La comunidad de modders nos tiene acostumbrados a verdaderas virguerías. Desde que se anunció que Source VR Mod Team iba a rescatar la versión de realidad virtual de Half-Life 2 para llevar el proyecto a buen puerto no le quité ni un ojo de encima. He podido probarlo antes de su salida (gratuita) y lo único que puedo deciros es que lo descarguéis y lo juguéis, porque la experiencia cambia radicalmente.
Cuando Half-Life Alyx salió al mercado, muchos jugadores levantaron la voz porque el videojuego solo estaba disponible en realidad virtual. Aunque existen mods para jugarlo en plano, el título de Valve cobra sentido completo cuando lo disfrutamos en realidad virtual. Esa experiencia, como ya os contamos en nuestro análisis, rompió los esquemas de la VR y supuso un antes y un después en la industria.
Era tan bueno Alyx que, después de pasártelo, seguías pensando en él. Ahora, todos aquellos que tengan ganas de seguir experimentando el mundo de Half-Life en primera persona están de enhorabuena. Half-Life 2 VR Mod es una modificación del videojuego original de 2004, en el que podemos vivir las aventuras de Gordon Freeman en realidad virtual. Half-Life 2 es uno de los juegos más queridos de Valve, y también del género, pero vivirlo de esta forma solo aumenta su leyenda. No estoy aquí, 18 años después, para contaros de qué va Half-Life 2, sino para relataros mi experiencia con este mod. Half-Life 2 VR Mod es totalmente gratuito (solo tenéis que tener el título original en vuestra biblioteca) y ha cogido tanta relevancia que Valve permitió el proyecto y tiene su propia ficha en Steam. Y no es para menos, la verdad. Si ya en su momento nos impresionó el juego por su increíble inmersión, acción y buena historia, jugarlo en realidad virtual es ir un paso más allá.
Ya al comienzo, vivir los primeros compases del juego en VR es un sentimiento difícil de transmitir con palabras, teniendo en cuenta, además, que hemos disfrutado de este título durante años de una forma convencional. Pero aquí todo es más visceral, más real, más duro, más impactante. Ver a los guardias abusar de otras personas, o recibir un empujón por su parte, es algo que se siente muy auténtico desde el primer momento. Esto no es Alyx, es evidente (y no vayáis con esa idea), pero la inmersión vuelve a ser una de sus virtudes.
La visceralidad de la VR
Os aseguro que estar en el complejo Black Mesa en realidad virtual es una historia muy distinta
Porque os aseguro que estar en el complejo Black Mesa o en Ciudad 17 en realidad virtual es una historia muy distinta. La sensación de escala, de peligro, de riesgo y de aventura es sencillamente indescriptible. Es casi como jugar a otro título, pero sintiendo que estamos en casa, porque lo hemos disfrutado infinidad de veces. Encima tenemos la suerte de heredar el doblaje en español, detalle que no se suele ver mucho por la realidad virtual. ¡Cómo se agradece no tener que leer subtítulos!
Ver a Alyx delante de nosotros, o a cualquiera de los personajes, así como a los diferentes enemigos que nos vamos encontrando en el juego, da una sensación de presencia muy imponente. Y sí, aunque los gráficos no tienen el nivel que podemos ver hoy en día, lo cierto es que no me han chirriado en ningún momento, más allá de la evidente falta de resolución en las texturas y algún detalle menor. El juego aguanta bien.
La inevitable comparación con Half-Life Alyx
Ya he dejado caer en unas líneas anteriores que es mejor no ir con la idea de que estáis ante un Half-Life Alyx 2, porque está que no lo es (ni podemos pedir que lo sea). Y es totalmente normal, aunque también es lógico acordarse de él y buscar las comparaciones. En Half-Life 2 VR Mod todo funciona de una manera más humilde y es importante tener esto muy claro, porque si las expectativas son erróneas se puede llegar a no disfrutar de esta gran modificación.
