Las aventuras de Ratchet and Clank regresan después de bastante tiempo de silencio. Y lo hacen con un reseteo en toda regla de la serie que, además, supone un nuevo punto de partida para la misma y un empujón encomiable para un género casi olvidado.
No vamos a enredarnos ni a irnos por las ramas. Los usuarios que jugamos al primer Ratchet and Clank, el original de PS2, teníamos unas ganas tremendas de jugar a esta aventura de acción y plataformas. Y más después de haber probado hace ya tiempo una demo bastante avanzada de este mismo videojuego de Insomniac Games, que supone un reseteo en toda regla para la franquicia. ¿Y sabéis qué pensamos después de haber pasado muchas horas disfrutando de esta producción? Pues que ha excedido incluso nuestras expectativas, hecho que por desgracia no suele ocurrir con demasiada frecuencia.
Apoyándose en la película del mismo nombre que aparecerá en nuestro país el próximo 29 de abril, Insomniac Games y Sony han querido aprovechar para realizar un reboot de una de sus franquicias más famosas… antaño. Sí, porque tal y como sucede en el desolador panorama actual de los títulos de plataformas, sean del tipo que sean, esta franquicia no pasaba por su momento más álgido precisamente. ¡Pero bendito reseteo!
Antes de comenzar a desgranar las cualidades lúdicas que ofrece esta maravilla de juego, debemos hablar un poco de su argumento. Sí, porque sin ser especialmente llamativo ni novedoso, conviene destacar un par de aspectos. El primero de ellos tiene que ver con los cambios narrativos que han sido integrados en relación a lo vivido en el original. Y es que si bien mantiene gran parte de su historia, en esta ocasión la misma nos es contada por el Capitán Qwark, uno de los personajes más queridos y simpáticos de esta serie.
Un nuevo punto de vista
Básicamente el título nos cuenta cómo se conocieron el Lombax Ratchet y el robot "defectuoso" Clank y, también, cómo ambos partieron en una misión casi suicida en la que deben salvar gran parte de la galaxia del ataque y la invasión de un ejército de robots comandados por el malvado Drek. Todos aquellos que jugasteis al original reconoceréis parte de la narrativa e historia que ha sido representada en esta renovada edición... pero también debemos afirmar que muchas de sus ramas argumentales son totalmente nuevas, que algunas se han visto muy variadas y, en definitiva, que casi parece una historia completamente nueva. Y si esto sucede con la línea argumental, en todo lo relacionado con la jugabilidad el título ofrece multitud de innovaciones.
Como sucedía antaño en este género, nos encontramos ante un título que expone unos pilares básicos centrados en los saltos y en los combates, sin olvidar por supuesto el elemento adicional que supone la investigación pormenorizada de los escenarios. De esta forma, cada uno de los planetas que visitamos y a los que podemos ir llegando con nuestra nave gozan de un diseño en el que se funden todos estos elementos de manera bastante equilibrada, aunque debemos afirmar que si bien al comienzo las plataformas son el más destacado, a medida que avanzamos la acción va ganando más terreno. Y esto último es algo normal atendiendo al ADN de esta franquicia: la posibilidad de manejar un arsenal increíble.
El tándem que forman Ratchet y Clank es realmente bueno
Al comienzo apenas podemos defendernos usando la Omnillave, pero todo esto va cambiando a medida que progresamos hasta tal punto que, durante la parte final, podemos llegar a ser una especie de súper soldados (o rangers en este caso) armados hasta los dientes.
La variedad de armas que podemos llegar a manejar haría palidecer al propio Rambo. Los programadores han querido homenajear a una de sus sagas más queridas ofreciéndonos los, para muchos, mejores inventos aparecidos durante las pasadas aventuras de estos dos protagonistas. Ametralladoras, lanzallamas, granadas y demás trastos más o menos tradicionales se combinan con otras más originales y curiosas como el Pixelizador o el Molatrón, cuyos efectos son realmente simpáticos y devastadores en cierto modo.
Todas estas armas y muchas más las podemos ir adquiriendo invirtiendo las piezas y tornillos que vamos recolectando durante la aventura, los guitones, que viene a ser la moneda de Ratchet & Clank. Y no sólo eso ya que también podemos (y debemos) ir potenciando dicho armamento recogiendo unos cristales que andan diseminados por los escenarios, aspecto que a nosotros nos encanta ya que por un lado fomenta bastante la exploración y, por otro, añade mucha profundidad al título, más de la que ya posee de por sí. Y es que estamos ante una de esas aventuras en las que gozamos de bastante libertad de acción, pudiendo decidir en ciertos momentos qué rutas tomar y qué misiones principales y secundarias deseamos ir realizando. Además en muchas ocasiones es necesario revisitar muchos planetas una vez desbloqueamos ciertas habilidades, ya que gracias a ellas podemos alcanzar ciertas zonas o deshabilitar algunas barreras protectoras que nos impedían atravesar algunas áreas concretas de los decorados.
