Entre todos los fenómenos meteorológicos que suceden en el planeta, probablemente la nieve sea uno de los más queridos. Y es que ver la ciudad engalanada de un color blanco deslumbrante alegra el día a cualquiera, pero esto implica experimentar unas temperaturas extremadamente bajas que, evidentemente, da buenas razones para enfundarse en una chaqueta lo suficientemente gruesa como para detener las afiladas agujas del frío. Lo que, por suerte, es un paso innecesario en el mundo de los videojuegos.
El caso es que la nieve, dentro del apartado técnico de los videojuegos, es una pieza tan importante como otras dentro de un conjunto que pueda hacernos creíbles los diferentes cambios climáticos. Jugamos, pero también vemos y nos deleitamos cuando algo nos conquista a través de la vista, ya sea el modelado de unos personajes, la belleza de un paisaje o los efectos de la lluvia, algo que abordamos con la intención de mostrar los más espectaculares.
A lo largo de todo este tiempo, también hemos repasado elementos como los cielos e incluso lugares reales recreados dentro de un videojuego, sin embargo en esta ocasión actualizamos y reflotamos este especial en el que hablamos de la nieve. El agua ha sido objeto de debate en incontables ocasiones a la hora de buscar la más realista que hemos visto en nuestra pantalla, así que hoy hemos decidido centrarnos en los juegos con esas hermosas alfombras blancas, uno de los fenómenos meteorológicos que más nos gustan. ¿Cuál es la mejor que habéis visto?
Assassin's Creed Valhalla
¿Un videojuego de vikingos sin nieve? Ubisoft tenía claro que, incluso con la mayor parte de la campaña ambientada en Bretaña, tenía que haber hueco para las condiciones más extremas en Assassin's Creed Valhalla. Por eso hay algunas áreas del juego ambientadas lejos del escenario principal y cubiertas de nieve y, por supuesto, algunas de la propia Inglaterra en sus latitudes más altas son también frías.
Days Gone
Uno de los aspectos más llamativos del poderoso apartado gráfico de Days Gone es el de su cuidado retrato de las diferentes climatologías que sufre su protagonista Deacon en sus aventuras. Uno de los efectos más logrados es el de la nieve, no solo reposando sobre el terreno (donde es alucinante), sino también cuando caen los copos y van formando el manto blanco.
Metro Exodus
Metro Exodus es un viaje en muchos sentidos, y uno que nos lleva de un lado a otro de un mapeado muy potente. Los aficionados comenzaban su andadura en el más gélido invierno ruso, como en entregas anteriores, y antes de ir alternando escenarios más cálidos, disfrutaban de un retrato de la nieve realmente cuidado y tremendamente inmersivo. Una gozada.
Dead Stranding
El videojuego de Hideo Kojima no tiene a la nieve como principal protagonista, pero sí nos lleva a una zona helada que nos brinda uno de los momentos más espectaculares y emocionantes de Death Stranding. Llegar a lo más alto de una zona montañosa en mitad de un temporal de frío, con la música con la que lo haces además, es una de esas experiencias que te dejan sin palabras.
Spider-Man Miles Morales
Gráficamente Spider-Man Miles Morales, disponible ahora en PlayStation y PC, denota en algunos aspectos su condición intergeneracional, pero en muchos otros como su climatología es alucinante sin paliativos. Desde los detalles como los copos cayendo sobre la chaqueta del propio Miles hasta las calles cubiertas de nieve y los copos sin parar de caer, el videojuego hace maravillas en este sentido, especialmente en sus versiones next-gen.
Red Dead Redemption 2
La obra de RockStar nunca falta a su cita con cualquier lista que enumere grandes aspectos técnicos del videojuego. Red Dead Redemption 2 es uno de los títulos más punteros que existen en lo que al apartado gráfico se refiere, en el que cada nevada, huella y efecto climático nos asombra una y otra vez. Probablemente, el entorno nevado más realista que hemos visto en la pasada generación de consolas.
Gears 5
La entrega más reciente de la franquicia de Microsoft nos propuso explorar ubicaciones abiertas como nunca antes habíamos visto en la saga. Y gran parte de ellas tienen lugar en unas montañas nevadas de imponente aspecto. Nunca imaginamos que sería tan divertido cruzar ventiscas a los mandos del Esquife, una especie de trineo de viento que se estrenó con Gears 5.