Lo más llamativo es que las interacciones con el entorno son casi testimoniales, con muchos objetos que podemos atravesar (algo que, por otra parte, es bastante habitual en muchos juegos de VR). Además, aquellos elementos que sí podemos agarrar o trastear presentan, normalmente, unas físicas algo extrañas, y se pueden dar algunas situaciones rocambolescas. En VR es normal que queramos tocarlo todo (ya es algo que solemos hacer en plano), pero quizá aquí es mejor no ser tan curioso.
También hay más limitaciones con el manejo de las armas, por ejemplo. En Alyx es maravilloso cargar una pistola, aunque esto pueda sonar extraño. En el mod se ha intentado replicar el estilo de recarga y uso de Alyx, con luces y sombras. Hay detalles bastante bien reproducidos y otros que no lo están tanto, por lo que el resultado final no es tan fino como en Alyx, ni a nivel visual ni de interacción (por ejemplo, no vemos bien ciertas animaciones de nuestra mano al entrar en contacto con las armas).
El resultado final no es tan fino como en Alyx, ni a nivel visual ni de interacción
Eso sí, por contra, una ventaja que tiene Half-Life 2 es la mayor variedad de armas del juego, algo que se le recriminó a Alyx. Disparar una pistola siempre es entretenido, pero usar un rifle de francotirador o un lanzacohetes es mucho más divertido. Gracias al arsenal del 2, el combate es más variado (también cuerpo a cuerpo), pero la experiencia será distinta según la configuración y dificultad que elijáis para algunos detalles (por ejemplo, recarga automática o la posibilidad de contar con mirillas láser desde el inicio del título).
Aún así, el mod hereda elementos de Alyx, como una rueda de selección de arma o coger la munición desde nuestro cuerpo, si bien se complica en exceso con ciertos detalles, como encender la linterna, algo muy necesario en lugares oscuros. Os aseguro que, ni después de haber jugado varias horas, tengo totalmente claro cómo se enciende y se apaga, la verdad.
Intensidad no apta para novatos
Como este juego no estaba en absoluto concebido para ser jugado de esta manera, la experiencia es una de las más duras que he vivido en realidad virtual, e incluso si estáis muy acostumbrados a la VR, podéis experimentar algo de cinetosis. Jugar a Half-Life 2 VR Mod es muy intenso y realizaréis multitud de acciones sin filtro, que normalmente sí se cuidan mucho en otros juegos de realidad virtual.
Pero aquí no hay cuidado alguno, claro, y eso se nota. Freeman anda rapidísimo, lo que genera incomodidad (he tenido que moverme a "medio" stick para llevarlo mejor); los enemigos se abalanzan contra ti sin piedad y en ocasiones ese estrés hace que la sensación de mareo esté presente; las fases en vehículos son una absoluta locura, aunque creo que las he soportado bastante bien en general; el juego es realmente duro en VR.
Esto sucede porque incluso algunas acciones habituales están extrañamente complicadas en el mod, como subir escaleras de mano. La incomodidad que crea el hecho de que no es sencillo saltar desde ellas hasta el suelo es bastante alta y da una sensación muy fuerte de frustración. Cuando no paras de subir, caer, bajar… Tu cerebro acaba por resentirse, claro. Por tanto, aunque os recomiendo totalmente que juguéis al mod, hacedlo con cuidado.
He tenido algunas sensaciones de malestar y os digo que es mejor que lo toméis con calma y no os forcéis
Cuando comencé en realidad virtual tuve muy claro que tenía que ir muy poco a poco. De esta forma, unos meses después de comprar mis Meta Quest 2 (las que he utilizado para jugar al mod, por cierto), ya estaba disfrutando de la mayoría de juegos sin ningún tipo de mareo. Aquí sí he tenido algunas sensaciones de malestar (me ha costado jugar más de una hora seguida) y sí os digo que es mejor que lo toméis con calma y no os forcéis (algo extrapolable a cualquier juego de VR, por otra parte).
A pesar de los peros, y de las muy habituales pantallas de carga entre escenarios, hay que reconocer que Half-Life 2 VR Mod es una experiencia brutal y que me hace desear con todas mis fuerzas que Valve se anime a hacer remakes de toda la saga, porque este mod me ha hecho vivir grandísimos momentos que no tienen mucho que envidiar a Half-Life Alyx, y eso es todo lo que busco en realidad virtual. Jugadlo.