Si no fuera porque ha quedado registro en internet, nadie creería que existe. El lugar más raro presente en un juego de Pokémon es una anomalía que la mayor parte de los jugadores no ha visto jamás. Cuando te lo cuentan, suena casi como una leyenda urbana. Es todavía más inverosímil que aquella historieta del Mew debajo del camión. Sin embargo, es tan real como la vida misma. Hay una isla oculta que puede aparecer en los juegos de tercera generación, pero que solo lo hace con una probabilidad de una entre once mil. Es difícil dimensionar una estadística tan desfavorable, así que lo vamos a decir de otra forma: tendrías que jugar todos los días durante 20 años para tener una probabilidad del 50% de verla al menos una vez.
El lugar más extraño de la saga Pokémon
La Isla Espejismo es una de las rarezas más grandes de los videojuegos y su rareza se debe, como tantas cosas en los juegos de Pokémon, a un problema matemático. "Todos los días se genera un número aleatorio entre 0 y 65.535. Si este número coincide con los dos primeros bytes del PID [número de identificación oculto a los jugadores] de un cualquier pokémon en el equipo del jugador, la isla aparecerá (...) La probabilidad de que un solo pokémon active la Isla Espejismo es de 1/65.535, mientras que la probabilidad de que un equipo entero la active es de aproximadamente 1/10923. Esto, suponiendo que ningún pokémon en el equipo comparta tenga los mismos dos primeros bytes en su PID", cuenta la wiki de Pokémon con respecto a la isla.
Las probabilidades de encontrar la Isla Espejismo pueden aumentarse sin hacer trampas hasta, aproximadamente, una opción entre 170. Sin embargo, este incremento en la probabilidad llega acompañado de un aumento considerable en el tiempo de juego. Básicamente, los jugadores tendrían que contar con 420 criaturas diferentes en el PC y probar con todas y cada una de ellas. Es una dedicación temporal muchísimo más elevada de lo que parece. Si tenemos en cuenta unos tres minutos por cada cambio de equipo, tendríamos que jugar unas 420 horas repartidas en 120 días para asegurarnos, de nuevo, un 50% de posibilidades de ver la isla. Todo parece estar en contra de los jugadores hasta un extremo demencial.
Vista aérea de la Isla Espejismo (vía Wikidex).
Si no conocéis la historia, este reto de probabilidad os hará pensar en que la isla tiene esconde una gran recompensa. Sin embargo, nada está más lejos de la realidad. La isla no es particularmente bonita y el único pokémon que aparece en ella es Wynaut. Eso sí, es el único lugar en donde aparece la Baya Lichi, cuyo efecto en combate es aumentar en un nivel la estadística de ataque de una criatura cuando sus puntos de salud estén por debajo del 25%. Ni siquiera es particularmente útil. Este tipo de objetos se utilizan de forma casi exclusiva en competitivo y lo más habitual es apostar por la Baya Aslac, que se activa de forma idéntica pero aumenta la velocidad en lugar del ataque.
La inspiración real de la Isla Espejismo
Casi todas las cosas de Pokémon que no entendemos se explican del mismo modo: se basan en una historia real. En el caso de la Isla Espejismo, una de las teorías principales es que está basada en un arrecife de coral conocido en Japón con el nombre de Yabiji, que solo emerge a la superficie terrestre unos días al año por culpa de las mareas. La teoría tiene sentido, aunque no termina de encajar por las probabilidades. Esta ubicación en los juegos de Pokémon tiene unas posibilidades remotas de aparecer, mientras que su supuesta contraparte en el mundo real puede verse todos los años, según dice la tradición local, en torno al mes de marzo.
La baya que podemos conseguir en la Isla Espejismo ni siquiera es particularmente útil.
La inspiración española en Pokémon Escarlata y Púrpura me ha hecho entender que, muchos de los elementos presentes en los juegos de Game Freak, se basan en más de una cosa. Japón es un país con miles de islas y una extensa literatura dedicada a territorios fantasma, desconocidos o que han desaparecido con el paso de los años. Incluso existe el caso de una isla –que por fechas no puede ser la inspiración principal– que fue descubierta en 1987 y desapareció años después (Esanbe Hanakita Kojima). Nadie sabe exactamente cuándo pasó, aunque se dieron cuenta en 2018. Es solo mi propia teoría, pero creo que la Isla Espejismo mezcla todas esas historias del país.
La Isla Espejismo es una rareza y, de hecho, cambió en Rubí Omega y Zafiro Alfa. Los remakes sustituyeron la idea de un lugar casi imposible de encontrar por una serie de zonas que cambiaban cada día. Así, los jugadores sabían que siempre habría un lugar extraño que explorar y solo debían encontrarlo utilizando la mecánica de ultravuelo. Además, cada una de estas áreas incluía algún objeto raro y, generalmente, criaturas difíciles de atrapar en otros lugares. En ese sentido, suena mucho más interesante que un lugar remoto al que solo puedes acceder tras cientos de horas de juego repetitivas o décadas de intentos diarios.
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