Ahora mismo, PlayStation Showcase es el formato premium de Sony. State of Play está para cosas más modestas.
Lo leí en Twitter al poco de terminar el State of Play de anoche y no me lo borro de la cabeza: "No esperaba nada del State of Play, y aún así me ha decepcionado", comentaba un aficionado. Está claro que para Sony hay dos modelos de comunicación, por un lado PlayStation Showcase es el más premium: Así lo demuestran anuncios como los que se vieron en el de septiembre de 2021, y es que por ahí desfilaron el nuevo juego de Lobezno, Marvel’s Spider-Man 2 o la puesta de largo de God of War Ragnarok o el remake de KOTOR entre muchos otros.
¿Anoche? Anoche tuvimos como grandes puntales el anuncio de Exoprimal (una especie de homenaje de Dino Crisis por parte de Capcom), la presentación de Valkyrie Elysium y The Diofield Chronicle. No tengo nada en contra de ninguno de esos juegos, por supuesto, y de hecho me consta que los Valkyrie Profile de Square Enix son una saga queridísima. No obstante, convocar a la comunidad para un evento de estas características y que los hitos principales del encuentro sean esos, se antoja una recompensa muy poco equilibrada por verlo. ¿Realmente hacía falta un State of Play para esto? Esto crea una sensación en el aficionado muy clara, la cita que no te debes perder es el PlayStation Showcase, si ves o no el State of Play da un poco igual. Pérdida de relevancia manifiesta, lo peor que le podía pasar a algo de estas características.
Es el momento de que los State of Play tengan la relevancia que ahora mismo no tienen
En 3DJuegos ya íbamos con las expectativas templadas, por eso no lo retransmitimos en directo como hacemos en otras ocasiones; no obstante, incluso así, lo cierto es que cabe preguntarse, ¿es esta la línea que quiere PlayStation para comunicar sus productos realmente? Los aficionados, desde luego, ya han entendido el mensaje de no esperar grandes cosas de estas presentaciones, pero lo han aprendido por las malas… decepción a decepción. Por eso cunde tanto la opinión entre los lectores de, "¿hemos cambiado el E3 por este modelo?", y con el verano empezando a acercarse van a abundar esos comentarios.
Una de las mayores tonterías que se leen por Internet es que la prensa quería acabar con el E3. Una memez para cualquiera que tenga dos dedos de frente y pueda deducir por la presencia publicitaria que en esa semana se facturaba casi lo mismo que en un trimestre entero en cuestiones de publicidad y anunciantes y que, además, se hacían los récords de visitas del año. No obstante, sí que lanzábamos desde hacía cierto tiempo el mensaje de que ese modelo admitía muchas mejoras, que la organización era muy pobre en muchos sentidos, y que era comprensible la progresiva pérdida de interés de las compañías por pasar por el aro de la ESA (sus organizadores): con el tiempo fueron borrándose PlayStation, Electronic Arts, Konami y tantas otras… de hecho, ni siquiera Microsoft hacía sus conferencias en el recinto propiamente dicho desde hacía ya algunos años. Y todo lo que iba mal lo conocíamos de buena tinta puesto que no solo hemos asistido a todas las ferias en los últimos años, si no que en Webedia Gaming también fuimos sus socios en la edición del año pasado en exclusiva para España. Vamos, que los problemas los hemos visto desde todas las ópticas posibles.
Desde luego, ahora Sony tiene la pelota sobre su tejado. ¿Es esta la alternativa real al modelo de las grandes ferias como el E3 o la GamesCom? ¿Merece la pena seguir con este modelo de State of Play como versión modesta de PlayStation Showcase? ¿Qué se tiene en cuenta para que un juego de la mal llamada gama media esté en un State of Play o se anuncie de forma tradicional con cuenta atrás, tráiler y nota de prensa? En pocos meses comienza el verano, el momento más habitual para llevar a cabo los grandes anuncios de los próximos tiempos. El escenario es el siguiente: en PlayStation no estuvieron en la GamesCom 2021, llevan años sin apostar por el E3, y puede incluso que ni siquiera haya feria este año si se cumplen algunos rumores que hemos venido escuchando últimamente y que apuntan a la desaparición de la cita californiana. Es el momento de que los State of Play empiecen a demostrar una relevancia y una claridad de ideas que, lamentablemente, ahora mismo no tienen.