Análisis de Gotham Knights: casi tan bueno como los Batman Arkham pero más RPG de mundo abierto, ¿dónde hay que firmar?

Para Batgirl, Nightwing, Robin y Capucha Roja no ha resultado fácil intentar estar a la altura de Batman. Como tampoco lo ha sido para Warner Bros. Games Montréal, un estudio que tras haber pasado por la laureada saga Arkham con Origins, busca conquistar a los fans del Caballero Oscuro en una Gotham huérfana de Bruce Wayne. Para lograrlo, Gotham Knights echa mano de una fórmula ya familiar donde la corrupta ciudad se presenta como un enorme mundo abierto en el que impartir justicia frente a los malvados planes de algunos de los villanos más reconocibles del universo de DC Cómics. Sin la batseñal alumbrando el cielo de la ciudad, ¿es capaz Gotham Knights de mantener el alto nivel alcanzado por otros juegos de superhéroes en los últimos tiempos? Pues ya te adelanto que sí, pero te cuento los motivos en este análisis de Gotham Knights.

Supongo que no fui el único que, desde su presentación, ha tenido dudas con Gotham Knights. El atractivo del juego parecía centrarse en el cooperativo, algo que, en otras ocasiones, ha interferido en la experiencia para un sólo jugador. Lo cierto es que un multijugador cooperativo no era lo que esperaba de un videojuego que, aunque no forma parte de la saga Arkham, se siente como un sucesor de la franquicia.

Sin embargo, lo que me he encontrado a los mandos ha sido un videojuego que pone su historia como valor principal con independencia del multijugador, permitiéndote disfrutar de Gotham Knight solo o en compañía, e integrando el cooperativo como algo completamente opcional. La forma de plantear el juego te va a resultar muy familiar si has jugado a los juegos de la saga Arkham, porque Gotham Knights se presenta como un gran mundo abierto que recorrer, repleto de desafíos, coleccionables y crímenes por resolver; una ciudad enorme en la que perdernos mientras patrullamos. Aunque sin duda, lo mejor se esconde tras unas misiones principales que nos llevan a través de niveles bien diseñados y que cuentan con una estructura mucho más lineal.

Gotham Knights brilla en sus misiones principales

Apenas te vas a encontrar con misiones principales de la historia que se resuelvan repartiendo golpes en medio de la calle, por lo general, estas se desarrollan en áreas interiores. Están muy bien ambientadas y cuentan con una sólida narrativa. Realmente consiguen que te olvides de que estás jugando a un mundo abierto cuando te encuentras explorando unas retorcidas catacumbas, un laboratorio o una gran mansión. En ellas se suelen combinar fases de sigilo con algunos puzles sencillos e investigación a través de un "modo detective" con el que recopilar pistas y descubrir secretos del entorno. Esta fórmula, sin inventar la rueda, funciona bien y hace que el avance sea muy entretenido, con algunos acertijos y fases de investigación muy interesantes y otras algo menos inspiradas.

La forma en la que avanza la trama es inteligente, dividiendo en actos cada uno de los casos que conforman la historia y dejándote espacio entre ellos para patrullar por la ciudad mientras realizas misiones secundarias. El juego te recomienda el nivel con el que hacer frente a cada acto, sirviendo de guía para progresar en la historia de una forma mucho más orgánica. Este sistema me ha permitido recorrer la ciudad tranquilamente, sin sentir en ningún momento que estaba ralentizando la trama, logrando así que el progreso jugable vaya de la mano de la narrativa.

Cada caso del juego está asociado a un villano del universo de Batman y funcionan como arcos cerrados que completar mientras vamos descubriendo la historia central del juego. En este sentido, Gotham Knights sabe hacer de la necesidad virtud ante la falta del murciélago y a lo largo de toda la historia, la figura de Bruce se refleja en cada uno de los protagonistas.

