de fuego.
¿Qué hace especial al juego? Que tanto nosotros como nuestros rivales pueden cambiar de anfitrión constantemente, por lo que podemos empezar el nivel encarnando a un soldado raso para terminarlo en el interior de un civil con el que habremos sorteado obstáculos de una forma totalmente distinta a la que habríamos empleado con el citado soldado; o con unidades especiales del tipo robots mecánicos u oficiales con acceso a zonas restringidas. Cada cuerpo en el que nos introduzcamos contará con una serie de ventajas y desventajas que debemos aprovechar.
Otra de las principales novedades que presenta MindJack es que si bien cinco jugadores podrán unirse a nuestra partida para acompañarnos en la aventura, también podrán elegir formar parte del otro bando, de los propios enemigos que intentan aniquilarnos, incluidos grandes criaturas a modo de enemigo final. Bien sea en nuestro bando o en el contrario, todos los jugadores tendrán la habilidad de introducirse en el interior de otros cuerpos, así que las matanzas que se van a generar en cuestión de minutos prometen ser de órdago.
Aquí, hay que destacar dos aspectos. El primero es que si morimos tardaremos un par de segundos en abandonar nuestro cuerpo para ir en busca de otro huésped como forma de penalización; pero si estamos jugando en una partida de la campaña, si muere el anfitrión de la partida todo se habrá acabado. Por tanto, tendremos que colaborar para que esto no ocurra. Tampoco queremos olvidarnos de las diversas mejoras que podemos adquirir progresivamente al superar objetivos o eliminar enemigos: mejoras de salud, potencia de ataque, mejor índice defensivo, e incluso la posibilidad de usar habilidades especiales tcomo lanzar el “alma” de un jugador fuera del cuerpo invadido.
Con todo esto, nos veremos rápidamente buscando coberturas y pegando tiros de una forma similar a la de otros exponentes del género, pero claro, con la salvedad de que aquí podemos cambiar de cuerpo para adaptarnos rápidamente a las nuevas contingencias del campo de batalla.
En lo que respecta al apartado técnico, MindJack no parece que vaya a ser el juego más espectacular del momento, si bien es cierto se ha apostado por una ambientación y un argumento que recuerdan mucho al de clásicos como Deus Ex (grandes corporaciones que tratan de gobernar el mundo desde la sombra) que no le sientan nada mal.
En definitiva, MindJack se presenta como un prometedor juego de acción en tercera persona que si bien mantiene una base jugable muy similar a la de otros títulos del mismo género, cuenta con el fantástico añadido de poder saltar al interior de otros cuerpos para hacer que las batallas sean algo más que pegar tiros. Está por ver qué tal funciona esta mecánica en el juego en sí y sobre todo, qué tal se adapta al juego multijugador, modalidad en el que se están poniendo todas las esperanzas. De momento no hay dudas de que la cosa promete mucho.