Bloober Team se suma a una oleada de protestas que cada vez incluye a más compañías de videojuegos.
La invasión de Rusia a Ucrania está teniendo cada vez más impacto en la industria del videojuego, con compañías como CD Projekt RED, creadores de The Witcher y Cyberpunk 2077, retirando sus juegos de Rusia junto a los servicios de su plataforma GOG. Ayer mismo, el gobierno de ucraniano solicitaba a la industria un mayor compromiso para sancionar a Rusia y Bielorrusia, poniendo el foco en PlayStation y Xbox.
En un comunicado desde su cuenta oficial de Twitter, el estudio polaco ha confirmado que cesarán la venta de juegos en Rusia y Bielorrusia en todas sus plataformas. "Hemos estado trabajando con nuestros socios para retirar los juegos de las tiendas en estos países: la prohibición entrará en vigencia primero en Steam", explicaba Bloober Team.
Dear community,
— Bloober Team (@BlooberTeam) March 3, 2022
(1/5) As the Russian unprovoked invasion of Ukraine continues, killing defenders and civilians alike, we at Bloober Team have decided to stop selling our titles in Russia and Belarus across all platforms.#BlooberTeam #Ukraine #UkraineRussiaWar pic.twitter.com/kC5b7pXqVq
Nuestros corazones están con el pueblo ucraniano
"Nuestros corazones están con el pueblo ucraniano y este es uno de los muchos pasos que estamos tomando actualmente para apoyarlos". Desde Bloober Team han asegurado ser conscientes de la implicación que tiene estos movimientos para muchos jugadores rusos y bielorrusos, que no se encuentran involucrados con la invasión, aunque se han mostrado firmes con la decisión: "vale la pena tomar cada paso que pueda ayudar a detener la guerra".
Bloober Team han compartido su voluntad para ayudar a acabar con la guerra, ejerciendo presión sobre la opinión pública rusa y bielorrusa a la vez que muestran su solidaridad con el pueblo ucraniano "tanto con palabras como con actos". El estudio ha finalizado su comunicado reivindicando una "resistencia global conjunta que ayude a marcar la diferencia". Del mismo modo, han reivindicado la necesidad de implicación ante el conflicto: "Queremos ser parte de un mundo que no hace la vista gorda ante el belicismo. Y no permaneceremos neutrales cuando haya vidas humanas en juego".