"Las fabricantes de consolas son quienes tienen mayores exigencias y nos disculpamos por su frustración", añaden.
La escasez de semiconductores surgida a consecuencia de la pandemia ha afectado a todo tipo de industrias, desde la electrónica de consumo hasta la automoción, con un énfasis especial en la de los videojuegos. La coincidencia de una nueva generación de consolas, la demanda inusitada por los confinamientos y la falta de componentes ha dado pie a una escasez de consolas PlayStation 5 y Xbox Series X que, a día de hoy, las compañías no logran resolver. Y las fabricantes de componentes advierten de que la producción no volverá a la normalidad en el próximo año.
De hecho, Toshiba advierte que su producción de semiconductores no podrá afrontar la demanda durante el próximo año, tal vez incluso hasta 2023. "El suministro de chips seguirá siendo escaso hasta, al menos, septiembre del próximo año", afirma Takeshi Kamebuchi, director de la producción de semiconductores, en declaraciones compartidas por Bloomberg. "En algunos casos encontraremos clientes que no serán atendidos plenamente hasta 2023".
Los contratos a largo plazo se nos apilan como si fuéramos nuevos
Con la demanda de componentes electrónicos por las nubes gracias a la pandemia, Toshiba invertirá 60.000 millones de yenes (~460 millones de euros) en los próximos 3 años para potenciar su producción de semiconductores, e incluso se plantean abrir otra fábrica más. Si bien los inversores creen que la demanda caerá antes de que esta inversión dé sus frutos, la compañía no lo ve así. "Normalmente recibimos los pedidos con semanas o meses de anticipo, pero ahora mismo nos llegan cada vez más solicitudes a medio año vista o más allá. Los contratos a largo plazo se nos apilan como si fuéramos nuevos en esto", añade Kamebuchi.
Ninguna fabricante de consolas tiene una satisfacción plena
Obviamente, la compañía debe valorar la situación de cada cliente para priorizar a unos frente a otros, dada la escasez de componentes. Y, en el caso de la industria del videojuego, Toshiba se disculpa con las fabricantes de consolas, ya que ninguna está satisfecha con la producción. "Las fabricantes de consolas están entre los clientes con mayores exigencias y me disculpo de veras por su frustración, ya que ninguna de ellas tiene una satisfacción plena".
Quienes sigáis de cerca los datos de ventas mensuales en mercados como Reino Unido, os habréis dado cuenta de que la máquina más vendida de cada mes depende íntegramente de cuál es la consola con más stock disponible. La demanda sigue siendo muy superior a la oferta, y si bien PlayStation, por ejemplo, ya ha asegurado chips suficientes para todo el año, su dirigente Jim Ryan afirma que eso no basta para afrontar una demanda que sobrepasa sus planes de producción más ambiciosos.