Como un niño que mira con interés todo aquello que le rodea, me he acercado a Apple Arcade con la mente abierta. Varios videojuegos exclusivos han llegado al servicio, entre los que destaca Fantasian, el nuevo juego del creador de Final fantasy, Hironobu Sakaguchi. ¿Merece la pena este JRPG? He jugado a su primera parte y te cuento mi experiencia, que te adelanto ya que ha sido realmente positiva.
No os voy a mentir. Hasta hace un par de semanas, el servicio Apple Arcade era para mí un nombre y poco más. Con la llegada de nuevos exclusivos, entre los que destacan Fantasian (Mistwalker) y World of Demons (PlatinumGames), me picó la curiosidad. Pero, ¿cómo podía lanzarme a probar Apple Arcade? No soy un amante especial de los productos de la compañía estadounidense y nunca he tenido un iPhone o un iPad. Recordé que mi querido padre tenía un antiguo iPhone 6S abandonado y lo rescaté para la causa. ¿Funcionarían los juegos? Con el mes de prueba gratis pude aventurarme a probarlo sin riesgo, completamente enamorado por el planteamiento de Fantasian. Y sí, he podido jugarlo, a 60 fps, y aunque los gráficos y la resolución son peores que en otros dispositivos Apple, no he tenido problema alguno para disfrutar de la primera parte de este nuevo JRPG, que al contrario de lo que muchos pensarán, no solo merece la pena, sino que deja algunas ideas nuevas que, sinceramente, otros JRPG deberían imitar en el futuro.
El esfuerzo de Mistwalker por crear un buen juego es evidente y va mucho más allá del uso de 150 dioramas para dar vida al mundo de Fantasian o a la maravillosa música de Nobuo Uematsu. Aunque el título es una oda a los clásicos de los JRPG y muchos recordarán mientras lo juegan la buena época de PlayStation 1, introduce varias mecánicas y funcionalidades muy inteligentes, que demuestran que el estudio ha afrontado el proyecto con las mismas garantías que si hubiera salido en cualquier otra plataforma: Fantasian es un videojuego completo, bien hecho y que además está completamente adaptado al juego móvil, no solo con mecánicas y control, sino también por la propia manera en la que Mistwalker ha querido que el jugador avance y progrese en el videojuego.
Un JRPG de toda la vida...
Lo primero que llama la atención de Fantasian son sus gráficos. Quiero quitarme ya este apartado de encima para deciros que sí, que son preciosos, es un juego cuidado, fantástico en este apartado, con unos escenarios fijos que recuerdan a los Final Fantasy clásicos. Eso sí, la diferencia en este caso es abismal: estamos ante un juego en el que los fondos son, en su mayoría (no siempre), dioramas hechos en el mundo real y creados a mano. El juego, como una buena experiencia rolera, fomenta y premia la exploración, con multitud de cofres escondidos (muchos de ellos cerrados, algo que nos obligará a volver más adelante) y un inteligente juego de perspectivas. La cámara es fija, pero según a donde movamos a Leo, el protagonista de esta historia, esta varía su posición, descubriéndonos nuevos recovecos a los que enviar a nuestro personaje.
Y sí, digo enviar, porque el sistema de movimiento funciona como si de una aventura point and click se tratara. Pulsamos en la pantalla en el lugar al que queremos que nuestro personaje se mueva y allí irá. Os lo digo ya, por si os lo preguntáis: solo he probado los controles táctiles. Muchos títulos de Apple Arcade, este incluido, permiten el uso de mando, ya que estos juegos también pueden disfrutarse por ejemplo en Apple TV. Pero, la verdad, es algo que no he querido: podría haber conectado mi mando de Xbox, pero mi idea ha sido en todo momento tener una experiencia completa de lo que supone jugar a este y otros juegos del servicio con lo que el móvil me da, sin periféricos externos.