Rise of the Tomb Raider
Lara Croft no tiene miedo ni a los malvados que buscan darle caza, ni a las bestias que acechan en cada esquina. Por supuesto, tampoco tiene problema alguno en enfrentarse a la naturaleza, y en Rise of the Tomb Raider sabemos perfectamente lo peligrosa que puede ser. Gran parte del viaje tiene lugar en Siberia, y su increíble apartado gráfico nos deja estampas tan bellas como esta.
Horizon: Zero Dawn - The Frozen Wilds
La última aventura de Aloy ha conquistado a miles de jugadores con la vistosidad y colorido de sus escenarios, dando la bienvenida a zonas acuáticas que nos permitían explorar las profundidades marinas. Ya en el pasado, con la expansión The Frozen Wilds de Horizon Zero Dawn hizo lo propio mostrando espectaculares escenarios nevados, ventiscas y otros efectos metereológicos.
Forza Horizon 5
Forza Horizon 5 es una maravilla visual que, a través de escenarios extensos y efectos climáticos, fascina a cualquier persona que disfrute de una sesión de conducción en paisajes bellos. Como puedes imaginar, esto también sucede en los entornos helados que se introdujeron más tarde en el juego y, aunque en la vida real no es aconsejable conducir por encima de la nieve, aquí nos encanta.
God of War: Ragnarok
El God of War de 2018 ya logró impresionarnos con una Midgard variada en entornos, y los jugadores recuerdan con cariño la escalada a una de las montañas más imponentes a las que nos hemos enfrentado. Por supuesto, esto no hace más que mejorar en el más reciente God of War: Ragnarok, donde las ventiscas y la crudeza del frío y la nieve suponen uno de los tantos acontecimientos que suceden alrededor del Ragnarok.
Dead Space 3
Siete años después de su lanzamiento, la tercera entrega de la trilogía de Isaac Clarke aguanta el tipo, y su apuesta por los entornos exteriores nos emplazan a deambular en mitad de temibles ventiscas. Visceral Games logró crear en Dead Space 3 una sensación real de estar atrapados en mitad de un vendaval en el que las fuertes nevadas apenas nos dejaban ver unos metros a nuestro alrededor.
The Division
El looter shooter de Ubisoft nos conquistó a todos durante su presentación en el E3 2013, y volvió a hacerlo en cuanto llegó a nuestras manos. A día de hoy, explorar esa desoladora versión de Nueva York en The Division continúa siendo un espectáculo, especialmente cuando cae la noche y se suceden intensas nevadas. Uno de esos juegos en los que nos quedamos quietos contemplando el escenario.
SnowRunner
En la apuesta de Saber Interactive no solo disfrutamos de una nieve realista; también la sufrimos en cada movimiento. SnowRunner es un simulador de transporte exigente como pocos, en el que las condiciones climatológicas se sienten a los mandos en todo momento. Resulta agradable contemplar sus entornos nevados, pero no tanto enfrentarnos a sus resbaladizas superficies.
Steep
El videojuego de Ubisoft se hizo un hueco entre los aficionados a los deportes más extremos por su propuesta jugable que, aunque no gozó de la larga vida útil que muchos esperaban, lo cierto es que nos regaló un retrato de la nieve muy poderoso. La posibilidad de esquiar sobre ella o hacer todo tipo de piruetas con una tabla en Steep se convirtió en el sueño virtual para muchos usuarios.
The Last of Us y The Last of Us: Parte II
Ya el primer The Last of Us nos dejó con algunos paisajes nevados dignos de elogio, algo que no hace más que mejorar con las novedades gráficas de The Last of Us: Parte I. Sin embargo, lo que Naughty Dog logra en The Last of Us Parte 2 es puro espectáculo, creando estampas tan aterradoras como espectaculares. Ya no solo por las animaciones de Ellie al caminar, pues hay otros detalles increíbles como que la propia sangre de los enemigos abatidos funde la nieve.
Battlefield V
La saga Battlefield siempre ha sido un referente en cuestiones técnicas, así que cuando DICE se propone crear escenarios nevados, pocos juegos igualan el realismo y espectacularidad de su nieve. El mejor ejemplo lo tenemos en Battlefield V, cuyos paisajes helados son absolutamente magistrales hasta el punto de que pocos juegos igualan el realismo de sus nevadas.
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