No es solo que Xbox "les ha robado su futuro", tú y yo nos vamos a perder algo muy bueno por culpa de la cancelación de su MMORPG

La oleada de despidos dentro del ecosistema Xbox sigue dejando secuelas en distintos equipos de desarrollo, y ahora ha sido el sindicato ZeniMax Online Studios United (ZOSU-CWA) quien ha alzado la voz. En un comunicado reciente, los desarrolladores de The Elder Scrolls Online y del cancelado MMO conocido internamente como Blackbird han expresado su frustración y preocupación por el futuro, tras lo que describen como una ruptura abrupta e inesperada de su trabajo con Microsoft. Pese a todo, aseguran que aún conservan sus empleos, aunque el horizonte es incierto.

El proyecto Blackbird, un ambicioso MMO estilo Destiny en desarrollo desde hace siete años con una estética inspirada en Blade Runner, fue cancelado a principios de julio como parte de la reestructuración interna de Xbox. Este movimiento también provocó la dimisión de Matt Firor, veterano director del estudio. Aunque el título jamás fue anunciado oficialmente, ZOSU sostiene en un comunicado oficial que su cancelación ha significado "robarles el futuro" a los 222 desarrolladores que trabajaban en él y a una comunidad que nunca llegará a conocer el fruto de su esfuerzo.

Los autores de The Elder Scrolls no fueron avisados de los recortes

En su comunicado, ZOSU denuncia que la noticia de la cancelación les llegó sin aviso previo ni información clara por parte de Microsoft, generando un estado de incertidumbre entre los trabajadores. "El 2 de julio nuestras vidas dieron un giro sin ninguna comunicación previa de la directiva de Microsoft", reza el texto, que también destaca el papel activo del sindicato para asistir a sus miembros ante la falta de respaldo por parte de la empresa. Pese a todo, recalcan que los empleados del MMO siguen recibiendo sueldo y beneficios, aunque reconocen que los despidos podrían ser inevitables en el futuro.

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La formación del sindicato en diciembre de 2023 ha sido clave para organizar la respuesta de los desarrolladores ante esta crisis. Según explican, ya están en proceso de negociación con Microsoft para asegurar un cierre digno para los posibles afectados y garantizar condiciones justas para quienes continúan trabajando en The Elder Scrolls Online. Además, subrayan su compromiso con los compañeros de otros estudios de Microsoft que también han optado por la sindicalización, como el grupo ZeniMax Workers United.

La cancelación de Blackbird es solo uno de los muchos proyectos afectados por la reestructuración masiva que ha sacudido a Xbox este año, con más de 9.000 empleados despedidos y el cierre de estudios como The Initiative y el adiós a Perfect Dark, junto a la cancelación de juegos como Everwild. En este contexto, ZOSU se posiciona como un ejemplo de resistencia y organización en una industria marcada por la incertidumbre laboral, defendiendo los derechos de unos trabajadores que han generado miles de millones en ingresos para Microsoft.

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