Abelardo González
Editor - TechAmazon se ha convertido en una de las compañías que más confianza tienen en la evolución de la inteligencia artificial. El ejemplo perfecto de ello es la presentación de Alexa+, su nuevo modelo potenciado por IA que, por desgracia para los intereses de la firma, no está cumpliendo con las expectativas. Sin embargo, a pesar de dicha situación, tanto los principales responsables de Amazon como sus ejecutivos lo tienen claro: el futuro de Amazon está ligado a la evolución de la inteligencia artificial.
Como era de esperar, esa visión ha traído cola en determinados sectores de la compañía. Según indica TechSpot, los ingenieros de Amazon han revelado que sienten cada vez más presión en su entorno laboral, ya que la IA se ha convertido en el eje central de sus operativos. Así, en línea con los movimientos de otras compañías, estos revelan que algunos equipos han sido reducidos a la mitad (pasando de 12 trabajadores a solo seis), pero ello no ha evitado que tengan que entregar la misma cantidad de código que antes.
La influencia de la IA en Amazon
No es la primera vez que nos topamos con una historia marcada por el impacto negativo de la IA en la moral de los trabajadores, ya que esto empieza a ser muy común en el sector. Según revela la publicación original, los ingenieros aseguran que no hay tanto espacio para la creatividad, dado que el proceso de programación se ha vuelto más automático. Por ende, lo comparan con una línea de ensamblaje, asegurando que los ingenieros dedican más tiempo a revisar código generado por IA que a programar de forma activa.
A pesar del impacto que tiene la inteligencia artificial en el día a día de los trabajadores de Amazon, la compañía no ha impuesto el uso de esta tecnología, sino todo lo contrario: siempre recuerdan que su uso es opcional. Aún así, muchos aseguran que necesitan utilizar estas herramientas, ya que de lo contrario no serían capaces de cumplir con las metas de productividad y, por ende, verían cómo sus evaluaciones de desempeño obtienen puntuaciones muy bajas. De hecho, la propia Amazon ha presumido del impacto de la IA en sus números: mientras han ahorrado el equivalente a 4.500 años de trabajo de desarrolladores, también han conseguido el equivalente a 239 millones de euros anuales en eficiencia.
De esta forma, Amazon no es la única compañía que saca partido a las herramientas de inteligencia artificial, ya que otras empresas como Google también exigen utilizar estos modelos. En líneas generales, la automatización de tareas se ha convertido en un aspecto positivo para las empresas, pero negativo para los trabajadores, ya que las oportunidades de aprendizaje y promoción son cada vez más limitadas. Por ello, algunos expertos estiman que los trabajadores podrían centrarse en comprender al cliente que escribe el código por encima de la escritura del mismo, dando por sentado que la IA asumirá estas tareas.
El peso de la robótica
Aunque Amazon está intentando destacar en el campo de la inteligencia artificial, la compañía ha conseguido convertirse en la punta de lanza de un sector que interesa a todos los gigantes de la industria: la robótica. Desde hace años, la firma ha apostado por la integración de robots en sus almacenes, una situación que le ha llevado en numerosas ocasiones a tranquilizar a sus empleados. Sin embargo, diferentes estudios han revelado que los empleados, lejos de estar tranquilos, piensan que su trabajo es menos significativo.
En una investigación publicada por Eurofound, los datos relacionados con trabajadores en sectores automatizados son cada vez más desalentadores. A raíz de la estandarización provocada por los robots, estos aseguran que su capacidad de decisión se ha reducido, un aspecto que les ha conducido hacia la insatisfacción laboral. Además, también aluden a países como China, lugar en el que los robots alivian las cargas físicas, pero aumentan las preocupaciones relacionadas tanto con el entorno como la seguridad laboral.
Por desgracia, este no es el único punto negativo. En el caso de los trabajadores con sueldos bajos y en posiciones iniciales, estos señalan que podrían llegar a experimentar menor satisfacción e incluso perder habilidades. De hecho, inclusive en sectores como la cirugía o la aviación han hecho hincapié en lo repetitivo que podría ser el trabajo, ya que este pasaría a ser menos estimulante con la presencia de la robótica. Por ello, aunque las empresas apuesten por este tipo de maniobras de cara a mejorar la producción, muchas compañías tendrán que buscar la forma de involucrar a sus trabajadores en la implementación de estas tecnologías, ya que estos podrían verse cada vez más afectados por la evolución de determinados sectores.
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