"Otherland es El Señor de los Anillos de nuestra era", así define su creador a uno de los MMOs más ambiciosos de los últimos tiempos. Otherland es mil videojuegos dentro de uno solo, un universo en el que el mundo real y el virtual se confunden, y un título al que habrá que prestar atención en el futuro.
La obra de Tad Williams puede que no sea demasiado conocida en nuestro país, pero en Estados Unidos ha conseguido un núcleo duro de aficionados a la literatura que siguen sus novelas con fascinante atención. Otherland es una de sus sagas más célebres, y ha sido la escogida por DTP Entertainment para ser lanzada en forma de videojuego. Será un MMO para PC que tratará de explotar la complejidad de estos mundos entrelazados, donde nada es lo que parece y donde el ocio puede ser el mayor de los peligros.
Un Millón de Mundos Dentro de uno Solo
En Otherland los jugadores experimentarán el futuro en la piel de un ciudadano que descubre la interactividad con la que los ricos disfrutan de las experiencias virtuales que la vida real no les permite. Como es clásico en este tipo de relatos algo sale mal durante uno de estos viajes, y descubriremos que algunos de los usuarios quedan atrapados en este ciberespacio, con unas consecuencias que pueden incluso costarles la vida.
Comenzaremos el videojuego en Lambda Mall, el primero de los mundos. Se trata de un espacio de juego social dentro del propio título, y es una de sus zonas seguras. Será desde aquí desde donde comenzaremos nuestros viajes a los diferentes universos a través de tubos, donde podremos escoger el camino a seguir y el siguiente lugar que visitar.
Habrá universos PvE y PvP. En los primeros realizaremos misiones junto a otros usuarios, mientras que en los segundos nos enfrentaremos a otros usuarios en arenas donde el juego adquiere un corte de Hack and Slash más evidente. En este Player versus Player podremos incluso infectar con virus informáticos a otros usuarios y robarles código, es decir su energía y posesiones.
Y es que todos los personajes están hechos de código informático, y las modificaciones, progresión del héroe y adquisición de armas se realizan en base a cambios en el mencionado código. Todo, tanto protagonistas como mundos, funciona alterándose como si de actualizaciones de software se tratara. ¿Qué pasa al morir? Nos convertimos en un montón amorfo de código, y volvemos al último lugar donde guardamos partida. El mencionado hecho de que los objetos e ítems pasen a formar parte de nuestro código al obtenerlos, hará que la muerte no tenga penalización alguna en este sentido en el PvE.
De la mano del progreso, aunque en una vertiente totalmente distinta, viene el factor del físico del personaje. Lógicamente nuestra evolución determinará la forma que tenemos en cuanto a las armas y pertrechos que llevamos, sin embargo nuestras acciones también determinarán nuestro aspecto, aunque de una forma mucho más sutil. Lo que los chicos de DTP Entertainment llaman “El Tú Real” será esta manifestación, y supondrá una suerte de reflejo físico de todas nuestras acciones morales. Todavía no sabemos cómo y cuándo se manifestará este “Real You”, pero los desarrolladores ya han confirmado que alcanzará un aspecto verdaderamente monstruoso si optamos por inclinarnos hacia el mal.
De hecho el juego almacena información sobre todo lo que hemos ido haciendo a lo largo de la aventura, y la almacena en los servidores del juego. ¿A qué fin? La idea de los creadores de Otherland es que en base a estos datos los diferentes NPC que nos encontremos en nuestros viajes reaccionen ante nosotros de una forma totalmente personalizada. Esto hará que si, por ejemplo, somos una celebridad por nuestras aventuras y ayudas a la gente, los personajes nos tratarán de forma amistosa y nos ofrecerán grandes recompensas. Si, por el contrario, nos cuesta un gran esfuerzo superar un encargo, al determinado número de intentos el NPC en cuestión optará por proponernos otros objetivos que él considere más adecuados para nuestro nivel.
Con Otherland los MMORPG se tiñen de innovación. Dotado de un hilo argumental robusto y profundo, el título del desconocido estudio europeo DTP Entertainment tiene mimbres, tanto jugables como gráficos, para convertirse en una opción muy a tener en cuenta para los aficionados al rol online.