Este viernes los cines reciben el estreno de Avatar: Fuego y Ceniza (Avatar: Fire & Ash), la tercera entrega de la saga de ciencia ficción con la que James Cameron busca seguir haciendo historia en la industria. Sin embargo, esta no será ni mucho menos la última película de la franquicia que dirija; existen planes muy avanzados para, al menos, dos secuelas más que se producirán salvo catástrofe mayor, pese a las críticas de quienes le piden que deje a un lado Pandora por el bien del séptimo arte (dada la riqueza de su filmografía).
Para ser exactos, hace unas semanas se publicó un hilo en Reddit con el siguiente titular: '¿Alguien más siente que es un desperdicio de talento lamentable que James Cameron pase más de 35 años con Avatar?'. Desde The Hollywood Reporter quisieron trasladar esta cuestión al cineasta, quien no dudó en responder de forma tajante: "Me siento realizado como artista, y cuando esos fans críticos se conviertan en cineastas, podrán tomar ese tipo de decisiones por sí mismos; o simplemente pueden irse a la mierda. Es mi decisión, no la de ustedes. Es como decir: 'Vaya, desearía que ella no estuviera casada con el mismo tipo durante tanto tiempo'. No es asunto suyo", sentenció.
Duro, ¿verdad? Es un director que no se muerde la lengua. Pero eso no significa que no vaya a alejarse un poco de Pandora a partir de ahora: "Tengo otra historias que contar, dentro y fuera de Avatar. Lo que buscaré evitar es volver a caer en el agujero de dedicarme exclusivamente a este universo durante muchísimos años. Voy a encontrar otra forma que implique más colaboración. No digo que me vaya a retirar como director, pero voy a dejar de estar tan encima de cada pequeño aspecto del proceso», añadió Cameron en la entrevista.
Más allá de Avatar: los planes de James Cameron
Por estas palabras se deduce que no supervisará tan de cerca el desarrollo y producción de la cuarta y quinta entrega de la saga, lo que le podría dar cierto margen para dirigir o producir algún proyecto independiente. ¿En el horizonte? Last Train From Hiroshima (El último tren de Hiroshima), basado en el libro homónimo que narra la increíble pero real historia de un hombre que sobrevivió a dos bombas atómicas, o The Devils, la novela de fantasía de Joe Abercrombie. Y, por supuesto, aún quedan pendientes las promesas relacionadas con Alita: Ángel de combate y una nueva incursión en Terminator.
Todo esto tendrá que esperar, de momento, hasta 2026. Ahora, toda la atención se centra en una Avatar: Fire & Ash que apunta a recaudar entre 340 y 365 millones de dólares a nivel mundial en su debut. Parecen cifras discretas para una marca que ha cosechado 2.900 y 2.300 millones de dólares con su primera y segunda parte, pero las cintas de esta franquicia no destacan por tener lanzamientos explosivos, sino por su enorme resistencia en taquilla.
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