Monitor LG Ultragear Edición League of Legends, análisis. Estética por encima de la media, incluso para el no fan, y con una pantalla OLED sobresaliente

League of Legends es historia del videojuego. Guste o no guste lo conseguido por Riot Games, el MOBA estadounidense no creó escuela, pero sí se colocó como el referente más claro de su género y de ahí no se ha bajado en más de 10 años. Por eso, no es de extrañar que incluso a día de hoy, compañías como LG firmen acuerdos que resultan en ediciones especiales como esta. Y es que sí, League of Legends sigue vivo más vivo que nunca y sí, el LG Ultragear 27GR95QL-B es de esos monitores tan buenos que casi te obligan a comprarlo, incluso aunque no seas fan del juego en cuestión como me ocurre a mí.

Y es que sí, no lo niego, League of Legends me ha resultado esquivo con apenas un par de horas invertidas cuando estuve en mis primeros años de universidad. Valoro lo que ha conseguido y disfruto ver cómo le va bien, pero no por ello soy fan en el término más literal de la palabra. ¿Eso es un problema de cara a disfrutar de este monitor edición especial del LoL? Para nada. Es más, os voy a decir una cosa: si yo como no-fan del juego estoy enamorado de él, de su diseño inspirado en el juego y de sus prestaciones, el que lo sea estará mordiéndose las uñas con tal de tenerlo. ¿Vale la pena el monitor gaming de LG? Veámoslo, pero antes recordaros que el monitor está de oferta por tiempo indefinido y por 879 euros en LG Store.

Así es un monitor diseñado para el fan de League of Legends

Con productos así, normalmente uno piensa "si no soy fan, no es para mí", y es algo que tenía en mi cabeza desde el momento en el que supe que tendría este monitor de LG coronando mi mesa. Aun así, en estos textos suelo poner una pizca de objetividad y subjetividad, por lo que independientemente del diseño o de para quién fuera dirigido, quería valorarlo por como es: un monitor de gama alta y enfocado al gaming en PC y consolas. Dicho esto, estoy enamorado del monitor de los surcoreana.

Sí, he dejado claro que no me muevo en los mismos círculos que los fans de League of Legends y aunque sea un monitor diseñado para ellos, no deja en la estacada a quien se interesa por él. El LG 27GR95QL-B remodela su estética con motivos inspirados en el MOBA, desde el propio logo en la peana del monitor, lo que la hace indiscutiblemente bonita y relega a un segundo plano la posibilidad de instalar un brazo anclado a la pared; hasta la parte trasera del chasis.

Este está inspirado en Hextech, con una iluminación —solo podemos cambiar la iluminación inferior del panel— y una construcción en plástico mate con una tonalidad violeta mezclado con líneas doradas que dan un empaque más premium; todo ello acompañado de los iconos de Aniquilador, Controlador, Luchador, Mago, Tanque y Tirador.

El resultado final es un producto a la altura de lo esperado para el fan de League of Legends, pero que no desmerece al desconocedor de su mundo o aquel que apenas ha jugado al MOBA. Hablamos de un periférico bonito, que entra por los ojos y que me tiene encandilado aún sin saber bien a qué se refiere toda su iconografía. A esto se suma un OSD, o interfaz en pantalla, característico de LG e inspirado, igualmente, en League of Legends. En este aspecto, apenas hay motivos o añadidos que dejen huella, pero la compañía surcoreana sabe lo que hace en términos de software y ver incluso el logo del juego al apagar o encender el monitor, así como en el OSD del propio panel, hace que hablemos de un producto cuidado hasta el extremo que no se deja llevar por diseños.

Lejos de estos motivos, el monitor tiene el mismo estilo que el LG Ultragear 27GR95QL-B original. Un panel de 27 pulgadas con bordes mínimos para un producto de esos de "todo-pantalla", pero también con todo pensado para ser tan bonito como funcional en todos los aspectos. Por ejemplo, el bisel que sobresale de la parte inferior con el lector de infrarrojos del mando, es donde está colocada la ventilación de la pantalla, dejando los frames libres de añadidos que rompan la estética.

Además, y algo que valoro enormemente, es que las conexiones —2 HDMI, conexión jack de 3.5mm, DisplayPort y conexión de corriente— están colocadas en horizontal bajo la hendidura de la peana, dejando el espacio entre el bisel inferior y la mesa casi libres de cableado. Eso sí, el brazo es estático, no se puede modificar o abrir para dejar pasar los cables, pero su disposición horizontal hace más fácil su uso para los que no nos gustan los cables.

El mejor panel 1440p OLED que he probado en muchísimo tiempo

En términos puramente técnicos, estamos ante una colaboración entre LG y Riot Games que supone un lavado de cara al monitor LG Ultragear 27GR95QE-B lanzado el pasado verano en Estados Unidos. Es decir, todo lo que mencione de él más allá de los motivos dedicados a League of Legends se puede extrapolar a aquel panel no inspirado en el LoL. Dicho esto, hablamos de un nuevo integrante en los paneles OLED de 27 pulgadas que rozan o superan ligeramente los 1.000 euros.

