Disney va a por todas, y la nueva demostración la tenemos en un juego de simulación de vida que recoge la esencia de títulos como Animal Crossing. Ya he tenido la ocasión de probarlo, y aunque partía con unas bajas expectativas, lo cierto es que lo nuevo de Gameloft me ha sorprendido para bien. Aquí te cuento lo que podemos esperar.
Los juegos de simulación de vida están en auge y hay un considerable catálogo de propuestas. Si estás puesto en el tema, te sonarán títulos tan recientes como Story of Seasons: Pioneers of Olive Town, Harvest Moon: Un Mundo Único, Rune Factory 5 o el incombustible Animal Crossing: New Horizons. A la lista siguen sumándose más y más títulos, en este caso con una incorporación que trae bajo la manga algunas particularidades. La principal es un toque más aventurero, pero la más llamativa sin duda es la representación de los fantásticos mundos de Disney.
Los desarrolladores de Gameloft ya nos han sorprendido con Disney Speedstorm, y ahora tratan de hacer lo propio con Dreamlight Valley. Si os soy completamente sincero, no me ha atrapado de la misma manera, y considero que sus valores de producción están bastante por debajo (por lo menos, lo que he jugado hasta ahora). Sin embargo, tiene algo que me ha hecho volver día tras día. Posee ciertos toques de adicción, y eso en un juego de este tipo es muy importante. La cantidad de tareas a realizar es inmensa, la variedad es muy buena y se representan los mundos de la factoría de animación que tanto nos gustan, desde La sirenita hasta Wall-E. Todo con la promesa de ser un título free-to-play (F2P) con actualizaciones frecuentes y una fase de acceso anticipado previa al lanzamiento, el cual está fijado para el año 2023.
Reconstruyendo el valle de las estrellas Disney
Te preguntarás qué es esto y qué lo diferencia de otras propuestas similares. Básicamente, la principal respuesta está en las licencias de Disney, aunque lo cierto es que faltaría a la verdad si no dijera que este título propone cosas bastante únicas. Para empezar, tiene una trama que no está nada mal. Principalmente porque está bien construida, y eso ya es algo a valorar dentro de este tipo de juegos. Todo comienza cuando el Olvido llega a las tierras en que habitan Mickey, Goofy y compañía, un antaño maravilloso valle que ha caído en las tinieblas.
Es como recoger el poblado en ruinas de Animal Crossing y llevarlo a la gloria
Allí llegamos nosotros, con un Merlín asediado por la situación, el cual nos pide amablemente que le ayudemos a deshacer este embrollo. Básicamente, es como recoger el poblado en ruinas de Animal Crossing y llevarlo a la gloria, pero esta vez con unos vecinos muy diferentes, procedentes de las producciones de Disney y Pixar. Empezaremos acabando con las espinas del lugar, para a continuación picar piedra para obtener materiales, empezar a sembrar plantas y, en definitiva, devolver todo su esplendor al conocido como Dreamlight Valley, que da nombre al juego.
Entre medias hay un buen puñado de misiones, las cuales se van sucediendo a medida que avanzamos en una estructura carga de contenidos y donde gozamos de bastante libertad de acción. Con esto quiero decir que puedes entretenerte en el valle todo el tiempo que quieras, ya sea regando tu huerto, recolectando restos de madera, cosechando lechugas, recogiendo monedas y un largo etcétera. Las tareas de looteo y crafteo son fundamentales, porque otra de las claves del juego está en diseñar el valle a tu gusto, colocando todo tipo de mobiliario y construcciones tanto dentro como fuera de tu casa. Puedes mover cosas, rotarlas y en definitiva disfrutar de un poder de customización que me ha rememorado al de clásicos como Los Sims de Electronic Arts. El editor es potente.
Por eso quiero insistir en que no te dejes engañar por la apariencia simplona del título: encierra más características de las que te puedas imaginar. Para empezar, puedes subir de nivel a tu personaje y personalizarlo con un montón de artículos de ropa y accesorios. Hay un sistema de amistad con los lugareños, y con el tiempo podrás asignarles tareas para que te ayuden a reconstruir el valle. Existe la posibilidad de vender gemas de gran valor, y en su lugar adquirir mejoras como ampliar la capacidad de tu inventario (algo muy necesario). Además, tenemos actividades como la pesca o la cocina, que en realidad funcionan como pequeños minijuegos con sus sencillas pero interesantes reglas.
Una de las partes más interesantes del conjunto está en los puntos Dreamlight que obtenemos a medida que vamos completando tareas en la villa y sus alrededores. Podrían dárnoslos por pescar, cocinar, mejorar nuestra casa, entablar conversaciones y un sinfín de propuestas. Para que lo entiendas, por completar pequeñas misiones. Todo esto sirve para acumular puntuación que nos da acceso a nuevas zonas y, más en concreto, a los distintos reinos que se esconden tanto dentro del castillo de los sueños, así como al para nada reducido campo que hay por explorar (incluidos un bosque, una playa o las montañas).
No me ha causado malas sensaciones, sino más bien lo contrario
Por supuesto, me queda mucho por descubrir, y de momento solo me he quedado en la superficie de lo que ofrece Dreamlight Valley. Sin embargo, no me ha causado malas sensaciones, sino más bien lo contrario. Esperaba un título menos trabajado, y salgo de esta prueba aguardando con interés cómo puede mejorar de cara al lanzamiento, puesto que todavía queda tiempo para seguir trabajando en él. A este respecto, tal vez lo que más urgente es mejorar su apartado técnico, muy simplón, con modelados y animaciones que pueden resultar algo pobres, especialmente si hablamos de personajes tan entrañables como el Tío Gilito, Merlín y compañía.
Esperaba algo más en este sentido, un apartado audiovisual más convincente, con unos valores de producción más ambiciosos que los actuales. Mientras que Disney Speedstorm (el otro juego actual de Gameloft) me pareció muy sólido en este sentido, Dreamlight Valley me da la sensación de que está un escalón por debajo. Esto es lo que menos me convence, unido al hecho de que habrá que ver cómo de interesante se vuelve a largo plazo, puesto que estos juegos realmente demuestran su potencial cuando has pasado unas semanas "viviendo" en ellos. Por ello, me mantengo a la expectativa, y simplemente te recomiendo que le sigas la pista si eres fan de la marca Disney y este tipo de propuestas. Tienes un early access disponible a partir del 6 de septiembre (si estás suscrito a Xbox Game Pass o posees el Paquete de Fundador) para comprobar por ti mismo lo que puede ofrecerte.