Chema Mansilla
Editor - Cine y TVNo tenía mucha ganas de ver Chainsaw Man y he estado haciendo pereza durante seis años. ¿Un chaval que se convierte en un tipo con motosierras en cada extremo de su cuerpo y que se pega con otros bichos estrafalarios? Meh, no es gran cosa. Angustia adolescente y ultraviolencia. Yo ya tengo más de 40 palos y estas cosas me da un poco igual. Pero bueno, el otro día estaba viendo un video en YouTube sobre el trabajo de MAPPA, el estudio a cargo del anime de Chainsaw Man y me dije que merecía la pena darle una oportunidad, aunque solo fuera por ver el buen trabajo que hace siempre esta gente. ¡Ay, amigos!
De la pereza al maratón
Y así empieza esta historia. Los dos primeros episodios no me atraparon de inmediato; reconocí su calidad, pero la chispa no prendió al instante. Sin embargo, había algo en ellos que despertó mi curiosidad, que me animó a seguir adelante. Y lo que comenzó con cierta desgana se convirtió en un maratón imparable: en solo dos tardes me devoré los 12 capítulos de la primera temporada. No esperaba engancharme tan rápido, pero el efecto fue demoledor: Chainsaw Man se coló en mi vida y no me ha soltado desde entonces.
Recobrando la esencia de la adolescencia
Una de las sorpresas más agradables de ver Chainsaw Man fue darme cuenta de que me devolvía esa sensación de entusiasmo que creía perdida con los años. Cada nuevo personaje, cada pelea, cada diálogo, me hacía rememorar la emoción de descubrir anime locos cuando era un chaval, con la misma ingenuidad y curiosidad de cuando era adolescente y veía por primera vez Ninja Scroll o Evangelion. Sí, soy así de viejo.
Y, como si no fuera suficiente con la acción y el gore, encontré en Power a esa amiga loca que te mete en líos y que es una compañía poco recomendable, que no tienes muy claro por qué es tu amiga, pero, bueno, es tu amiga. Todos hemos conocido a alguien así en el instituto o la universidad. Su descaro, su caos y esa personalidad imprevisible me hicieron reír y preocuparme por ella a partes iguales. Y como no concibo la adolescencia sin esos enamoramientos locos propios de esa edad, pues en este anime también he encontrado un nuevo crush: no puedo negar que me he colgado un poco de Himeno. Su combinación de fortaleza, vulnerabilidad y humanidad me conquistó por completo, haciendo que momentos aparentemente cotidianos adquieran un peso emocional que no esperaba en un anime tan brutal y extraño. No me importaría empezar a fumar con tal de pasar algún rato con ella. También puede ser que acabe de descubrir que tengo cierto fetiche con las mujeres con parche. Qué buen momento para volver a ver Evangelion....
Personajes magistralmente escritos
Hablando un poco más en serio, que dos personajes me hayan gustado tanto dice mucho del buen trabajo de escritura de esta serie. Si algo destaca de Chainsaw Man es lo bien escritos que están sus personajes protagonistas. La química entre Denji y sus compañeras, Power y Himeno, brilla en cada diálogo y en cada escena compartida. La noche de fiesta que pasa el equipo es, sin duda, uno de los mejores fragmentos que he visto en anime en mucho tiempo: un episodio cargado de humanidad, humor y realismo que transmite la sensación de estar viendo a personas de verdad, con sus manías, risas y conflictos. Todos hemos tenido noches así.
Lo que comenzó con cierta desgana se convirtió en un maratón imparable: en solo dos tardes me devoré los 12 capítulos
El arranque de la amistad entre Denji y Himeno es una joya. En tan solo un episodio, se percibe la evolución natural de la relación, la construcción de confianza y la empatía mutua. Es sorprendente cómo, en tan poco tiempo, se logra transmitir tanta profundidad emocional, haciendo que te preocupes por ellos, rías con ellos y, en definitiva, conectes de manera casi inmediata. Denji tiene mucho más trabajo de guion acumulado, porque no deja de ser el protagonista de la serie, pero basta una noche de borrachera y un flashback para perfilar a Himeno. Este cuidado por los personajes secundarios hace que Chainsaw Man no sea solo un anime de acción y ultraviolencia, sino una historia con alma y sentimientos que destacan por encima de sus espectaculares escenas de combate. Bueno, o casi, porque no deja de ser un tipo con moto que tiene un demonio motosierra en lugar de corazón y que se dedica a descuartizar a otros demonios, así que a lo mejor sería más correcto decir alma, sentimientos y desenfrenada violencia y mutilaciones por doquier.
