La fantasía es un elemento casi inherente al propio videojuego, ya que nos permite crear un espacio en el que presentar las ideas que ejecutamos a nivel de gameplay; sin embargo, no todos los géneros fantásticos son iguales, o influyen de igual manera a nuestro medio. En este texto queremos repasar los principales.
Los videojuegos no son un medio definido por sus géneros temáticos del mismo modo que la literatura, el teatro, o el cine pueden llegar a serlo. Para el videojuego su posesión más valiosa es la interactividad, capitaneada por el gameplay que establece la relación que se forma entre el jugador y lo que sucede en pantalla. Por esa razón, la división a través de la cual definimos a cada título suele estar más relacionada con este gameplay y no el trasfondo que les rodea. La saga MassEffect es ciencia ficción, pero se define como una serie de acción RPG.
Hablamos por tanto de videojuegos de acción, de plataformas o de disparos y no de comedias, westerns o género histórico. Sin embargo, privar de importancia a estos géneros temáticos o narrativos sería muy inocente por nuestra parte, pues nos ayudan a entender dentro de qué marco se encuentran los sucesos de un juego, qué podemos esperar, qué es coherente dentro de ellos, o qué deberíamos hacer en su contexto, es decir, nos ayudan a establecer un punto de partida para entender el mundo que estamos jugando, y a los desarrolladores les ayuda a tener una base sobre la que construir sus ideas.
De los géneros temáticos principales que existen es difícil pensar en uno que esté más relacionado con nuestro medio que el fantástico. Ya sea viajando por el anillo espacial del universo Halo, combatiendo limos en la serie Dragon Quest, o sobreviviendo a los chasqueadores en The Last of Us, este género y sus ambientaciones y temas asociados están presentes en la mayoría de nuestras experiencias jugables.
Es un género tan amplio que son muchos los jugadores que, cuando hablamos de baja o alta fantasía o de Steampunk frente a Cyberpunk, se rascan la cabeza con dudas sobre qué diferencia a cada uno de estos términos. Una situación que queremos remediar hoy mismo a través de este texto, en el que, inspirados enormemente por nuestra antigua compañera Elena Fever, hablaremos de los diferentes géneros fantásticos que solemos ver en el videojuego y qué los define.
La difícil tarea de hablar de la fantasía
Suele entenderse como fantasía al género temático que está caracterizado por desafiar la realidad de nuestro mundo de forma directa, ya sea a través de sus leyes naturales, cambiando sucesos establecidos, o directamente partiendo desde un mundo no-real. El objetivo es crear imágenes de aquello que no existe con un propósito concreto, en el caso de un videojuego, podría ser para justificar una mecánica, o para desarrollar su mundo.
La fantasía siempre ha sido una problemática de cara a encasillar obras. Puede ser fácil encajar historias como la de Fable dentro del género fantástico, pero juegos como A Journey to a Small Angry Planet también pueden entrar en dicho conjunto y ambas propuestas no podrían ser más distintas. Para colmo, su concepto es discutido y abordado desde tantos puntos de vista que su propia definición, en ocasiones, se mezcla con la propia ficción o con recursos de estilo. ¿Si la historia transcurre en la imaginación de un niño -pensemos en las teorías de Super Smash Bros de Nintendo 64- es fantasía o ficción?
A todo este batiburrillo, hay que sumarle el debate en torno a la ciencia ficción, que es un género temático derivado de la literatura de ficción y tremendamente hermanado con el género fantástico por datar sus historias desde un punto de vista especulativo de nuestro pasado, o nuestro futuro, y que rompe con asiduidad las reglas naturales de nuestro mundo.
Figuras como Tzvetan Todorov, lingüista y teórico literario de origen búlgaro, se plantean estas preguntas desde un punto de vista etimológico en estudios como el que realizó en Introducción a la Literatura Fantástica, una lectura recomendada para quienes se interesan genuinamente en el tema, pero nosotros vamos a dar un paso atrás en esta guerra de significados para dejar ese tipo de reflexiones a un lado y centrarnos en un punto de vista más categórico que otra cosa. Hablaremos de los diferentes grupos temáticos de la fantasía.
