Doritos Crash Course 2
Xbox 360Doritos Crash Course 2 es la secuela del exitazo de XBLA Doritos Crash Course. Corre, deslízate y salta muros con tu avatar a lo largo de 4 mundos nuevos repletos de obstáctulos y trampas.
Doritos Crash Course 2 es la secuela del exitazo de XBLA Doritos Crash Course. Corre, deslízate y salta muros con tu avatar a lo largo de 4 mundos nuevos repletos de obstáctulos y trampas.
Como juego, Kinect Rush: Una aventura de Pixar es un plataformas al uso, con el extra de conducción, pero realizado correctamente para controlarse únicamente con Kinect. Sorprende la capacidad de "trasladarte" al universo Pixar tocando las teclas adecuadas: las emociones y la nostalgia de volver a ser un niño.
Gunstringer es un juego indudablemente divertido que adapta perfectamente el espíritu Kinect a un juego de disparos. La ambientación es sublime y la variedad está servida, sin embargo, el género y el dispositivo no permiten brillar a The Gunstringer más allá que del propio y divertido concepto de apuntar y disparar que ofrece desde el primer nivel… que no es poco.
Namco-Bandai, junto al mismísimo creador de Pac-Man (Toru Iwatani), consigue lo más difícil todavía: mejorar Pac-Man Championship Edition con una versión "deluxe" que logra la experiencia comecocos más rápida, desafiante y gratificante en -seguramente- toda la historia del ocio electrónico.
Con algunos momentos divertidos y otros no tanto, Kinect Star Wars es un juego efectivo a la par que intrascendente. Los problemas de Kinect a la hora de recoger nuestros movimientos con celeridad pasan factura a un videojuego al que, si perdonamos ese lag ocasional y un planteamiento algo repetitivo y limitado, nos puede regalar momentos de un buen entretenimiento familiar.
Fruit Ninja es un adictivo videojuego en el que se nos lanza fruta a través de la pantalla y nuestro trabajo es el de mover el dedo sobre la superficie táctil de nuestro móvil para partirlas por la mitad y crear combos.
Discutible recuperación del clásico Arcade de Los Simpsons que, en su traslado al año 2012, no pasa de ser un Beat'em Up bastante discreto. Repetitivo, limitado y demasiado breve, el juego sólo encuentra su valor en la exaltación de la nostalgia por la que apuesta.
Este gran clásico de los videojuegos que se lanzó por primera vez en 1980, llega a Xbox 360 en un formato muy similar a la versión original, que además incluye nuevos niveles.