Antes os recordábamos la presencia en HBO Max de una de las peores películas de Batman, pero al menos sus implicados pudieron presumir de haber hecho "algo de pasta". Ese no fue el caso de la otra producción de Warner Bros. basada en un personaje de DC Comics que nos ocupa, la poco memorable Jonah Hex.
Protagonizada por Josh Brolin, que luego tendría más suerte con Deadpool 2 como Cable y, especialmente, en Vengadores: Endgame como Thanos, esta cinta nos llevaba a conocer a uno de los iconos del western en DC. ¿El resultado? Si crees que ¡Shazam! La furia de los dioses ha tenido un mal desempeño en taquilla es que has olvidado los 11 millones de dólares que hizo Jonah Hex en 2010.
¿Qué pudo fallar para tan paupérrima cifra? La producción llegó en un momento donde el cine de adaptaciones de cómic empezaba a vivir su edad de oro, con Iron Man haciendo cerca de 600 millones de dólares, The Dark Knight estrenada dos años atrás, los X-Men aún en boca de todo el mundo y con algunas otras incursiones como la saga Blade, pero Jonah Hex, quizás por su ambientación en el lejano Oeste, no se aprovechó de esa ola favorable. Aunque hubo más problemas, y Josh Brolin ha querido recordarlos en una entrevista.
"No tuvo éxito ni a nivel creativo ni a nivel monetario. Todo el mundo sabe cómo me siento acerca de Jonah Hex. Pero su mayor problema fueron las prisas por contratar a alguien. Recuerdo a Jeff Robinov, con quien aún mantengo una buena relación y que estaba a cargo de Warner Bros. por aquél entonces, decirme, 'Mira, tienes que tener director en las próximas dos semanas, si no, vamos a tener que cancelarlo'. Después conoces a alguien que sabe mucho, [el director] Jimmy Hayward, y recuerdo que no daba buena sensación. Me encantó que estuviese emocionado, pero sencillamente no tenía la experiencia suficiente y no lo trató como imaginé que lo haría, volviendo a casa al final de cada jornada a buscar inspiraciones de tono y ver películas de Scorsese o alguna otra cosa. En cambio, salía de fiesta". - Declaraciones a Variety
Brolin acepta su culpa en el fracaso de Jonah Hex
De esta forma, Brolin explica que el gran error con la película fue la elección del director, una equivocación que admite como propia el actor estadounidense: "La intención estaba ahí, sólo cometimos un gran error con el director. No le culpo plenamente, porque esa fue mi elección. Fue mi mala decisión".
"No es que yo tuviese mucho poder por aquél entonces, pero logré fichar a Megan [Fox], que pensé que era perfecta para ese papel. Tal vez no fuese la mejor actriz del momento, pero para ese tipo de parodia... ¿Ella? ¿En aquél momento? No podías conseguir a nadie mejor. ¿Y Fassbender? ¿Uno de nuestros mejores actores, que había hecho Shame y Hunger? ¿Estás de coña? Malkovich, que acababa de ser desplumado por Bernie Madoff y le pedimos que lo hiciese por un tercio de su caché. Dijo que sí. Joder, todavía estoy en deuda con ellos. Michael Shannon estaba en la película y lo eliminaron".
Por supuesto, Brolin también se acuerda de Warner Bros. y su objetivo de tratar de complacer a la audiencia en las sesiones de prueba de la película, hasta tal punto de terminar por hacer aún menos accesible a Jonah Hex. Confiémos en que estos tijeratazos, que fueron muy frecuentes en el inicio del DCEU con Zack Snyder y David Ayer como principales víctimas, sean ya historia en DC Studios bajo el nuevo liderazgo de James Gunn y Peter Safran.
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