La aventura vikinga de Ubisoft ha gozado de un gran éxito en las tiendas desde su estreno en noviembre.
Han pasado ya las Navidades, y seguramente más de uno se haya encontrado con una copia de Assassin's Creed Valhalla debajo de su árbol. La última aventura de la saga de Ubisoft se ha consolidado como uno de los éxitos de finales de año, cerrando noviembre como el juego más vendido en España. Cada vez son más quienes se embarcan en su drakkar y ponen rumbo a las costas británicas en esta aventura, y también son más quienes descubren que, a diferencia de las entregas anteriores, en este juego no hay batallas navales.
¿Cuál es el motivo? Pues bien, en una entrevista para Game Informer, el productor del juego Julien Laferrière explica las razones por las que Ubisoft Montréal decidió prescindir de ellas. Y lo más interesante de todo es que esta mecánica sí que iba a estar presente en un principio, pero durante su desarrollo prescindieron de ella por motivos históricos: "Nosotros sentamos los pilares [de la jugabilidad] muy pronto, y nos mantuvimos fieles a ellos. Hicimos ajustes por temas de equilibrado… Pero nos mantuvimos fieles a esos pilares".
"La única cosa que sí que puedo decir que no salió adelante, y que pensábamos al principio que podría funcionar, fueron los combates navales. Descubrimos de hecho que los vikingos no solían participar en batallas navales", explica Laferrière. "Pensamos que tal vez dispararían flechas con fuego como en Odyssey. Pero ellos simplemente no hacían esas cosas. Así que dijimos 'no tenemos mar en nuestro mapa, solo ríos… Vamos a tratar al barco más como un vehículo' ".
Así que la ausencia de las batallas navales no se debe a falta de tiempo en el estudio o a problemas con su implementación. Sino, simplemente, a que los vikingos de antaño preferían ganarse el Valhalla por su mano y hacha antes que con un enfrentamiento en alta mar. Si todavía no habéis probado esta entrega intergeneracional que no deja de sumar adeptos, aquí tenéis nuestro análisis de Assassin's Creed Valhalla.