Ninety-Nine Nights es un Beat ‘em up que saldrá inminentemente para la 360. Acción a raudales con dosis de estrategia, cientos de enemigos en pantalla, magia y batallas épicas son sus cartas de presentación.
Microsoft ha estado muy ocupado preparando suculentos títulos con los que dar el salto definitivo en Japón con su nueva y flamante Xbox 360, y uno de esos títulos es el que nos ocupa: Ninety-Nine Nights, más conocido como N3. Desarrollado por Tetsuya Mizuguchi - el creador del divertido Kingdom Under Fire -, N3 se ha convertido en uno de los títulos más esperados de este año por varias razones.
Siguiendo la estela de Dinasty Warriors
En N3 escogerás un personaje que liderará grandes ejércitos con los que combatir hordas de enemigos y todo tipo de monstruos en un precioso mundo de fantasía. Basándonos en lo poco que hemos visto, el juego es similar al emblemático y endiabladamente adictivo Dinasty Warriors. Es decir, un machaca-botones con componente estratégico importante, y donde podrás realizar cosas tan alucinantes como trocear por la mitad literalmente a cientos de enemigos al mismo tiempo, algo espectacular.
Las batallas de este N3 prometen ser algo jamás visto hasta la fecha, según palabras de los desarrolladores, la potencia de la 360 les permite introducir ingentes cantidades de personajes en pantalla de forma simultánea. Mediante combinaciones de botones podremos realizar y encadenar los diferentes combos con un claro resultado final: efectos de partículas por doquier, armaduras abolladas, mutilaciones, y cientos de enemigos caídos a nuestro alrededor. Realmente no han escatimado en medios técnicos.
Un conflicto visto desde distintos puntos de vista
La historia es muy lineal y realmente no tendremos mucha libertad para cambiar el desarrollo de la misma. Esencialmente avanzarás de misión en misión, cada una con su objetivo concreto y determinado.
Podremos escoger entre 7 personajes, 2 de ellos serán orcos, y aunque no tenemos aún demasiados detalles acerca de las características de cada uno, parece ser que los desarrolladores han introducido un componente emocional no muy extendido en los juegos de hoy día: podremos ver el conflicto armado desde el punto de vista orco o humano, lo cual nos permitirá entender desde cada bando las razones y el sentido de la guerra.
En el campo de combate, veremos una interfaz muy compacta que indica la barra de vida y otras barras de energía que se gastarán con los combos que hacemos, y que se repondrán recogiendo las “almas” que dejan los enemigos al caer en combate. Cada personaje podrá ejecutar un combo especial y completamente devastador una vez que tenga una de las barras de energía al máximo. Veremos también un pequeño radar donde se nos indicarán mediante puntos de colores a nuestros enemigos y aliados.
Beat ‘em up y estrategia
Aunque no todo es apretar botones para derribar enemigos, como dije antes, el componente estratégico es elevado y, al igual que ocurre en la saga Dinasty Warriors, las elecciones que tomemos serán decisivas, y más de una vez nos arrepentiremos de haber tomado una ruta en lugar de otra, o haber lanzado a nuestros soldados hacia una muerte segura en lugar de habernos quedado defendiendo una zona.
Al igual que en la saga de KOEI, el número de tropas que puedes controlar es pequeño, aunque las batallas multitudinarias serán épicas. Podrás tener a tu cargo dos pelotones de soldados, incluyendo arqueros, hombres de armas y otros.
En definitiva nos encontramos ante un juego muy interesante, y que promete ser tecnológicamente puntero: este verano lo comprobaremos.