La ciencia ha descubierto por qué se nos eriza la piel ante una película o juego de terror, y tiene beneficios que no imaginábamos

  • Es un sistema de defensa heredado de nuestros ancestros

  • Se trata de un mecanismo biológico mucho más complejo de lo que parece

Freddy
1 comentario Facebook Twitter Flipboard E-mail

Es una reacción innata e incapaz de controlar, especialmente para quienes perdimos el valor día que el esqueleto de la primera Indiana Jones nos certificó que aquello no era para nosotros. En mi caso, tener que analizar el primer Amnesia terminó de demostrar que las películas y juegos de terror no estaban en mi lista de preferencias. Tras un escalofrío provocado por el miedo, el frío o un momento especialmente emocionante, la piel se eriza como si tuviera vida propia. La pregunta es, ¿por qué y con qué objetivo lo hace?

Lo que la ciencia sabía hasta el momento es que se trata de un mecanismo de defensa que hemos heredado de nuestros ancestros. Aquellos que, con mucho pelo corporal más que nosotros, respondían ante ciertos peligros tal y como lo hace un perro o un oso cuando se prepara para atacar o se enfrenta a una situación de estrés.

Por qué se nos eriza la piel ante una película o juego de terror

Con el pelo erizado, los animales que también ofrecen este tipo de respuesta consiguen aumentar su tamaño gracias a la densidad de su pelo, haciendo creer así a su rival que son más peligrosos de lo que realmente son. En cambio, con una capa de pelo notablemente inferior, cuando a nosotros se nos eriza el pelo parecemos un pollo acabado de desplumar. Así que, ¿por qué se nos sigue erizando? ¿Se equivocó la evolución?

La razón por la que no hemos abandonado este mecanismo de reacción igual que hicimos con la densidad del pelo que le daba sentido, está precisamente en cómo el pelo erizado actúa también contra el frío. Al elevarse el vello por un descenso de las temperaturas, su intención es intentar atrapar el aire para crear una capa de aislamiento que nos proteja del frío, pero aunque sigue siendo útil a día de hoy, tiene más sentido en animales con pelo corporal porque su densidad consigue ser más efectivo a la hora de calentarnos.

Por último, un estudio reciente ha descubierto que, por las reacciones generadas bajo la piel, los escalofríos también son responsables de curar heridas y hacer que el pelo crezca. A grandes rasgos su sistema incluye una serie de células que, pese a permanecer en reposo, se activan cuando se produce el mecanismo que nos eriza la piel, y cuando se despiertan parecen enfocadas en reparar la piel dañada y hacer crecer el pelo, probablemente para mantener vivo ese sistema de defensa.

En 3DJuegos | El misterio de los Hobbits de Flores, la especie humana que desapareció hace 50.000 años y que recuerda a los personajes de El Señor de los Anillos

En 3DJuegos | El precio del aceite de oliva va a cambiar drásticamente. Los olivos intensivos siguen una fórmula que los juegos de estrategia llevan años enseñándonos