De hecho, el tándem que forman Ratchet y Clank es realmente bueno. Juntos (Clank casi siempre va a la espalda de Ratchet) son capaces de efectuar multitud de acciones, desde realizar un doble salto a engancharse a unos dispositivos especiales con un gancho láser, bucear, correr, destrozar diversos objetos o planear por los aires. Y antes de que se nos olvide, las carreras sobre tablas voladoras también es otra de sus actividades predilectas, las cuales por cierto son realmente adictivas.
El sistema de control ofrece precisión máxima y una distribución de botones lógica y cómoda
A pesar de esto que os acabamos de comentar, lo más llamativo de todo es lo bien que han sido recreadas cada una de las dos vertientes de juego principales que posee esta aventura, las plataformas y los combates. Es una delicia controlar a Ratchet mientras se desplaza por los escenarios, manejo que ofrece una precisión máxima y una distribución de botones lógica y cómoda. Y como ya sospecharéis, esta virtud afecta positivamente a la jugabilidad que destila el título.
Por otra parte, los numerosos combates en los que nos vemos envueltos, jefes finales incluidos, son de lo más satisfactorios, siendo a nuestro entender uno de los elementos que más se han visto mejorados en relación al original gracias a la añadidura de diversas novedades.
Innovaciones por doquier
Lejos de conformarse con realizar una conversión más o menos fiel del original pero adaptada desde el punto de vista argumental a la nueva película, Insomniac Games ha realizado cambios muy importantes en su producción que se añaden a los que ya os hemos comentado hasta ahora. Y por eso mismo el salto de calidad que ha dado este título en relación al juego de PS2 es incomparable, hasta tal punto que reiteramos que está muchísimo más cerca de poder considerarle como un título nuevo que como una mera remasterización.
Para empezar, el sistema de control se ha visto muy cambiado. Puede que no lo recordéis, pero el original no permitía la ejecución de acciones tan básicas en nuestros días como es el desplazamiento lateral (strafe), por citar sólo un ejemplo, ofreciendo en este caso una solidez y diversidad mucho más acusada que la experimentada antaño. Pero hay mucho más.
Otra de las incorporaciones más destacadas tiene que ver con las nuevas zonas de juego habilitadas para Clank. Sí, en el original Clank siempre iba a la espalda de Ratchet y era imposible controlar al robot como individuo, algo que en esta ocasión no sucede. En determinadas fases que nos vienen dadas (es decir, no podemos separar a los protagonistas cuando queramos pulsando un botón) podemos manejar a Clank y vivir situaciones inéditas. En estas zonas casi siempre nos toca huir de enemigos o participar en ciertos puzles más o menos sencillos, ofreciendo de esta forma todavía más variedad a un desarrollo lo suficientemente variado ya de por sí.
También nos han gustado mucho la implementación de niveles shooter al más puro estilo Rogue Squadron (salvando las distancias, claro) en las que debemos pilotar nuestra nave e ir realizando las tareas que nos encomiendan, si bien casi siempre tienen que ver con derribar a las naves enemigas que merodean por los escenarios.
En nuestra opinión estas características nuevas que acabamos de comentaros son las más importantes de todas las que han sido añadidas a esta reimaginación del clásico de PS2, pero existen muchos otros detalles más que también se han visto plasmados en esta entrega como el intercambio de unas cartas holográficas que podemos ir coleccionando a medida que avanzamos, la posibilidad de viajar a algún que otro planeta nuevo, la aparición de un par de armas inéditas, la integración de unos 20 minutos de metraje perteneciente a la película…
Por todo esto se nota mucho el esfuerzo que ha efectuado el estudio para crear lo que, sin lugar a dudas, se proclama como una de las mejores entregas de esta saga, título que estamos plenamente convencidos que va a hacer disfrutar a los usuarios de PS4, sean cuales sean sus gustos personales. Pero no sólo eso, ya que también pensamos (o queremos hacerlo, al menos) que puede suponer un gran acicate para que otras compañías se animen a recrear nuevas aventuras de este mismo estilo, es decir, juegos de plataformas 3D sean del tipo que sean, un tipo de juego que prácticamente se desvaneció junto a las consolas de 32 y 64 bits.
Una vez explicado todo esto, seguramente muchos estaréis esperando a ver qué "azotes" tenemos que propinar a esta producción tras la exposición de la lluvia de halagos que acabáis de leer. Bien, pues lo cierto es que en materia jugable cuesta mucho echar en cara problema alguno destacado concerniente a su sistema de juego, control, características o extensión (es un título bastante largo y rejugable, por cierto).
