Seguramente has entrado al texto haciéndote, legítimamente, la pregunta del titular porque hacía mucho que no leías el nombre del protagonista, Cliff Bleszinski, el hombre que representó a la saga Gears of War en los primeros capítulos de la franquicia en la era de Epic Games. La cuestión es que hace mucho que no escuchas hablar de él porque, verdaderamente, está muy alejado del foco mediático de los videojuegos desde hace tiempo. ¿Por decisión propia? Bueno, sí y no: digamos que no tomó las decisiones correctas tras su salida de Epic y que ha dado tumbos entre proyectos interesantes que no tuvieron suerte y proyectos mediocres que tuvieron la suerte que merecían. Pero vayamos por partes.
Comenzaste a perder la pista a Bleszinski tras su salida de Epic Games. En su día se dijo una cosa sobre la salida de la empresa del ahora exitoso Fortnite y años después se dijo otra muy distinta. Parece ser que la entrada de Tencent en Epic no gustó al desarrollador, empresa de la que siendo accionista ya no recibía el crédito y la luz verde de antaño para sus proyectos. Al ver que su poder disminuía con la llegada del capital chino, el desarrollador decidió negociar su salida, algo a lo que Epic no accedió. Ante la negativa, se declaró en rebeldía y dejó de ir a trabajar, una solución que él mismo ha reconocido que no fue la más elegante, pero que definió como su única salida ante la imposibilidad de marcharse de forma más óptima.
La vida tras Epic Games
La noticia saltó en octubre de 2012, y tras tomarse unos meses sabáticos criticando el cansancio sufrido tras tantos años en la industria del videojuego, Bleszinski comenzó a trabajar en su siguiente gran proyecto pronto, anunciado en abril de 2014 la apertura de su nuevo estudio Boss Key Productions. Allí se alió con otro célebre ex de Epic, Arjan Brussee, para trabajar en el que sería el primer gran proyecto del equipo: LawBreakers. Una suerte de hero-shooter en los tiempos de Overwatch y Battleborn. Para entendernos, LawBreakers tuvo algo peor suerte que el juego de Gearbox, a pesar de que ambos títulos eran muy competentes, nunca llegaron a brillar como lo hizo el videojuego de Blizzard, que le eclipsó cualquier oportunidad de éxito a Bleszinski y su equipo.
Mientras tanto, en la orilla de su exempresa, Epic Games lanzó Fortnite y al poco tiempo incorporó el modo battle royale inspirados en PUBG y se convirtió rápidamente en uno de los proyectos más exitosos de la historia. En plena oleada de battle royales, Boss Key Productions no quiso ser menos y se lanzó al territorio de la supervivencia competitiva con Radical Heights. Su lanzamiento se efectuó en abril de 2018 en el Early Access de Steam con unos resultados terroríficos a todos los niveles: pésimo apartado visual, lamentable jugabilidad y un título incapaz de ofrecer algo distinto a lo que hacían los líderes del género en el momento, el ya citado Fortnite y PlayerUnknown's Battlegrounds.
En plena oleada de battle royales, Boss Key Productions no quiso ser menos con Radical Heights
La aventura de Radical Heights puso punto y final a Boss Key Productions en mayo de 2018, momento en el que Bleszinski anunció el cierre de la firma. Explicó en su Twitter entonces que "los videojuegos siempre serán siempre parte de lo que soy y espero hacer algo nuevo algún día (...) sin embargo, necesito retirarme y tomarme un tiempo". Se tomó en serio la declaración, porque poco tiempo después de cerrar las puertas de su primer y último battle royale, Bleszinski saltó a los medios de comunicación tras saberse de su interés por los musicales de Broadway y coproducir Hadestown, que aún sigue deleitando al público neoyorquino en los escenarios.
Biografías, realidad virtual y… ¿bares?
Aunque su carrera en los videojuegos en los últimos tiempos a duras penas se ha visto dedicada a algunas entrevistas en algunos medios y conferencias, la realidad es que más allá de expresar su deseo de ayudar en el desarrollo de futuras entregas de Gears con The Coalition, no ha hecho más desde entonces. Eso sí, ha estado trabajando duro en la redacción de su autobiografía, Control Freak: My Epic Adventure Making Video Games se publicó hace unas semanas. También ha explicado en algunos medios su intención de trabajar en un juego de realidad virtual, pero la dificultad del mercado y lo difícil que es invertir en dicho campo le ha terminado echando atrás por ahora.
Bleszinski también abrió dos bares tras su salida de Epic Games: The Station y The Raleigh Beer Garden en Raleigh, Carolina del Norte, en los años 2014 y 2015, respectivamente. Su futuro más inmediato parece que va a estar en la nueva película de Gears of War que está haciendo Netflix, en la que parece que está haciendo algo más que opinar en Twitter últimamente. No es de extrañar: aunque el trabajo de The Coalition y Rod Fergusson fue destacable, los capítulos más recordados son los que llevaban la firma de Cliffy B. En un momento en el que el estudio de Gears no parece tener al frente a un veterano reconocible de la franquicia, el papel de Bleszinski con la película sería importante para garantizar una adaptación a la altura de lo que los fans merecen.
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