La saga Resident Evil siempre ha jugado con los límites del miedo, el body horror y la ciencia ficción, pero según Koshi Nakanishi, director de Resident Evil 7 y del próximo Resident Evil Requiem, el séptimo capítulo quizá se pasó de frenada con lo primero. Aunque se considera, al menos entre los fans, como el juego que sacó a la saga de un lugar complicado, sus influencias de La Matanza de Texas, La Bruja de Blair y otros referentes del terror independiente alejaron a muchos de este juego.
Durante su participación en Gamescom 2025, Nakanishi explicó a GameInformer que la cámara en primera persona de Resident Evil 7 fue diseñada para ofrecer la experiencia más inmersiva y terrorífica posible. "La mayoría de medios y jugadores coincidieron en que fue un juego increíblemente aterrador, posiblemente demasiado", admitió el director. Según sus palabras, algunos jugadores ni siquiera pudieron completar el título, y otros ni siquiera se atrevieron a empezarlo, por lo que ha aprendido la lección.
La cámara en tercera persona de Resident Evil 9: Requiem ayudará a los jugadores
Para abordar esta situación, Resident Evil Requiem permitirá a los jugadores alternar entre primera y tercera persona. Este último enfoque sirve como un "margen de seguridad" frente al miedo intenso: al tener al personaje visible en pantalla, los jugadores pueden distanciarse ligeramente de la acción, gestionando mejor el estrés y las situaciones de horror. Nakanishi lo define como una manera de "hacerlo un poco más fácil de sobrellevar" sin diluir la tensión que caracteriza a la saga.
El director también señaló que, a pesar de esta opción, la intención no es reducir la intensidad de los sustos. Resident Evil Requiem seguirá apostando por el terror de alta intensidad que ha hecho famosa la serie, pero con mayor accesibilidad para quienes se sienten abrumados por la perspectiva en primera persona. La inclusión de esta alternativa busca atraer a un público más amplio, manteniendo la esencia del survival horror.
El lanzamiento de Resident Evil Requiem está previsto para el 27 de febrero de 2026. Las declaraciones de Nakanishi anticipan una experiencia ajustable que combina la intensidad del survival horror con opciones que facilitan el juego para todo tipo de público, garantizando que nadie se quede atrás frente a uno de los juegos más relevantes de la saga.
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