El impacto de la muerte de Batman

Es una historia que no se limita a ponernos frente a los villanos de siempre mientras desatan el caos en Gotham. Trata sobre la pérdida y nos muestra cómo cada uno la supera a su manera. Tenemos ejemplos como el de Batgirl, que tras haber pasado por un infierno para convertirse en la justiciera que ahora es, trata de sobrellevar la pérdida de su padre y de Bruce luchando por no decepcionarles mientras soporta los desprecios de la ciudad a la que pretende proteger. Nuestros protagonistas se sienten muy humanos, no son unos superhéroes impartiendo justicia; son una familia rota que intenta hacer lo correcto en una ciudad que no se lo pone fácil.

No tardarás en empatizar con cada uno de los miembros del equipo. Sus personalidades son muy diferentes y se muestran muy emocionales a causa de la situación que les ha tocado vivir. Cada personaje cuenta con una historia propia y para descubrirla tendrás que cambiar entre ellos con regularidad. Esto podrás hacerlo cómodamente desde El Campanario, la nueva guarida para los miembros de la batfamilia. Esta sustituye a la batcueva y funciona como nexo para que interactúes con los otros personajes, consultes las pistas de los nuevos casos, personalices tu moto e incluso para echar unas partidas al arcade de Spy Hunter.

Los rasgos de cada uno de los personajes se ven reflejados en el apartado jugable, y no tardarás en descubrir qué personaje es más hábil para llevar a cabo los diferentes desafíos que el juego nos presenta. Batgirl es una experta hacker y puede piratear torretas enemigas y cámaras de vigilancia a distancia, mientras que Robin es ligero como una pluma, se camufla en las sombras y te permitirá llevar a cabo las misiones de sigilo con gran facilidad. Conforme avances en el juego estas diferencias se volverán cada vez más evidentes gracias a su árbol de habilidades, que te permite desarrollar a cada héroe personalizando sus talentos y estilo de combate. Afortunadamente, no tendrás que preocuparte por equilibrar los niveles de tus distintos héroes, el juego ya lo hace por ti.

Superhéroes con mucha dosis de RPG

Este es uno de los aspectos RPG que el juego integra, pero no es el único. En este sentido, Gotham Knights hace gala de suficiente profundidad en su vertiente RPG como para tomársela en serio. No es mero atrezo: podrás crear nuevo equipo con planos y materiales que encontrarás a lo largo de la aventura. También dispondrás de piezas para mejorar el equipo que afectará a la potencia de tu héroe, su salud, además de sumar daño elemental y debilidades. Todo ello organizado por niveles y rareza. Dependiendo del nivel de dificultad que elijas, prestarle atención a todo este apartado puede ser imprescindible para superar a tus rivales.

Los enemigos van variando a lo largo del juego y, aunque se repiten bastante, no dejan de sumar nuevos rivales hasta el final. Algunos me han sorprendido, obligándome a cambiar mi forma de hacerles frente. El desarrollo de los personajes en el combate llega a ser muy satisfactorio y cuando vas llegando hacia el final del juego cuentas con tantas habilidades de combate y te enfrentas a tantos tipos de enemigos diferentes, que resulta muy divertido combinar todo lo aprendido para abrirte paso entre ellos.

El combate recuerda mucho al de la saga Arkham, aunque se siente algo diferente. Es algo más pesado, pero muy rítmico. El juego premia que evites simplemente aporrear el botón de ataque sin más, animándote a que pulses en el momento justo con cada golpe de tus combos para potenciar el daño a través del crítico o recargar más rápidamente los ataques especiales. También tendrás una esquiva que, de la misma forma, ejecutada correctamente, te proporcionará un contraataque demoledor. Habitualmente vas a enfrentarte a grupos de enemigos compuestos por rivales ligeros, otros más pesados a los que romper la guardia o que lanzan ataques imparables. También tendrás que esquivar ataques a distancia y muchas otras sorpresas que no te quiero destripar.