Animación de otro nivel
Si hablamos de impacto visual, MAPPA no ha dejado ni un solo detalle al azar. La animación es espectacular, con un nivel de fluidez en las peleas que corta la respiración y un diseño de demonios y criaturas que combina lo grotesco con lo fascinante. Están a otro nivel. Cada plano está pensado para aumentar la tensión, la emoción y la espectacularidad de la acción. Las cámaras se mueven con precisión, alternando ángulos creativos y secuencias en primera persona que hacen que cada enfrentamiento resulte dinámico y cinematográfico.
La noche de fiesta que pasa el equipo es, sin duda, uno de los mejores fragmentos que he visto en anime en mucho tiempo
Incluso los momentos más íntimos y silenciosos están tratados con el mismo cuidado. Y yo soy especialmente fan de los videoclips con lso que se cierra cada episodio. MAPPA logra que las emociones te arrollen como una locomotora, utilizando el lenguaje visual de manera magistral. Una simple pausa en el rostro de un personaje o un encuadre cuidado puede ser más poderoso que cualquier diálogo, mostrando que la animación no es solo técnica, sino también narrativa. Ver Chainsaw Man es, en definitiva, una experiencia que combina lo más visceral del anime de acción con la sensibilidad de una serie de prestigio. El precio, claro, lo pagan los animadores. Y es que hablar de MAPPA es hablar de la polémica que rodea al estudio y a la explotación laboral a la que somete a sus artistas y profesionales, así que entiéndase mis palabras como un homenaje a todos estos creativos y no a la empresa a la que pertenecen.
Una propuesta bizarra y adictiva
Hay un último elemento que hace que este anime sea realmente imposible de ignorar: su propuesta bizarra y adictiva. La mezcla de horror, comedia y drama está equilibrada de manera magistral con personajes grotescos y situaciones de lo más originales: puedes pasar de una escena ultraviolenta a un gag absurdo con Denji y Power, y luego a un momento de ternura o tensión emocional, de una pelea a un chiste sobre tetas, sin sentir que algo chirría. Esta combinación constante de géneros, unida a la riqueza de los personajes y la narrativa, mantiene la atención genera una adicción que no se puede controlar.
La historia, aunque extravagante, es sorprendentemente coherente dentro de sus propias reglas. Cada capítulo aporta algo nuevo: un personaje que empezamos a ver de otra manera, un conflicto inesperado o un momento emocional que te deja pensando o un tipo con una katana en la cabeza que te la lía parda. Y así es como devoras los episodios. He entendido perfectamente por qué Chainsaw Man generó tanta expectación en su momento.
Ahora vivo en un sin vivir esperando que MAPPA estrene la siguiente temporada. Después de ver la primera temporada, me es imposible no desear más, y cada día de espera se me hace eterno. Chainsaw Man no solo ha pasado a engrosar mi lista de animes favoritos de los últimos años, sino que (junto a Dan Da Dan) también me ha recordado lo que significaba emocionarse frente a una pantalla, reír, sufrir y conectar con un anime.
No pierdas el tiempo como hice yo
Si eres como yo, has tenido tus reservas sobre Chainsaw Man, pensando que es algo completamente superfluo e inmaduro que no va a aportarte nada, te lo digo claro: no cometas el mismo error que yo. Dale una oportunidad, aunque solo sea por la calidad de la animación y la reputación de MAPPA. No importa la edad que tengas (siempre que seas mayor de edad, aviso), la serie tiene la capacidad de devolverte el entusiasmo juvenil.
Después de todo, no es solo un anime de acción y violencia; es un trabajo sorprendentemente vigorizante y revitalizante, como el tónico del Abuelo Simpson. Una vez que entres en su universo, como me pasó a mí, no querrás salir. Y créeme, en este caso, la espera de la siguiente temporada es desesperante. Yo de momento ya he picado con el mana original. También me han entrado ganas de empezar a fumar (pero eso es un mal consejo). Si todavía no lo has visto… ya estás tardando. Puedes ver la primera temporada y las dos películas resumen de Chainsaw Man en Crunchyroll.
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