Géneros de Fantasía y Ciencia Ficción en el videojuego
La ambientación temática de una obra interactiva como lo es el videojuego puede influenciar de forma directa no sólo a nivel de ambientación, sino también definiendo cómo se juega a dicho videojuego, sin embargo, una obra puede pertenecer, en función de sus lecturas, a varias categorías de temática fantástica a la vez. Por esta razón, tal vez sea lo mejor comenzar por hablar de la división más clásica del género fantástico: la baja y la alta fantasía.
Alta Fantasía
Cuando pensamos en el género fantástico en su conjunto, normalmente estamos cayendo dentro de lo que se denomina "Alta Fantasía". Esta categoría se caracteriza por suceder en un lugar regido por unas reglas naturales abiertamente distintas al nuestro, en el que el punto de partida es un mundo imaginario, aunque pueda guardar ciertas similitudes con nuestra realidad. También suelen estar caracterizadas por el tono épico y la atemporalidad de sus sucesos, que suelen ocurrir en una ambientación basada en épocas pasadas, aunque no es una "regla" explícita. Obras de referencia como la saga The Elder Scrolls o el universo Dragon Age entran de lleno en esta categoría, pero también títulos como Dark Souls y juegos como Genshin Impact.
Se caracteriza por:
- Partir de un mundo imaginario con sus propias reglas.
- La ambientación atemporal, con predilección por la alta edad media.
- La temática épica o heroica.
Baja Fantasía
La línea que separa la baja de la alta fantasía es un punto de debate candente entre los aficionados al género. Un punto de partida bastante asimilado suele ser que la baja fantasía se caracteriza por derivar directamente de nuestro mundo, compartiendo muchas de las reglas asociadas a él. Elementos que rompen con el orden natural de nuestro mundo son habituales, pero no tienen el mismo protagonismo que en las obras de alta fantasía, de esta contraposición, nace esta categoría. Videojuegos como la serie Mount & Blade u obras como The Wolf Among Us podrían entrar dentro de ella, incluso series como la saga Uncharted podrían formar parte de ella.
Se caracteriza por:
- Presencia de elementos sobrenaturales con un menor protagonismo.
- Fuerte inspiración en una época datable de nuestro mundo.
- Temas poco homogéneos entre obras.
Partiendo de esta escisión podemos categorizar prácticamente cualquier título de temática fantástica, pero, en ocasiones, cuando muchas obras dentro de una temática toman parte, comienzan a aparecer subcategorías de importancia, Dentro del género fantástico, algunas de ellas podrían ser la fantasía oscura, la fantasía científica, o el Grimdark.
Este último, por ejemplo, se caracteriza por retorcer los temas de épica y heroicidad de la alta fantasía, y los sustituye por temas como la corrupción o la pérdida, con obras como Warhammer: The End Times - Vermintide o DOOM como claros ejemplos de pertenencia a dicha categoría; distinguiéndose de otras categorías, como fantasía oscura, por aferrarse con más fuerza a la temática sombría o el terror sobrenatural que otros temas posibles. Obras como Diablo o Bloodborne forman parte de esta categoría. Para la no mencionada hasta ahora, la fantasía científica, obras como Torment: Tides of Numenera o Soma, podrían ser dos posibles ejemplos de ella.
Entrando en el terreno de la ciencia ficción, la cosa se complica, porque la propia ciencia ficción es una categorización de la narrativa de ficción, que ya de por sí tiene una sombra alargada dentro de los géneros temáticos. La forma más habitual de hablar de la ciencia ficción es creando puntos de apoyo con respecto a su momento de partida y cómo de real es la base de la pseudociencia que presentan sus ambientaciones, aunque como hemos escuchado alguna que otra vez "cualquier tecnología lo suficientemente avanzada es magia a ojos inexpertos".
