Unos días después de su desembarco en EEUU y rodeado ya de una nube de críticas positivas, decidimos contaros nuestras primeras impresiones a los mandos del nuevo “Shin Megami Tensei: Persona 3”. Innovador, cautivador, inmersivo, fantástico… Es difícil encontrar la palabra adecuada, pero sin duda nos encontramos ante uno de los mejores videojuegos que recibirá PlayStation 2 en su recta final. ¿Vas a dejar escapar la oportunidad de conocer cómo es tu “persona”?
Cada día que pasa, los europeos damos un paso adelante en lo que respecta al tema de localizaciones: cada vez recibimos más videojuegos, mejores traducciones e incluso, en ocasiones, antes que el resto de mercados. No obstante, es obvio que aún nos queda un largo camino por recorrer, y mucho más sabiendo que títulos como el que vamos a tratar hoy (de una impecable calidad, por cierto) es muy posible que no atraviesen nunca nuestras fronteras.
Si en el mundo del celuloide existen películas que se califican con la denominación de cine de autor, tal vez para dar una aproximación sobre este videojuego deberíamos de utilizar una terminología semejante. “Shin Megami Tensei: Persona 3”, desarrollado por la japonesa Atlus, es una obra vanguardista, diferente, novedosa y, en ciertos aspectos, hasta revolucionaria. Perteneciente a una saga de videojuegos que, por razones muy variopintas, desconocemos en nuestro continente, la tercera entrega de la serie Persona nos llega a PlayStation 2 en su recta final de vida y con una crítica que ya quisieran muchos títulos.
Una aventura llena de misterios que resolver
La acción, con un estilo anime muy marcado, nos lleva a la historia de un huérfano adolescente que por diversas circunstancias vuelve a la ciudad en la que vivió desde que era niño. Con un carácter muy cerrado y tímido, nuestro protagonista pronto se irá percatando de los extraños fenómenos que están ocurriendo en la ciudad y, concretamente, en la escuela en la que se ha matriculado: el instituto Gekkoukan. Algunos estudiantes han dejado de ir a la escuela y se rumorea que realizan actos extraños, aquejados de que sus mentes están siendo atormentadas por unas fuerzas sobrenaturales.
Hasta aquí la parte de la historia que podréis seguir por la introducción (con una excelente secuencia anime) y parte de los primeros minutos del juego. El resto es conveniente que lo descubráis por vosotros mismos, puesto que uno de los platos fuertes de "Persona 3" es su trama argumental y profundidad filosófica y de contenido, que en algunos casos se ha llegado a decir que supone una fuerte crítica frente al estricto sistema educativo japonés.
Tu día a día será importante
La estructuración del RPG, al contrario que otros títulos del género, no se divide en acontecimientos que contar con saltos en el tiempo. Aquí viviremos el día a día del personaje, lo que quiere decir que nos tocará jugar partes como alumno en plena actividad académica, como individuo social que sale a comer con sus amigos o, lo más divertido, como miembro de la organización especial SEES, encargada del estudio de fenómenos paranormales.
Cada una de las partes mencionadas tendrá una determinada repercusión sobre el desarrollo de la aventura pero, ante todo, sobre lo que en este videojuego se conocerá como "persona". Este término hará alusión a nuestra forma de interactuar frente al mundo, a cómo los demás nos reconocen a través de nuestras acciones. Por ello es tan importante comportarse de una determinada manera en la escuela, escoger a nuestros amigos o acudir a los diferentes entretenimientos disponibles en la ciudad (habrá un cine, un karaoke, algunos restaurantes...).
Entrando en la “hora oscura”
Pero habrá mucho más. El poder de la “persona” tendrá un papel especialmente relevante al final del día, concretamente, a las doce de la noche, momento en que comenzará la conocida como "hora oscura", un período de tiempo en el que la organización SEES se pone manos a la obra para intentar erradicar el caos que está asolando a la ciudad. Con rumbo a la inhóspita dimensión de Tartarus, nuestro héroe, junto a otros elegidos, demostrarán lo que vale su "persona", la cual podrán ir mejorando a través de un aumento de nivel que, en el caso particular de nuestro protagonista, le habilitará para crear fusiones y nuevas invocaciones.
Las posibilidades serán infinitas, tantas como combinaciones sean posibles. Pero no todas las "personas" resultantes serán igual de efectivas, y es aquí cuando llega una de las dificultades del videojuego: lograr que la "persona" que queremos crear se corresponda con las características de personalidad que hemos adquirido a lo largo de la aventura. Esta es una de las razones por las que son tan importantes cada una de las decisiones que se nos presentan en nuestra vida diaria.
¿Cuánto vale tu “persona”?
Aceptar la invitación de un amigo o quedarnos en clase dormidos en lugar de atender serán tan sólo algunas de las acciones sobre las que podremos ejercer nuestro control. Dependiendo de ellas, podremos encontrar una "persona" con un mayor o menor poder de ataque y capaz de realizar unas magias u otras durante las batallas por turnos, las cuales se desarrollarán a lo largo de nuestro recorrido por Tartarus, donde nos encontraremos con sombras que deambulan por el lugar. Una vez que entremos en contacto con ellas, comenzará la lucha.
Como si de cualquier otro RPG se tratara, contaremos con la posibilidad de hacer un ataque simple o de usar los poderes especiales de nuestra “persona”. Adicionalmente, cabe la posibilidad de controlar las acciones de nuestros compañeros de batalla (siempre manejados por la Inteligencia Artificial del videojuego), pero hasta un límite. Podremos decirles que actúen libremente, que nos apoyen, que nos curen o que permanezcan quietos. Algo parecido ocurrirá en el momento en que atravesemos los pasillos del submundo, donde podremos dispersar al equipo para encontrar antes una salida o hacer que permanezcan en grupo para no sufrir pérdidas personales.
La última genialidad de Atlus… ¿también en Europa?
Como se puede adivinar, el apartado sonoro está a un impecable nivel, con una banda sonora que, conducida por las magistrales manos de Shoji Meguro (involucrado en otros videojuegos como “Trauma Center”), se aleja de los tópicos apostando por un estilo poco común. Dentro de este apartado caben destacar especialmente el doblaje de la voz de los personajes, que sigue la mayor parte de los diálogos del videojuego de una manera más que satisfactoria, ya que la interpretación es, simplemente, de diez.
“Shin Megami Tensei: Persona 3” ya fue lanzado hace un año en Japón y hace escasos días en EEUU. Esta es la oportunidad de Atlus para meter una de sus mejores franquicias en Europa. Teniendo en cuenta la calidad del producto, la temática y la profundidad de la acción, mucho nos tememos que de no hacerlo muchos usuarios lo considerarán un grave error. Sabemos que tal vez nos encontremos ante la recta final de PlayStation 2, pero... ¿por qué no terminarla a lo grande con un título como este?