El combate se plantea de manera muy diferente con cada uno de los personajes, más aún si tenemos en cuenta las diferentes variables a la hora de desarrollar las habilidades de cada uno: Capucha Roja puede lanzar una lluvia de balas contra sus enemigos, además de explosivos, mientras que Robin puede despachar a un grupo de rivales sin ser visto o potenciando todavía más el daño crítico atacando desde la retaguardia. Todo esto hace que los combates sean muy divertidos y dinámicos, pero sin duda, el plato fuerte son los jefes finales.

Algunos de los villanos más interesantes de Batman

No son muchos, pero los jefes no pasan desapercibidos. Seguir las pistas de cada uno de los casos te llevará finalmente hasta ellos y lo que encontrarás será una puesta en escena espectacular. La presentación de estos enemigos es impactante, tanto por las cinemáticas como por el entorno del que suelen estar acompañados. No son sencillos, te obligarán a aprenderte sus mecánicas y vigilar bien sus distintos ataques. Olvídate de lanzarte contra ellos sin pensar, en especial a niveles altos de dificultad. Cuentan con varias fases y la situación, como es habitual, no deja de complicarse.

En mi caso, superar toda la historia me ha llevado cerca de 20 horas, aunque he hecho una buena cantidad de misiones secundarias. Si vas más al grano, puede costarte algo menos, aunque también dependerá del nivel de dificultad que elijas. Pero si te quedas con ganas de más, el juego te permite seguir realizando misiones secundarias una vez terminada la trama principal, los desafíos que te queden por completar y enemigos únicos a los que vencer. También se te desbloqueará la Nueva Partida Plus, que reiniciará el progreso de la historia, subirá el nivel de los enemigos, pero conservarás el progreso del personaje y aumentará el nivel que podrán alcanzar los héroes hasta 40.

Ha habido mucha polémica en torno al apartado gráfico de Gotham Knights, especialmente cuando se confirmó que en PS5 y Xbox Series funcionaría a 4K y 30 imágenes por segundo, sin opción de un modo rendimiento que alcanzase esos 60 FPS tan deseables. Pero el juego de título de Warner Bros. Games Montréal está lejos de ser un juego visualmente flojo. No es el gran salto visual que esperaba de un juego exclusivo de la nueva generación, y menos tras haber disfrutado de una Gotham tan espectacular como la de Arkham Knight, pero lo cierto es que Gotham Knigths se ve francamente bien y tiene multitud de detalles que denotan el mimo con el que se ha diseñado el juego.

Gotham City es un escenario enorme, sin tiempos de carga y con una verticalidad tremenda. La ciudad se siente muy real desde las alturas, con edificios enormes hasta donde te alcanza la vista, y el raytracing en los reflejos hace que las calles tengan un brillo fantástico. El diseño de héroes y villanos también está a un gran nivel: es todo un placer detener la acción unos instantes sólo para ver lo bien que les sienta el nuevo traje que acabas de desbloquear.

Pero también destaca el gran número de enemigos que pueden atacarte a la vez, sumado a los efectos que se generan entre explosiones y habilidades de los protagonistas. En algunos momentos la acción llega a ser una locura, sobre todo, si tenemos en cuenta el cooperativo, que puede volver las peleas mucho más llamativas, y más estratégicas en los niveles de dificultad más altos. El juego también recibirá un nuevo modo cooperativo gratuito para hasta cuatro jugadores, pero para eso habrá que esperar hasta el próximo 29 de noviembre.

En mi caso, he jugado a Gotham Knights en una Xbox Series X y, aunque he notado algún tirón en los desplazamientos en moto, además de algo de popping en los planos más lejanos, el juego se siente muy sólido en general. Durante estas sesiones de juegos también me he encontrado con algún bug puntual, aunque han sido algo anecdótico.

Por último, recuerda que el juego llega doblado al castellano y, aunque también puedes optar por las voces originales, se nota que hay mucho cariño en el trabajo de doblaje, en especial con enemigos tan histriónicos como Harley Quinn, que son todo un show en pantalla.