En cuanto a la narrativa, nada revolucionario, en la línea de juegos clásicos y otros en los que Sakaguchi ha participado, pero creo que al menos se cuenta de una forma un poco diferente, aunque sin alardes. Leo no sabe prácticamente ni quién es porque le afecta una amnesia aguda que le ha hecho olvidar su pasado y nuestro viaje se inicia en la búsqueda de su memoria, para al menos saber cómo ha acabado dónde está. Como seguramente esperáis, en este camino nos vamos encontrando con nuevos aliados que se unen a nuestro equipo y el relato comienza a magnificarse. Es entretenido y, aunque no creo que vaya a sorprender a nadie, os mantendrá atrapados por saber más de Leo, del resto de protagonistas y de la "mechteria" (el juego está en inglés, así que algunos términos los tengo que reflejar tal cual), una especie de virus que está asolando el mundo y convirtiendo a los monstruos en híbridos entre bestias y máquinas. El diseño de los personajes y de su personalidad creo que es bueno y a mí particularmente me han gustado. Superar la historia principal de esta primera parte de Fantasian os llevará unas 20-25 horas y ya veremos cómo es el producto final en calidad y duración cuando salga la segunda parte a finales de año, si todo va bien. Como último apunte, el juego tiene algunas misiones secundarias, pero son tan irrelevantes en su mayoría que no merece ni la pena hablar de ellas.
Pero con algunas ideas fantásticas
Fantasian es un gran ejemplo de cómo usar la pantalla táctil
Al inicio os he soltado una pequeña bomba: los JRPG tienen que mirar a Fantasian y adoptar algunas características. Y no lo decía de broma, pero vamos por partes. Sí, la jugabilidad del título es la de un juego por turnos de rol clásico. Tenemos nuestros ataques, magias, objetos… Pero ojo, porque hay matices. Por ejemplo, Fantasian fomenta y busca las batallas multitudinarias y para ello da la opción al jugador de atacar a varios objetivos a la vez, pero no como toda la vida se ha hecho. En un gran ejemplo de cómo usar la pantalla táctil y de adaptación a móviles, Fantasian nos deja seleccionar los objetivos indicando la trayectoria con nuestro dedo.
Esto da todo un mundo de posibilidades. Por ejemplo, hay ataques que se pueden lanzar en línea recta que atravesarán a todos los rivales que haya en esa trayectoria. En las magias, por otro lado y por poner otro ejemplo, podemos curvar su recorrido, haciendo que varios enemigos se vean afectados por el ataque. Las opciones estratégicas que nos propone este sistema de lucha son fantásticas y está explotado de diferentes formas que descubriréis. Además, hace un uso muy inteligente de las posibilidades que un móvil da y hace las batallas aún más interesantes. ¿Os habéis enfrentado en un JRPG por turnos a 100 enemigos? En Fantasian sucede, pero es algo tan ambicioso, que ni siquiera caben todos los monstruos a la vez y van apareciendo según vamos eliminando a otros, pero sí tenemos momentos de combates contra 15 o 20 monstruos.
Otra de las mecánicas que me han encantado se la debemos a la herramienta Dimengeon. Seguro que en juegos de rol con encuentros aleatorios habéis acabado hartos más de una vez por no poder desplazaros con cierta rapidez porque un combate frenaba vuestro avance cada dos por tres. Si Fantasian tiene algo, y creo que lo estoy dejando claro, es que está pensado en todos sus aspectos para ser un juego de móvil, pero en el buen sentido de todo esto. Mistwalker es consciente de que muchos usuarios jugarán a este juego partidas cortas, en viajes, en ratos que estén sin nada que hacer o, simplemente, porque no es cómodo jugar durante muchas horas en smartphones para muchos jugadores.