Ópera Espacial
Tal vez la categoría más grande dentro de la ciencia ficción dentro del videojuego, la llamada ópera espacial juega con imaginar qué podría pasar dentro de miles de millones de años, cuando el mundo, tal y como lo conocemos, sólo sea un eco de lo que es hoy. Esta categoría trata temas diversos y tiene ambientaciones que rozan la alta fantasía más que otras categorías de la ciencia ficción, pero siempre suele girar en torno al viaje del héroe o juguetear con tonos "Pulp". Sagas tan queridas como Mass Effect entran de lleno en esta categoría, mientras que obras como Destiny o el imponente Halo participan en ella en mayor o menor medida.
Se caracteriza por:
- Fantasear con el futuro extremadamente lejano.
- Sustentar sus temas en torno al viaje espacial.
- Variedad temática y de ambientación.
Ciencia Ficción Postapocalíptica
Categorizar estas obras es sencillo, pues suelen partir de un punto histórico reconocible e introducen un elemento disruptor que rompe la hegemonía del hombre -o la especie dominante- para introducir una nueva narrativa. La supervivencia y la decadencia desde el punto de partida -no sólo a nivel físico- son habituales. Juegos como los de la saga The Last of Us son claros ejemplos, pero también podrían entrar aquí títulos como la saga Fallout, la serie Metro u Horizon: Zero Dawn.
Se caracteriza por:
- Punto de partida reconocible.
- Decadencia de las estructuras sociales, urbanas y los regímenes de poder.
- Temática centrada en la pérdida, la supervivencia y la supremacía.
Relacionada con esta categoría, podríamos también ampliar a la Ucrónica, que es aquella que se centra en la alteración de los acontecimientos históricos para introducir elementos ficticios en una narrativa; se relaciona con la ciencia ficción postapocalíptica en la predilección por ciertos temas, así como en el punto de partida reconocible, pero se sustituye la decadencia en sí por un nuevo orden social derivado de los cambios históricos. Juegos como Wolfenstein: New Order podría ser un buen ejemplo.
Se distancia de subcategorías como la ciencia ficción distópica por la magnitud de dicho nuevo orden, donde en esta última es habitual la globalización del movimiento o la aparición de poderes tiránicos -con su respectiva lucha social o bélica- como principal antagonista. Juegos como We Happy Few o Bioshock podrían entrar dentro de esta categoría.
Cyberpunk
Una de las categorías más fáciles de encasillar, por pertenecer a la ola "Punk" de la ciencia ficción es el llamado Cyberpunk, caracterizado -como todas las vertientes de esta ola- por partir de un punto reconocible en el tiempo y forjar una ambientación ucrónica en la que un grupo de tecnologías se desarrollan con fiereza. En el caso del Cyberpunk, esta suele ser la biotecnología y la información. Sus temas son variados, pero suelen girar en torno al individualismo, la rebeldía y la lucha social. Como podéis imaginar, está fuertemente relacionada con la distopía. Juegos como Deus-EX o el propio Cyberpunk 2077 forman parte de esta categoría.
Se caracteriza por:
- Punto de partida reconocible. Deformación tecnológica.
- Tistes distópicos. Mezcla temporal.
- Rebeldía e individualismo. Lucha social.
Relacionada con ésta en concepto, pero no en temas o ambientación, podemos encontrar categorías como el Steampunk o el Dieselpunk. La primera es especialmente popular, con un gran hincapié en retrofuturo, y con predilección por el S.XIX en su ambientación, tratando temas parecidos al de la categoría destacada; mientras que el Dieselpunk gira más en torno al S.XX en su primera mitad y los temas habituales de la época. Juegos como Bioshock Infinite o Frostpunk pertenecen a estas categorías.
Sabemos que nos hemos dejado algunas cosas en el tintero, pero atendiendo a la longitud del texto, vamos a optar por dejarlo aquí de momento. Para finalizar, nos dirigimos a nuestros lectores para preguntaros cual categoría te llama más la atención a nivel jugable o temático, así como si tienes algún juego favorito dentro de ella. ¡Nos vemos pronto!