Estos se están convirtiendo en un estándar, y aunque aún hay algunos que necesitan interesantes mejoras, este LG Ultragear es capaz de sacar pecho con un panel sobresaliente. El acabado mate de su pantalla no solo añade un toque elegante, sino que también se encarga de mantener a raya los molestos reflejos que suelen interferir con la experiencia visual.

Equipado con un panel OLED, el panel de LG ofrece negros absolutos y una relación de contraste infinitamente alta, lo que realza tanto el contenido estándar (SDR) como el HDR. En términos de reproducción de colores, el dispositivo de LG llega con 99,7% de sRGB, el 94,3% de DCI-P3 y el 87% de Adobe RGB. Pero ¿qué significa todo este baile de números a la hora de jugar? Una experiencia a la altura de lo que las siglas "OLED" pueden significar. He probado en juegos como Horizon: Forbidden West para PC, con una de las paletas de colores más extensas que puedes ver en un videojuego, y el resultado es fenomenal; aunque diré que he tenido que aumentar ligeramente el tono rojo, pero eso es preferencia personal.

En juegos como Dead Space Remake o The Callisto Protocol, con tonalidades más frías y unos cambios bestias entre gamas cromáticas, con predominancia de zonas oscuras, incluso en SDR el resultado es sorprendente. En este aspecto, y para una mejor experiencia, destacar que el panel de LG cuenta con dos modos pre-calibrados en el sistema bastante acertados. Entre ambos, aprovecharía mejor el "Calibración 1", con unos resultados por encima de lo esperado en término de fidelidad de color.

En cuanto al brillo y su posibilidad HDR, el panel me ha tenido a medio camino entre enamorado y sorprendido. En las pruebas de calibración de pantalla, he podido alcanzar un brillo de 404 nits en modo SDR sin quemar la imagen. En cuanto al HDR, esperaba una configuración pobre, y es que los Ultragear no suelen sacar pecho del Alto Rango Dinámico, pero me he comido mis palabras. Si bien en Windows podemos extender el nivel de candelas hasta rozar los 1.000 cd, he conseguido un nada desdeñable estándar de 652 nits en modo HDR para conseguir una experiencia visual a la altura de lo que podrías esperar con un panel así, sin dinamitar la calidad general de la imagen.

En consolas, por su parte, donde la calibración HDR no depende de Windows, el resultado es de 10. En juegos como Marvel's Spider-Man 2, la experiencia visual con el Alto Rango Dinámico activado es soberbio. Además, el monitor goza de VRR, o Variable Refresh Rate, algo que nos da una segunda vida en juegos compatibles y no compatibles. Esto se traduce en que, por ejemplo, Rise of the Ronin, con uno de los estándares a 30 FPS más duros de ver a máxima calidad, el monitor pueda hacer variar la frecuencia de actualización de la imagen para conseguir una imagen más fluida, y se nota. Sin duda, no sé cómo he podido vivir sin el VRR.

Cómo no, con un monitor LG OLED, al igual que aquel LG 45GR95QE, este Ultragear se preocupa por su salud y lo deja bien claro. Para evitar el burn-in típico de los OLED, cada cuatro horas de uso te pedirá que lo apagues para ejecutar una limpieza de píxeles, algo que hará automáticamente si pasado ese periodo apagamos la pantalla. Aun así, tenemos su menú dedicado en el OSD para el mantenimiento del panel, todo ello de fácil acceso gracias a su mando.

De hecho, con esto último, os lanzo una reflexión que me he hecho a mí mismo, ¿por qué no todos los monitores de 1.000 euros tienen mando? Un mando no solo viene de fábula para calibrar y analizar un monitor, sino que prescindir del clásico joystick en el chasis de la pantalla no solo da un aspecto mucho más cuidado al conjunto, sino que te permite tener un software más estilizado y personalizado. Una pena que no todos hagan como LG.

¿Vale la pena el monitor LG UltraGear de League of Legends?

Sí, sin lugar a dudas. Hacía tiempo que no daba una respuesta tan categórica a una pregunta, pero es que el trabajo de LG con este Ultragear 27GR95QE-B es soberbio. Dejando a un lado todo lo que tiene que ver con el monitor en sí, la colaboración con League of Legends ofrece un acabado visual llamativo y diferente, pero sin llegar a desentonar. Está a medio camino entre despuntar con el riesgo que supone su acabado que emula el metal Hextech con acabados violetas, negros y dorados, pero a la vez sobrio como ninguno. Para el fan del MOBA, es una absoluta delicia.

También para el desconocedor del juego, y es que lejos de su estética inspirada en el LoL, que claramente embellecen el conjunto, tenemos un dispositivo premium de esos en los que pagas cada euro con la certeza de estar bien invertido. Un buen panel, con un estándar OLED de 27 pulgadas y 1440p, suficiente para el más entusiasta sin tener que desembolsar más en monitores 4K, pero a su vez con una representación del color y un HDR que hace envidiar a otros. ¿Quieres una pantalla bonita? El LG 27GR95QE-B te cubre. ¿Quieres una pantalla bonita y buena? El LG 27GR95QE-B está para servirte.

También recomendamos...