Para evitar la frustración y fomentar el avance en periodos cortos de juego, el sistema Dimengeon permite "almacenar" a los monstruos que nos vamos encontrando, para poder luchar contra ellos más adelante cuando nosotros queramos, haciendo así que el desplazamiento por el mapa sea satisfactorio y que algo muy molesto como pueden llegar a ser los encuentros aleatorios no interfieran en absoluto. Por supuesto, es algo opcional, que podéis activar o no. Además, tiene algunas limitaciones, como que solo podemos "coleccionar" 30 monstruos cada vez, que si nos encontramos con un enemigo nuevo sí tendremos que combatir y que en algunos momentos concretos del juego no se nos permite usarlo, pero os digo de verdad que me ha parecido una solución fantástica y que otros juegos deberían pensar en imitar en el futuro. Dimengeon, sumado al sistema de combate, hace que queramos combatir en cuanto almacenemos unos cuantos monstruos, que no esperemos a tener los treinta, porque las batallas son divertidas, pero a la vez podemos avanzar con más rapidez y sin pararnos a cada paso que demos. Además, este sistema nos permite conseguir experiencia mucho más rápido porque acabamos con más enemigos en solo una batalla, algo que también se agradece.
Y aún así, una de las pegas que le pongo es que he echado en falta algo más de dificultad en algunos momentos. Ojo, no es que el juego sea atacar y ya, porque hay que vigilar nuestra salud, curarnos, usar objetos… pero para cualquiera que haya jugado a este tipo de juegos, no supondrá demasiado reto. Eso sí, si el desafío está en alguna parte es en los jefes, muy abundantes y con diseños realmente atractivos. Creo que, fomentando de nuevo los periodos de juego cortos, Fantasian da al jugador acción constante: la historia avanza a buen ritmo, hay cambios de escenarios con relativa asiduidad (tranquilos, que podéis explorarlos a vuestro aire) y cada pocos minutos de juego tenemos una batalla interesante contra un jefe que nos pone a prueba.
Lo bien que funcionaría este juego en Nintendo Switch…
Lo siento Apple, tengo que pedirte disculpas. Mientras jugaba a Fantasian, me ha surgido un pensamiento intrusivo en repetidas ocasiones: "Esto en consola o PC funcionaría genial, y en Nintendo Switch ni te cuento". Pero no, es un juego de Apple Arcade. Y punto. Está hecho para este servicio, creado con el móvil y la portabilidad en mente, y funciona fantásticamente bien. Mientras tengáis un dispositivo Apple, podréis jugar y disfrutarlo. Y no hay más. Ha sido Apple la que ha apostado por este juego, por darle a Mistwalker la oportunidad de realizar un título mágico, que aunque tiene algunos peros, es muy disfrutable y recomendable. El debate de si las exclusividades son buenas o no es otro, pero desde luego sí opino que si quieres lanzarte a tener un servicio diferenciador dentro de los videojuegos, este es el camino. Apple Arcade tiene buenos juegos exclusivos, porque también me está gustando Wonderbox, un juego de plataformas y acción, y el mencionado World of Demons. Los títulos del servicio están completos, no hay micropagos ni compras, y están hechos para ser disfrutados en los dispositivos Apple, sin miedo a la potencia.
Y sí, Fantasian es de Apple Arcade y no hay más. Es un gran ejemplo de lo que debería ser un videojuego en móviles, con controles genialmente adaptados, con una jugabilidad que se ajusta perfectamente a jugadores que pueden echar media hora y a los que quieren jugar 8 horas al día. Si tenéis acceso a un producto de Apple, probadlo si sois amantes del género, porque os va a gustar; yo ya estoy deseando que salga la segunda parte. Además, Sakaguchi no ha podido evitar dejar diferentes guiños a Final Fantasy que identificaréis seguro y que os sacarán una sonrisa. Es un JRPG clásico, con ideas modernas y buenas, con un apartado gráfico precioso y que tiene una calidad igual a cualquier juego que pueda lanzarse en consolas o en PC. Y creo, honestamente, que muchos jugadores tienen que quitarse el miedo a jugar en los móviles, porque son una suerte de consolas portátiles, cada día más potentes, y que creo que nos va a dar grandes alegrías, sobre todo si las desarrolladoras empiezan a ver a los smartphones como una plataforma seria donde se pueden lanzar videojuegos como este y no clones de los que han triunfado años atrás entre el público casual.