Puede que algunos echen de menos la integración de algún tipo de modo de juego alternativo, incluyendo cooperativo o incluso multijugador competitivo, modalidades que no han sido registradas en este videojuego. Y por otra parte, también es cierto que en algunas ocasiones hemos detectado un par de picos de dificultad algo desajustados, algo extraño en una producción como esta que, de hecho, puede ser disfrutada por casi cualquier usuario. Pero pensamos que para nada estos defectos tienen demasiada relevancia, siendo totalmente intrascendentes en comparación con lo que nos ofrece el juego en su conjunto, que es mucho.
Festival gráfico y sonoro
Aunque hemos estado a punto de comenzar este análisis hablando de su apartado gráfico, finalmente nos hemos reprimido porque pensamos que lo más importante que posee este título sigue siendo su magnífica jugabilidad y la cantidad de cambios introducidos que incluye en relación al original. Pero no os llevéis a engaño: una de las mejores bazas que pone en juego la obra de Insomniac Games es su acabado audiovisual.
Después de The Order: 1886, juego que gráficamente (lo demás es otro cantar…) sigue siendo probablemente el más espectacular de cuantos hemos visto en PS4, Ratchet and Clank se postula como otro ejercicio de músculo y potencia que pone de manifiesto que PlayStation 4 es capaz de darnos muchas alegrías en este sentido. Y ojo, que en este caso pensamos que dicha faceta gráfica tiene más mérito por la sencilla razón de que esta aventura plataformera que nos ocupa posee un diseño de niveles bastante más amplio y extenso.
Podemos aseguraros que hemos pasado más tiempo del que podáis imaginar deteniéndonos a observar el escandalosamente cautivador skyline de Kerwin, observando con estupefacción las impecables animaciones de los numerosos rivales que tratan de acabar con nosotros a lo largo de toda la aventura, la apariencia de la vegetación que nos rodea en diversos parajes, los efectos especiales que emiten la mayoría de las armas más potentes que podemos utilizar, la forma en la que recolectamos las piezas y tornillos, la belleza global que atesora el planeta Novalis …
Más que un portento gráfico, que lo es, lo que nos ha servido en bandeja esta aventura es un cúmulo de sensaciones visuales que pocos títulos han conseguido alcanzar en la Nueva Generación. ¿Exageramos? Puede, pero para que os hagáis una idea, a veces incluso cuesta diferenciar los 20 minutos de metraje que han sido introducidos directamente desde la película (la cual goza de unos valores de producción "pixarianos") de las imágenes que nos ofrece esta producción. Sí, Uncharted 4: El Desenlace del Ladrón superará en este sentido con casi total seguridad a lo que nos ofrece Ratchet and Clank, pero nos parece justo ensalzar la memorable experiencia gráfica que supone sumergirse en esta extraordinaria aventura.
Una de las mejores bazas que pone en juego la obra de Insomniac Games es su excepcional acabado audiovisual
La única pega que podemos poner al título en su vertiente técnica son los ocasionales tirones (no podemos calificarlas ni tan siquiera como ralentizaciones) que se producen cuando se produce mucha actividad en pantalla. Pero vamos, son muy puntuales y para nada suponen una mancha alguna para un apartado espectacular.
Pero esta experiencia no estaría completa si no estuviera acompañada por un apartado sonoro a la altura. Y eso mismo es lo que ha sucedido. Liderado por un doblaje a nuestro idioma excepcional y bien secundado por efectos de todo tipo y una banda sonora más que apropiada, Sony ha puesto todos los medios a su alcance para dotar a este videojuego de unos valores de producción incontestables.
Los seguidores de los juegos de plataformas deberían dar saltos de alegría al comprobar lo que puede suponer Ratchet & Clank para su género predilecto. ¡Y más si la película tiene el tirón suficiente! Estamos ante uno de los mejores juegos de su género de los aparecidos a lo largo de los últimos años y, más allá de recomendarlo (como es evidente), rezamos para que suponga un aliciente para que muchas compañías vuelvan a apoyar a un tipo de videojuegos que vivió su era más gloriosa durante los 32 y 64 bits.
Comprar Ratchet and Clank (2016)- El control rediseñado es perfecto, es una delicia controlar a los dos protagonistas
- Las novedades jugables son tantas que casi parece una aventura nueva
- Gráficamente no le damos más de cinco estrellas porque no podemos
- Las fases aéreas o las protagonizadas por Clank añaden más interés todavía
- El número de armas que podemos utilizar es descomunal
- Podría haber incluido modos multijugador cooperativos y competitivos
- Tirones ocasionales
