¡Overwatch en Nintendo Switch! La sola idea de disfrutar de este videojuego de acción multijugador en cualquier lugar, gracias al modo portátil de la consola, emocionaría a cualquiera pero… ¿qué tal responde el juego de Blizzard en la consola híbrida? Te lo contamos en el análisis de Overwatch para Nintendo Switch.
Suelo apostar por el televisor a la hora de jugar con Nintendo Switch pero en el caso de Overwatch lo tenía clarísimo: el modo portátil era la prioridad. Hablamos de uno de los juegos más exitosos de los últimos años; un divertido y frenético título de acción multijugador que luce espectacular, sí, gracias a su genial apartado artístico y fantástico diseño de escenarios, pero que atrapa como pocos con sus emocionantes batallas y el variopinto elenco de personajes protagonistas que se enfrentan en ellas. Así que la sola idea de disfrutar del juego de Blizzard en cualquier lugar, allá donde fuera, me ilusionaba enormemente… y a la vez también me generaba ciertas dudas. ¿Dará la talla en lo técnico? ¿Se controlará bien la acción? La respuesta es sí; funciona y se ve francamente bien.
Dando por sentado que ya conocéis el juego, y si no podéis consultar el análisis de Overwatch que escribí hace unos años, lo cierto es que fue empezar una partida y horas después ahí seguía; corriendo, disparando, gozando de un videojuego que es pura diversión. Con una plantilla de 31 personajes disponibles y montones de nuevos mapas que se han añadido en los últimos años, cuesta soltar los mandos una vez la acción ha comenzado, y eso dice mucho en favor de un título que en su salto a Nintendo Switch apuesta por los 30fps frente a las 60 imágenes por segundo del original. ¿Las sensaciones? He visto a algunos aficionados lamentar esta decisión afirmando que la experiencia de juego se vería gravemente afectada pero lo cierto es que funciona correctamente y se disfruta sin problemas. Obviamente quien busque la experiencia más fluida y competitiva tiene la versión de PC para dar lo mejor de sí mismo; pero si tu apuesta es jugar a Overwatch en cualquier lugar sin más aspiración que esa, jugar y pasarlo bien, el resultado es bastante bueno.
Overwatch: ¡Juega en equipo!
Overwatch es un título que vive del juego en equipo. Cada jugador desempeña un rol en la partida, y si no cumple su función, difícilmente su equipo obtendrá la victoria. Es por eso que sus combates son tan emocionantes y espectaculares. Es un no parar de disparos, explosiones, rayos y luces de colores volando de aquí para allá. Y es tan frenético, y a veces tan caótico, que la fluidez de la acción lo es todo. Si bien los 30fps están ahí, y se notan, la experiencia en Nintendo Switch es buena. La tasa de imágenes por segundo se mantiene sólida incluso en los momentos de máxima tensión, ya sea que juegues en el televisor o directamente en la pantalla táctil de la consola híbrida. En el modo portátil, eso sí, el campo de visión es más reducido lo que puede dificultar moverse con soltura en las batallas más concurridas.
A diferencia de la versión original, Overwatch en Nintendo Switch introduce nuevas formas de control, siendo la más llamativa el control por movimientos al estilo Wii que nos permite apuntar directamente al televisor usando los Joy-Con. No está mal como ayuda para alcanzar una mayor precisión pero al final resulta imprescindible usar los sticks para dominar la acción, pues los combates son tan rápidos y ocurren tantas cosas a la vez, que no hacerlo sería un suicidio. En esta línea Blizzard también saca partido a los sensores giroscópicos de la consola y el Pro Controller, permitiéndonos igualmente realizar leves movimientos para ajustar la mira y hacer blanco. Es una buena solución que algunos ya dominan (¡maldita Widowmaker!) pero si prefieres un control más tradicional, puedes desactivar la opción. Es más. Tienes libertad para establecer distintos parámetros de juego dependiendo si usas el modo portátil, los joy-con o el Pro Controller de Nintendo Switch.
El juego funciona correctamente y se disfruta sin problemas
Lo bueno es que tienes múltiples opciones para dar con la mejor forma de disfrutar de los emocionantes combates de Overwatch, y es de agradecer. En lo que se refiere al apartado gráfico, el juego de Blizzard también cumple con lo esperado aún cuando habría sido preferible optar por los 60fps a costa de restarle algo más de vistosidad (aunque fuera con un modo rendimiento que ya hemos visto en otros juegos). En general el juego luce bien, con un buen modelado de personajes y un espectáculo de luces y colores que se mantiene intacto. Obviamente las texturas han perdido definición y desaparecen algunos efectos visuales como los reflejos, pero sigue siendo una experiencia muy disfrutable. Los responsables de la saga Diablo han apostado por una resolución de 900 píxeles en el dock y 720p en el modo portátil, y en ambos casos el juego se muestra fluido, aunque en los compases iniciales de la partida la carga de datos es lenta, y eso provoca que en lugar de ver a tu héroe y a otros jugadores, veas luces de colores moviéndose de un lado a otro. Es imposible jugar en esas condiciones, aunque es algo que dura unos pocos segundos.
Ha tardado en llegar pese al interés de Blizzard por adaptar Overwatch a Nintendo Switch desde el mismo lanzamiento de la consola, pero con el juego ya en las manos hay que reconocer que la experiencia merece la pena, especialmente si tu intención es disfrutarlo en el modo portátil allá donde vayas. La conexión a Internet es buena (requiere de Nintendo Switch Online) es buena y en estos primeros días no he tenido problemas para encontrar partidas contra jugadores de todo el mundo. ¿Buscas una experiencia más competitiva? ¿De alto nivel? Entonces opta por el juego de PC o las otras plataformas, donde la acción funciona a 60fps. Pero como versión alternativa, lo cierto es que se disfruta mucho de sus combates. Al quedar descartado el crossplay tampoco existe una diferencia entre jugadores.
Lástima que a pesar de poder vincular tu cuenta de usuario con la de Battle.net no exista progresión cruzada, lo que significa que en Nintendo Switch empiezas desde cero. Solo queda tomárselo como una excusa para jugar y jugar, subir de nivel, y así desbloquear montones de contenidos estéticos, a la espera de que Blizzard decida de una vez lanzar también Hearthstone en la consola híbrida. ¡Podría ser genial!, aunque por ahora nada se ha confirmado.
Overwatch es sinónimo de diversión, también en Nintendo Switch. Blizzard ha realizado un gran trabajo a la hora de adaptar su juego de acción multijugador a la consola híbrida, con nuevas opciones de control para que apuntar y disparar resulte si cabe más fácil y divertido. Poder jugar a Overwatch allá donde vayas gracias al modo portátil dota de gran interés a esta versión del juego. ¿Los 30fps? Se notan, sí, pero no impiden disfrutar de uno de los mejores juegos de acción de los últimos años. Si buscas la fluidez extrema del original y la lucha más competitiva, entonces, el Overwatch que buscas está en otras plataformas.
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- El juego llega cargado de contenidos con más de 30 personajes y decenas de mapas
- Control giroscópico que ayuda a mejorar la precisión. Puedes desactivarlo si lo prefieres
- Los 30fps pueden convertirse en un obstáculo insalvable para ciertos usuarios
- A veces tarda en cargar datos al inicio de la partida y durante segundos los otros jugadores son esferas de luz
